Sonrisa (Thiam) [En Edición]

Parte 2 • 5 •

Liam llegó a casa durante la noche, el joven de ojos azules había encontrado la sala llena de cajas, en el centro de la alfombra theo estaba sentado con las piernas cruzadas y dándole la espalda, su mirada parecía estar fija en las escaleras que daban a su habitación, los cargadores se habían marchado y ahora ese chico estaba ahí sentado sin mencionar nada.

-- ¿Theo? -- Se acercó con un poco de desconfianza, cuando el muchacho se levantó de manera torpe solo para dar media vuelta y mostrarse ante liam, estaba sosteniendo una botella de tequila en la mano izquierda... estaba rota sin embargo por la apariencia del ajeno podía pensar que había bebido toda, Theo estaba ebrio y su mirada estaba nublada, turbia. Un dolor muy fuerte se asentó en su garganta extendiendose de manera tortuosa por su pecho y causando un hormigueo doloroso en su espalda. Luego de ello los gritos comenzaron a atormentarlo.

-- TU NO ERES GABE, NO ERES NI LA MITAD DE EL, LITERALMENTE... -- Esa sonrisa que antes le gustaba apreciar ahora se mostraba cinica y dolorosa a sus ojos atrayendo ese sentimiento de insuficiencia que le hacia sentir diminuto y abandonado, el temblor de sus piernas, el miedo la sensación de estarse ahogando comenzó a dominarlo a medida que el cubría sus oídos y se colocaba en posición fetal sobre el suelo pero al mismo tiempo la sensación del cristal contra su cabeza le hacia despertar en un sobresalto.

El tren había arribado al andén, se sentía desorientado, perdido en la nada como si un vacío de la realidad lo hubiese capturado, se levantó un poco alterado sentía el sudor en su frente y sus manos temblando, de pronto el miedo de volver a casa y ser atrapado por un nuevo ciclo que iniciaría bien y todo terminaría mal le hizo sentir un escalofrío. Era de noche, un taxi ya lo esperaba en la salida de la estación y casi sin darse cuenta se encontraba fuera de su casa, ese sitio acogedor al principio ahora parecía tan imponente y ajeno. Caminó hasta la puerta y sacó su llave, estaba por introducirla en la cerradura, la maleta apoyada en el suelo y a punto de introducirla en la rendija y dar vuelta salió corriendo en dirección contraria olvidando sus maletas en la puerta, el taxi por pura suerte no se había ido. Volvió a subir, sentado en la parte trasera ante la atónita mirada del chofer. 

-- Al hospital presbiteriano -- Casi estaba rogando, no entendia como una visita a aquel sujeto le había removido tanto, no entendía como había comenzado a sentirse tan impropio tan roto, tan abandonado y al mismo tiempo tan lejano a lo que quería proyectar. Su mirada perdida en la ventana sus pensamientos estaban confundidos y absurdamente acomodados en escenarios imposibles donde theo le hacia daño, sus ojos soltaron lágrimas y pronto se encontró escuchandose a si mismo "No quiero que vuelva a pasar" Se estaba asfixiando, entró al hospital  sin poder recordar si habia recibido su cambio, entró sin recordar cuantos saludos habia ignorado y sólo pudo caminar unos cuantos pasos hasta que se encontró en la sala de descansos mirando al techo, escuchando el pitido de los localizadores de sus compañeros. Los golpes de la puerta al cerrarse, el sonido de las manijas al ser movidas, tal y como lo esperaba esa noche no iba a poder descansar.

Theo por su parte seguía con la mudanza, cada tanto limpiaba un par de lágrimas y un poco de polvo, era ya un poco tarde, tomó la libertad de preparar la cena para ambos sin embargo Liam no llegaba y comenzó a preocuparse, lo llamó cuatro veces pero todas las llamadas fueron directo al buzón de mensajes.

Sus manos fueron empuñadas para evitar los temblores, los escalofríos el miedo que comenzaba a calentar su cabeza de manera escandalosa. -- Liam no es Gabe... Liam no es Gabe... No está pasando de nuevo -- Susurraba para si mismo sentándose en la mullida alfombra con la cabeza entre las manos deseando evitarse la sensación fría que le hacia pensar en los demonios que se manifestaban haciéndole pensar en cómo Liam podía estar muriendo en varias formas.

