Parte 8: Es enserio yo quisiera vivir una historia de amor como esa, o similar.

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Al día siguiente me levante como era de esperarse diez minutos antes que sonara mi alarma por lo cual aproveché en apurar me en dar un baño y de paso mandarle un par de mensajes a Caleb para que se levantara con suficiente tiempo para arreglarse.

Una vez salí del baño me coloqué mi ropa interior limpia junto a un pantalón jeans negro, una camiseta gris negra y por encima de esta una camisa de manga larga cuadrada y para terminar me coloqué mis zapatos negros con cuadros blancos y un gorro en la cabeza.

Y cuando al fin me convencí de que me miraba bien y no patético me dirigí al cuarto de Joan para levantarlo y como siempre el muy dormilón estaba renuente a salir de la cama como siempre pero lo logré sacar prometiéndole traerle un chocolate pequeñito.

Siempre le traía el más pequeño que podía encontrar en la tienda pero no me lo robaba siempre dejaba el valor que marcaba la pesa por el dulce, ya que no me voy a tomar muchas atribuciones solo para trabajar para Flor.

Sobre el dinero que recibí del obsequio que me dieron ayer, consideré que es mejor guardarlo en el banco porque si lo escondo aquí en la casa mi padre es capaz de malgastar lo sin importarle que no sea suyo.

Una vez que baje las escaleras para ir a la cocina para ver que podía comer me llego un mensaje de Caleb diciéndome que iba a pasar por mi para irnos juntos a la universidad pero yo le mandé uno diciendo que tenía que pasar dejando a Joan en el colegio pero el me contesto que igual pasaría por nosotros así que subí corriendo para apresurar lo a vestirse, pero lo que me lleve una gran sorpresa al ver que ya estaba a punto de salir y me dijo.

Joan: Caleb vendrá por nosotros, ya lo se me acaba de llamar.

Reid: ¿Y tu como tienes su número?

Joan: Si te acuerdas este teléfono era tuyo y ni siquiera eliminas te los contactos cuando me lo diste.

Reid: Y Caleb tiene tu número porque cuando le dije el cambio el nombre y nos agendo a los 2.

Y sin más nos apuramos a bajar y mientras Caleb aparecía nos pusimos a comer cereales hasta que escuchamos el claxon del carro.

Cuando nos subimos saludamos a Caleb y este emprendió el camino hasta la escuela de Joan, el cual iba conversando muy entretenida mente con él, yo por el contrario estaba concentrado en un libro que me recomendaron hace unas semanas una de las chicas que trabaja conmigo.

La historia se trata de un chico que tenía problemas de dislexia y nunca le dijo a nadie que le costaba leer, pero esa no era su único secreto que ocultaba a todos sino que también era gay.

Y a lo largo que he leído este libro pude ver el crecimiento que ha tenido este personaje y no solo porque él lo haya hecho solo sino que por su problema de dislexia tuvo que repetir una materia, yo siempre me he preguntado que se sentirá repetir alguna materia pero según Caleb es una experiencia horrible, quien lo manda a dejar 3 clases en un solo semestre.

Pero volviendo a la historia, no sólo eso me cautivó de ella sino también que la autora se basa en grandes obras literarias y como es que las acopla a los personajes. Como dije estaba tan concentrado hasta que sentí un golpe en la cabeza y escuche lo que este par venía diciendo.

Caleb: Tierra llamando a Reid.

Reid: Oye cara de simio.

Reid: Saben que hay otras maneras de llamar mi atención.

Caleb: Te venimos hablando desde hace dos calles y no nos contestaba así que a Joan se le ocurrió pegarte.

Y se comienzan a reír de seguro por la cara de desaprobación que les hice a los 2, pero lo que no se esperaban era que en medio de su ataque de risa les iba a regresar el golpe.

No siempre se nace siendo un princípe✔🌈Where stories live. Discover now