Code Breaker | JinNam {Binary Code #3}

Acertijo #11

Sintiendo calidez en el pecho, Joon se desvistió y volvió a vestir completamente de negro, terminando el conjunto con la chaqueta en cuestión, que descansaba floja sobre sus hombros pero algo ajustada en los bíceps. Seokjin lo miró con una sonrisa de aprobación y no mucho después, cuando el mapa estuvo dibujado sobre la mesa, se levantó a imitarlo.

Con las armas escondidas dentro de la ropa, salieron del hotel en dirección a la universidad.

El mapa resultó totalmente innecesario, pues el ex agente ya lo tenía memorizado y los guió en la oscuridad al punto ciego de las cámaras en un extremo del campus y sin mucho más que tomar un pequeño impulso, el mayor se agarró de la parte superior del portón y escaló, sentándose sobre el metal para extender una mano a Joon y ayudarlo a subir.

—¿Cómo haces para seguir en forma? Nunca te veo haciendo ejercicio.

—Ahora hago otro tipo de cardio —bromeó Jin guiñándole el ojo al menor, que solo rodó los ojos con la implicación y lo acompañó al saltar al otro lado, aterrizando en el pasto.

Se movieron lo más sigilosamente posible por el terreno, siempre manteniéndose en las sombras y evitando a toda costa cualquier poste de luz escondiéndose tras arbustos, carteles y bancos. La medianoche estaba al caer, así que nadie se movía por los alrededores, excepto por el ocasional guardia de seguridad que estaba demasiado adormecido para fijarse bien.

Apenas estuvieron escondidos bajo la sombra de un árbol y se aseguraron de que nadie estaba en las cercanías, Seokjin extendió el mapa que dibujó en el hotel sobre el pasto frente a ellos. Sin necesidad de que dijera nada, Namjoon lo iluminó con la linterna del teléfono.

—El campus es bastante extenso —señaló Jin, rodeando todo su perímetro con un dedo—. Podría estar en cualquier parte.

—Creo que si estará en algún lugar, será donde tenga acceso a una computadora o quizás a un laboratorio —razonó Joon buscando con la mirada dos puntos y señalándolos uno tras otro.

—El dormitorio queda totalmente descartado. Dudo que pueda estar allí a sus anchas sin ser parte del estudiantado —tras sacar esta conclusión, Seokjin chasqueó la lengua—. ¿Cómo pudo esconderse en una universidad para empezar? ¿Es que aquí la seguridad no existe?

Namjoon se encogió de hombros.

—Bien pudo haberse colado entre los profesores hackeando la base de datos de la universidad. Con él es difícil sacar una sola conclusión.

—Lo que quieres decir es que solo él se entiende y estoy de acuerdo —asintió el mayor—. Venga, vamos al edificio de informática primero.

En lo que corrían en dirección al edificio en cuestión, Namjoon comenzó a notar como algo le golpeaba el pecho con cada movimiento de la chaqueta pero a pesar de palpar de nuevo la tela un par de veces, no fue capaz de encontrar ningún agujero por el que algo se pudiera esconder. Podría haberle preguntado a Jin, pero para cuando abrió la boca ya llegaron al punto.

Para suerte de ambos el salón de informática, donde un montón de computadoras estaban apagadas sobre sus mesas se encontraba, tenía unas ventanas bastante amplias y no necesitaron más que arrimarse a ellas y observar hacia el interior para tener una buena vista. Todo estaba a oscuras y ni uno solo de los aparatos parecía encendido.

En cada rincón no había nadie ni señales de que lo hubiera recientemente.

En silencio se encaminaron hacia el laboratorio del edificio de Ciencias, pero el resultado fue exactamente el mismo.

Sin más opciones que detenerse, se escondieron tras el mismo edificio y volvieron a sacar el mapa y ambos empezaron a inspeccionarlo en busca de una idea o algo que les fuera lo suficientemente coherente para que sirviera de pista.