Se levantó con delicadeza y fue hacia la puerta sin embargo al abrirla su mente ya un poco retorcida comenzó a imaginarse que Liam había sido secuestrado quizás asesinado o probablemente lo había abandonado aunque eso sería improbable.... Tomó las maletas y las llevó dentro dejándolas en la sala. Subió a su habitación y tomó su móvil antes de llamar a Tracy...

-- Theo... que sorpresa que llames durante tu día de descanso, en que... estas llorando? Que ocurre? -- La voz de la castaña había comenzado tranquila pero para ese momento sonaba alterada preocupada y luego de un par de suspiros agobiados finalmente pudo abrir la boca para hablar.

-- Li... Liam... No ha vuelto y no quiero perder la cabeza... No ha llegado nadie en estado crítico verdad? -- El joven oji-verde se sintió estúpido por preguntar aquello aunque de cierta forma si habia sido secuestrado no habría aparecido ya... -- Puedes revisar? -- Preguntó de nuevo mirando la pantalla que se encendía y apagaba ocasionalmente

-- Dame un segundo -- Susurró la joven antes de ir a la sala de urgencias sin embargo este se encontraba vacío al menos dentro de lo que conllevaba el trabajar en un día dentro de la sala de urgencia -- Creo que todo está bien por aquí, probablemente se olvidó de algo o quizás se le hizo tarde -- Razonó para evitarse que el joven oji-verde se preocupara aún más.

-- Sus maletas estaban en la calle, y estoy preocupado el no entró tal vez fue secuestrado.... Tracy... No quiero que pase de nuevo... -- finalizó al punto de casi volverse loco sintiendo perfectamente como su cuerpo comenzaba a temblar y su respiración se agitaba a un grado un tanto alto.

-- Theo necesito que te tranquilices, y necesito que -- sin embargo antes de de poder continuar tuvo un tropiezo con el joven oji-azul que apenas vio a la chica con el teléfono en las manos bajó la mirada al suelo y escondió las manos en los bolsillos. -- Creo que acabo de encontrarlo --

Theo se sintió a punto del desmayo, la voz de Tracy había sonado más cruda de lo que quería y entonces las incontrolables ganas de vomitar se hicieron presentes. -- El está bien? -- Preguntó con un suave hilo de voz y finalmente las lágrimas cayeron de nuevo pues recién en ese entonces entendía a que se refería con aquello de que mudarse le mostraría una nueva perspectiva. Pero no era una garantía de que estaría bien pronto.

-- Tranquilo el lleva la camilla seguramente tuvo que atender un llamado de emergencia y no tuvo tiempo para poder tocar siquiera la puerta. -- Comentó con calma pese a que estaba fulminando a Liam con la mirada, theo pareció aceptarlo incluso comenzó a reír un poco debido a su propia exageración pues Liam no tenía porque rendirle cuentas ya que sólo eran compañeros de casa.

-- Gracias a Díos... lamento haberte preocupado por nada Tracy -- finalizó theo bastante avergonzado y luego limpió su rostro creyendo la excusa improbable pues mientras Liam estuviera bien no importaba si no quería decirle. -- Nos vemos mañana -- Colgó el teléfono con alivio y poco después estaba subiendo a su habitación

-- ¿Que diablos fue eso? -- Preguntó Tracy luego de colgar mirando al menor de los dunbar que no sabía cómo hablar de su problemita.

-- No es tan importante -- Comentó tratando de no parecer muy seco pero había fallado y entonces en medio de aquello Tracy tomó su mano llevándolo a una sala de descanso y finalmente cruzando los brazos sobre su pecho.

-- No es tan importante? Tienes idea de que siente theo? Que haces aquí si no tenías que venir hasta mañana? -- Preguntó molesta aguantando las ganas de ahorcar al chico en frente suyo.

-- Quise venir aquí temprano, no se que tan importante es -- Repitió no queriendo decir lo que pasaba pero pudo notar la expresión rara que tenía la muchacha

-- Entonces no te ha contado todo -- Cuestionó apartandose de la puerta para dejarle salir

-- que cosa? -- La voz de Liam quebró el tenso silencio que se había formado y entonces cruzó los brazos

-- no me concierne... pero si me dejas ser un poco entrometida, creo que deberías r y hablar con Theo, probablemente no se quede tranquilo y es más que seguro que hoy no va a poder dormir -- Finalizó tocando el pomo de la puerta para luego salir dejando al oji-azul solo en el interior.