Capítulo 5.

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Doy saltitos mientras me coloco el unico jean que tenia en mi ropa. Tal vez ya no me queda como antes, pero sinceramente estoy cansada de los vestidos. Sigo dando saltitos, pero mi mala suerte y torpeza me juegan una mala pasada y caigo en el piso. Mierda.

Mala manera de empezar el dia.

Se me hizo muy tarde y ahora estoy como loca brincando de un lado a otro en mi habitación vistiéndome. Scott llegará en al menos quince minutos y yo aun no estoy lista.

Cuando por fin el jean me sube, me miro la espejo por ultima vez, sonrío apenas veo mi reflejo, se me ve buen trasero con este jean. Agarro una sandalia, ya que la otra esta abajo, bueno, debería estar abajo. Bajo corriendo las escaleras mientras le grito a mi madre.

—¡Mama! ¡¿Has visto mi otra sandalia?! ¡La azul con negro!

Pego un gritico cuando me doy cuenta que la persona que esta en la cocina no es mi madre. A menos que se haya cambiado de sexo, mientras tanto no es mi madre.

Es un hombre mayor, canoso y debo decir que muy lindo, tiene un delantal puesto y esta cocinando algo mientras se mueve al ritmo de una canción que no conozco.

—¡Hija! —la voz de mi madre nos hace sobresaltar. Al hombre y a mi.

El señor se ha dado cuenta de mi presencia, y ahora está rojo como una manzana. Supongo que se ha dado cuenta que lo vi "bailar".

—Hija, el es el Sr Taylor McAdam, Tay ella es mi hija Missy. —nos presenta mi madre.

—Buenos días, Missy. — saluda esta.

—Suzanne. —le corrijo. —Y buenos días también. El señor me mira incómodo y le lanza una mirada de auxilio a mi madre, pero ella no lo capta.

Los tres nos quedamos en un silencio incómodo, que yo decido romper. Agarro a mi mamá y la llevo al living. El Sr Taylor nos mira incómodo, pero luego sigue con su labor en la cocina.

Cuando confirmó que el señor no nos puede escuchar, le reclamo a mi mamá. Necesito por lo menos una explicación.

—¿Es otro de tus ligues?

—Lo conocí ayer en una fiesta ¿No es lindo? —Pregunta mi mamá con emoción. Dios, solo mi madre mete un extraño a la casa. Suelto un suspiro con exasperación y levanto las manos en señal de derrota. Con esta señora no se puede.

Agarro la sandalia que estaba buscando y vuelvo a la cocina y ya los desayunos estan servidos. No estoy segura si es un ligue de mi madre o un empleado de la casa.

—Les hice el desyuno. —explica cuando me ve.

—¿Debería comerlo? Usted es un extraño, podría ser un asesino en serio o algo así.

Mi mamá me escucha y suelta una risita nerviosa. Se acerca a mi y me agarra por los hombros.

—Lo siento. Creo que Missy ve mucho CSI y criminal minds.

Luego me suelta y me susurra "come" con los dientes apretados. Mi madre puede ser la culpable de mi secuestro y con mi mala suerte, mi asesinato.

El sonido de la bocina de el auto de Scott me salva de morir envenenada y luego ser picada en pedacitos, para después tirarme al rio.

Bueno, mi mamá tiene razón. Estoy viendo mucho criminal minds y CSI.

—¡Adios! — grito para luego salir corriendo por la puerta. Scott sentado en el capote de su carro tecleando algo en su celular, apenas me ve una sonrisa se asoma en su cara.

Joder, mi amigo es jodidamente sexy.

Su sonrisa desaparece de su cara y ahora hace una mueca extrañado.

BAD GIRL, GOOD LIPS. (Editando)Where stories live. Discover now