Estúpido prodigio #III

Capitulo 37:

Me renuevo debajo de las mantas, hoy no desperté de madrugada. Un peso sobre mí removiéndose me despierta de golpe seguido de un flash de cámara. Era Oliva que tomaba una foto de la escena divertida mientras que un Oliver molesto mira desde el marco de la puerta. Supongo que para ellos la escena era peculiarmente graciosa.

Franck estaba sobre mí como siempre solía hacerlo, su cabeza estaba sobre mi pecho mientras su brazo me abrazaba y tenía una pierna suya al rededor mío completamente dormida. Trato de disimular una sonrisa como si fuera algo graciosos y nada vergonzosa la posición en la que me encontraba .

-¿Qué pasó aquí? -pregunta Oliver.

-Nada que te estés imaginando.

Franck suspira y esa es mi señal de que estaré muerto en menos de cinco segundos. Sus ojos se abren y levanta la mirada hasta mí, sus ojos adormilados me miran por unos segundos  de deja caer otra vez sobre mi pecho dejándome sin aliento por un par de segundos.

-Franck, voy a imprimir la foto, quedó muy mona.

-No es necesario, hay muchas parecidas y algunas mucho más vergonzosas. Ília  diles que salgan de mi cuarto hace mucho que no duermo bien.

¿Que mierda pasó? ¿Y mi golpe por haberme dormido en su cama con ella?

Creo que me doy mucha importancia. Suspiro agotado.

-¿Ilia? -Olivia se da cuenta de quien soy y queda con la boca abierta -¿Quien rayos eres y que pasó aquí?

-Yo me voy -no quería estar ahí y dar explicaciones de algo que fue tanto hermoso como doloroso.

-¿Hasta donde han llegado?- el tipo quería saber si ya habíamos tenido sexo y eso es algo de lo que nosotros los caballeros no hablamos y mucho menos frente  a la mujer o al menos no con desconocidos. 

-No hemos hecho nada.

-Lo hicimos todo -dice Franck desmintiéndome al mismo tiempo que yo decía que nunca había hecho nada con ella, pero al escuchar mi respuesta me miró mal y se sentó sobre la cama enojada.

-Bien, lo hemos hecho todo, creí que tu no querrías que tus nuevos amigos lo supieran -vuelvo a suspirar, aunque dormí demasiado me siento cansado.

-¿Y  lo que tú querías? Ya veo que sigues siendo un niño Ília -No quería discutir con ella, solo quería irme pero entonces estaría huyendo, sentí mi enojo y solo quería salir.

-¿Tú que sabes Franck? Está bien que hallas querido estar sola para sanar por tu lado pero no eras la única que sufría, a mí también me dolió, nuestras familias y amigos sufrieron por nuestras decisiones e indecisiones. No quise hablar sobre nosotros porque no sabía de tus sentimientos al respecto ya que no fueron los mejores del mundo para ti, si hubieses enterrado nuestra historia yo la habría atesorado por los dos. Ir por la vida hablando de que si hicimos el amor o no lo hicimos no significa que lo superamos o que la otra persona lo hizo, ¿tu crees que no me gustaría decirlo de la manera en que lo dijiste? sin darle importancia mientras que para mí ha sido alegría y sufrimiento porque lo único que recuerdo es a ti besándome. ¿Tu crees que yo no habría querido que la persona que mas amaba tuviera recuerdos lindos de uno los momentos más importantes y únicos en la vida? No se tú pero a mi me hubiera gustado que fuese más especial por lo que no es algo que puedo ir por la vida alardeando -me había descargado al fin, o al menos una parte. Ella me volteó la cara- valla madures Franck, me tengo que ir, debo hacer maletas para regresar -la voz me salió mas brusca de lo que esperaba -Cuídate Franck -dije con voz más suave, estaba molesto y ella también pero ya no éramos niños para ponernos a pensar quien empezó la discusión.