Capítulo Décimo Segundo

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Sólo faltaban horas para encontrarme con Sam. No estaba completamente segura de lo que hacía, pero ya me había comprometido, no podía cancelar a último momento.

 Lo que pasó con Gilinsky seguro fue algo momentáneo, pensé. No podía, es decir, NO PODÍA, enamorarme del mejor amigo de mi ex novio. Lo mas probable era que haya sido algo que imaginé solo porque nadie nunca me había dicho lo que me dijo Jack, justo cuando más lo necesité, nada más que eso. Estoy segura de que apenas volvamos a hacer facetime ni siquiera me va a atraer.

 Llegó la hora y me dirigí a la casa de Samuel.

-Viniste.- Exclamó con una sonrisa cuando abrió la puerta y me vio allí

- Creo que te lo merecías no?

-Ven, pasa. Quieres tomar o comer algo?

- No, gracias así estoy bien.- Dije

 Qué estoy haciendo aquí?? Pensé. Se lo merecía pero también sabía que posiblemente me enamore otra vez de su forma de ser y de verdad que no quería eso. Para mí ya había sido suficiente, la pasé muy bien con Sam y sí, lo extrañaba de vez en cuando porque no se olvida de un día para otro a alguien que fue importante para ti, pero yo no podía seguir así. Era peor para nosotros si forzábamos la relación, las cosas deben fluir, y no fluían.

-Necesito, por favor, que me escuches t/n, nada más

- Te escucho.- Dije

-Ese día, el que peleamos; sí, había fumado

Suspiré algo decepcionada y revoleé los ojos

-Espera, puedes escucharme? No lo hago siempre, es más, no lo hago nunca, no sé porque lo hice, se que está mal, se las consecuencias que trae pero no encontré otra solución, no estaba pasando por un buen momen.- Lo interrumpí

- No encontraste otra solución? Por favor Samuel, hay millones de soluciones y tuviste que escoger la peor. Si estabas pasando por un mal momento podías decírmelo y lo hablábamos, trataría de ayudarte y lo sabes. Y si no me lo querías confiar a mi se lo contabas a algunos de tus amigos

-Per.- Interrumpí nuevamente

- Lo peor, es que tu piensas que eso te perjudica a ti solo, pero haciendo eso lastimas a todos los que te rodean y te quieren

- Nate también lo.- Volví a interrumpir

- Y a quién le interesa Nate? Que acaso si Nate se tira de un edificio tu también lo haces? No metas excusas y acepta que te equivocaste de una vez Samuel vamos, tienes 19 años creo que te puedes hacer cargo de las consecuencias. Ambos sabemos que lo que hiciste lo hiciste conscientemente y sabiendo lo que podía suceder después

-Tienes razón. En todo. Y acepto que me equivoqué y que nunca debí hacerlo, puedes por favor perdonarme?

- Samuel, no es por mi, es por ti. Porque fumar marihuana es grave, pero peor es lo que viene después. Porque la droga es una adicción, y empiezas con lo mínimo y luego vas por algo más grande, eso es lo que no quiero que suceda. Yo te perdono, pero tu hazme un favor a mi; cuando tengas el deseo de fumar o tan solo necesites hablar conmigo o lo que sea, llámame, estaré ahí. Por favor, no nos hagas esto, lo único que queremos es verte bien, todos

 Tan solo me miró a los ojos mientras se le caían las lágrimas y me abrazó. Me abrazó como si no fuese a verme nunca mas en la vida.

-Gracias.- Dijo mientras me miraba a los ojos y acariciaba mi mejilla, como siempre lo hacía, con su dedo pulgar limpiaba algunas lágrimas que se me caían y se acercó a mi boca. – Creo que no debería…-Hizo una pausa.- A quién engaño.- Dijo y me besó.

 No se si quería besarlo o no. Pero que iba a hacer? Decirle que no? Por más que el fumar marihuana no sea tan grave, se que la mayoría de las personas que mueren por sobredosis comenzaron fumando marihuana, por eso me preocupa tanto. Sam me necesitaba más que nunca, no podía no estar ahí para él.

SECOND chanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora