Lo siento, sigues siendo PROHIBIDO. ✓

CAP. 06

Cómo cada mañana, soy la primera en despertar. Salgo de la cama con cuidado de no despertar a Dominik, me pongo las pantuflas y voy hasta el baño. Luego de cepillarme los dientes vuelvo a la habitación, encontrándome con que a despertado.

- Buenos días -subo a la cama nuevamente, Dominik me toma de la cintura para acercarme a él- Aún es muy temprano, deberías estar dormido.

- Yo también lo pienso, pero una hermosa mujer decidió meterse en mis sueños -acaricia mi mejilla con sus nudillos- Y para que verla solo en mis sueños, si puedo verla en persona.

Sus cumplidos siempre terminan haciéndome sonrojar o acelerando mi corazón.

Dominik a cumplido su palabra, cada día que pasa me trata como si realmente fuera una princesa. Cada día recibo un ramo de flores rojas, siempre vienen con una tarjeta, con una promesa escrita. Ayer se confabuló con Paul y me llevó a cenar, fue la primera vez que salimos juntos desde que salió del hospital.

Me sentí bastante orgullosa de él. Aunque se que le duele todo este tema de su discapacidad, no deja de sorprenderme con lo fuerte que es.

- ¿Y esa quién es? -me hago la tonta, eso lo hace sonreír.

- La hermosa mujer que tengo delante de mí justo ahora -se acerca para dejar un beso en mi mejilla.

- Es usted todo un galán, señor Marshall.

- Cuando se trata de usted, mi hermosa mujer, no puedo evitar serlo.

Nos reímos.

Lo abrazo pasando uno de mis brazos por su cintura y subí mi pierna encima de él. Y gran sorpresa la que me llevo al sentir la erección que se carga. Los nervios me traicionan y termino riendo.

- Si.. digamos que esa fue otra causa para despertar -se ríe- Lo siento nena, no pretendo incomodarte.

- Yo pensé que...

- Yo también pensé que no podría tener una erección jamás, pero bueno, cuando se trata de ti lo creo todo posible -pasa una mano por su cabello, noto como los músculos de su abdomen se tensa. A ganado algo de peso estos días y está volviendo a ser el Dominik de antes.

- Dom, se que esto es incómodo para ti. Si tú sientes deseos de estar con otra yo...

- Ni lo digas -me mira, su mirada sigue causando estragos en mi- No quiero a otra mujer que no seas tú. Así tenga que esperar años, lo haré... Bueno, no tanto nena, no me hagas sufrir tanto.

Volvemos a reír, me gusta cuando se pone en modo atrevido y divertido.

Me atrae, no puedo negarlo, es un hombre bastante apuesto. Su sonrisa, esa mirada provocativa, esa manera de amar tan intensa y hermosa. Son tantas cosas que no podría terminar, me atrae bastante.

Y hace bastante también que no se lo que sentirse al borde del éxtasis. Extraño sentir las manos de un hombre acariciando mi cuerpo, extraño el placer y el deseo.

Estaba en mis días hace poco, ya se me quitó y la verdad es que el deseo carnal se a echo más intenso. Y con Dominik durmiendo cada noche a mi lado, se me está haciendo difícil aguantarme.

- Debo levantarme ya, tengo muchas cosas que hacer -beso su mejilla y me alejo, antes de que termine sobre él y le exija que me folle.

- Pensé que te quedarías hoy en casa -me dice, se apoya en sus brazos y poco a poco se va sentando en la cama- La fisioterapeuta vendrá hoy para la primera sesión.

- Me encantaría estar aquí, pero debo primero ayudar a Luz con el equipaje y luego tengo varias reuniones. Hay una marca de trajes de baños que me quiere contratar como modelo.