[ T R E I N T A ]

2.6K 143 6
                                    



[ Capítulo 30 ]

TITULADO
REENCUENTROS

Caroline

Si hablábamos en serio y remontando a todo mi pasado, ¿qué es lo que me motivaba hacer esto? Exactamente cuál era la razón a todo, ¿qué era lo que me estaba empujando hacia mí pasado? Bien podía dejar todo eso atrás. Así como dejar que los del S.I.S. se fueran a la mierda junto con Gerald y vivir bajo la protección de Charles deseando que James me encontrará queriendo solo charlar para poder estar tranquilos y sin odio de por medio, pero sí hacía eso no sería la mujer que era.

No esa que prometió cuidar todo lo que la rodeaba.

Era cierto, quería a Charles demasiado y estaba segura que él haría todo por quemar el mundo por mí si de protegerme se tratara, me lo había repetido varías veces pero esto era algo personal. Esta venganza debía de ser íntima, algo personal porque Gerald me lo quitó todo en su tiempo cuando tuvo la oportunidad y ahora quería hacer lo mismo con él.

Por suerte, no era tan monstruosa ni mala para matar a nadie a sangre fría. Ni siquiera porque él se lo merecería, no haría eso por que entonces no sería mejor que él sino otra farsante que juega a ser heroína. Y ni era farsante, ni era heroína solo alguien con ganas de mostrarle la verdad al mundo.

Y es que Gerald era un hombre al que debía detener a cómo diera lugar. Así como debía de buscar la forma en parar a James de lo que sea estuviera planeando porque su mente era astuta y creaba cosas peligrosas cuando alguien lo dañaba, la forma correcta de hacer que quisiera hacerlo era complicada, porqué ahora me buscaba para vengarse y posiblemente matarme.

 Ojalá supiera la verdad, pero mucho había cambiado desde ese entonces y no puede decir que me arrepiento de mis decisiones porque sería ser cobarde y cierta persona me enseñó eso en el pasado.

—¿Todo bien? —asentí caminando hacia la salida del avión.

La situación era confusa hasta cierto punto incluso para mí y si así era, para los demás era difícil de comprender y lo entendía. Principalmente porque nadie además de Amara conocía la verdad completa y eso solo porque ella debía buscar información para que yo me pusiera hacer lo que tenía planeado y así dar el golpe final contra Gerald desde adentro.

Y aunque quisiera decírselo a Charles, él tenía sus propios problemas y los míos ya eran bastante complicados para sumarle esto. Por ende, los dos debíamos resolverlos por separado, al menos por ahora que teníamos las cosas a nuestro favor y si eso llegaba a cambiar buscaríamos la forma de ayudarnos. Por esa parte estaba tranquila, él me dejaría hacer las cosas a mí modo y no iba a intervenir, fue lo que me dijo al menos.

Revolví mi cabello y cierro mi abrigo para terminar de abrigarme.

El frió de Whitechapel fue lo que me recibió con los brazos extendidos después de siete años de haber me ido de mi hogar. Siete años donde pasé extrañando este lugar que aunque no era la gran cosa, había sido mi hogar por varios años. Y había dejado algo importante cerca de esta zona.

Aquí tenía recuerdos de mi familia cuando aún estaba completa, antes de que el lodo y la sangre nos fueran manchando uno por uno, ensuciándonos y dejando un rastro que después sería difícil de limpiar. 

Todo era un desastre y lo mejor que pude haber hecho fue no haberme dejado intentar manipularme por Gerald, probablemente debí haber preferido pero morir pero entonces nunca habría sabido que iba a tener... fue hace años, ya era pasado y debía de centrarme en el futuro.

—No es tan tétrico como me lo imagine. —mencionó Lyle posicionándose a mi lado, saca su teléfono y la verdad no se quien lo entretiene tanto que no ha parado de usarlo—. Así que aquí es Whitechapel. ¿La leyenda del jinete no era de aquí? —sonreí con diversión.

La esposa del Diablo: Infierno [ 1 ]Where stories live. Discover now