Capítulo 30

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Al día siguiente dan las 7:20 cuando me bajo de la cama con mucho sigilo para no despertar a Emma. Salgo de la habitación y tras cerrar la puerta camino por el pasillo preguntándome si Amîr estará despierto. Me detengo en su puerta pensando en si debería tocar, pero entonces una voz me sorprende deshaciendo mis planes.

–El joven no se encuentra allí – me avisa Sara quien lleva unas cobijas entre sus brazos – él está en el patio con la señora Grace tomando el desayuno – me dice mientras yo asiento en respuesta encaminándome hacia allá.

No contaba con que Amîr se despertaría tan temprano, se supone que debería estar con él casi todo el tiempo para hacerle compañía aunque al parecer no me necesita mucho en vista de la buena relación que tiene con mi abuela.

Desde que cruzo la puerta trasera, alcanzo a verlos sentados alrededor de la mesa que se encuentra en el jardín. Noto que ya acabaron con el desayuno, y que están sumergidos en una conversación. Ellos aún no han notado mi presencia y me pica la curiosidad de saber sobre qué están hablando cuando veo que Amîr expresa un semblante mortificado y de pronto se cubre la cara con las palmas de su mano con aparente frustración ante lo que sea que le está diciendo mi abuela. Intento escuchar algo antes de que puedan verme, pero hablan muy bajo y es casi imposible que escuche desde aquí.

Comienzo a caminar hasta donde están y lo único que alcanzo a escuchar en un "Lo sé" de parte de Amîr, pero se calla cuando por fin me ve.

–Buenos días! – digo cuando mi abuela se gira para mirar la razón por la cual su nuevo amigo dejó de hablar.

–Buenos días, cariño – dice mi abuela abriendo sus brazos para recibirme. Miro hacia Amîr y este de pronto parece preocupado, como si tuviera miedo de algo.

–Dormiste bien? – le pregunto y este simplemente asiente. Ya no parece tan molesto conmigo, aunque si está muy raro. Habrá pasado algo con su familia? Es lo único que se me ocurre para que esté actuando así.

Nos quedamos un rato más conversando sobre distintos temas, y una hora después, Emma se levanta para irse a la casa de Oliver, ya que sus padres la invitaron a comer. Ella me dice que volverá con su novio tan pronto acabe la comida para que salgamos los cuatro a dar un paseo por la ciudad. Yo le digo que me parece buena idea ya que quería mostrarle el resto de la ciudad a Amîr, pero le advierto que no se le ocurra hacer una estupidez ahora que sabe lo que ha habido entre Amîr y yo. Ella me dice que puedo estar tranquila por lo que no me queda de otra que creerle.

En el almuerzo todo estuvo muy bien. Mi abuela y yo hablamos mucho, pero en cambio Amîr se mantuvo todo el momento en silencio, más pensativo de lo normal. La verdad es que ya me está comenzando a preocupar, y si no le pregunto me caigo muerta por la curiosidad.

Después de terminar la comida, le aviso al arabe de los siguientes planes con Emma y su novio. Por su raro comportamiento creo que va a negarse, sin embargo solo asiente en respuesta.

A las 14 horas el Emma y Oliver pasan por nosotros. Amîr y yo nos sentamos en los asientos de atrás, y saludamos al novio de mi amiga con amabilidad. Una música suena en el auto, pero no es molesta porque el volumen es moderado. Mientras recorremos la ciudad todos hablamos y le mostramos a Amîr los lugares importantes por los cuales cruzamos.

Poco tiempo después, nos detenemos en un parque de diversiones en donde nos subimos a varios juegos y hacemos competencias en equipo. Fue muy evidente que todos nos divertimos así que este paseo valió mucho la pena. Al salir de los juegos, entramos a un pequeño bar en el cual nos tomamos unos tragos de vodka para entrar en calor ya que el clima está un poco frío.

***

Cuando se hace de noche, Amîr y yo regresamos a casa, cada quien por su lado se da un baño para luego bajar a cenar con la abuela. Durante la cena veo a mi amigo más calmado, aunque si se distrae en ocasiones. Debo intentar hablar con él esta noche, no podemos regresar a California con un problema de por medio.

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