Capítulo 31.

6.6K 159 0
                                    

Narra Melissa.

Repetí mentalmente la pregunta que Justin me había echo momentos antes. La inseguridad inundo mis pensamientos. Estaba indecisa. 

-Hm... -parpadee rápidamente. Intentado buscar una respuesta. 

-Ey, no tenemos por que hacer nada. Solo quiero dormir contigo. -rozó suavemente con sus dedos mi mejilla. Sonreí. Esas palabras me habían tranquilizado bastante. No sé si estaba preparada para dar un paso más. 

-Bien... Entonces ¿Vamos? 

-Claro. -contesto. Dando un suave apretón en mi mano. 

A medida que avanzábamos, nos encontrábamos en algún sitio extraño para mi. 

-¿A donde vamos? -pregunté.

-A mi casa. -dijo. Le mire extrañada. -En Calabasas. -fruncí el ceño.

-A la mansión que tengo en Calabasas. -explico.

-Oh. -entendí. -Vale.

Había olvidado el detalle de que Justin tenía otra casa aparte de su apartamento.

Después de varios minutos conduciendo, llegamos a una gran, por lo que ponía al entrar, "Urbanización residencial de Calabasas." 

Entramos por el portón de su casa.

Por lo que Justin me había comentado, aquí vivían muchos rostros conocidos. Ya que estaba alejado de fotógrafos.

Caminamos por un paseo rodeado de farolas que iluminaban la noche. Fije mi vista alrededor, estaba lleno de jardines muy bonitos, que debido a la oscuridad de la noche no se apreciaban bien.

Justin abrió la puerta principal de su casa, invitándome con un educado gesto a pasar. 

Podría describir la gran mansión de Justin como: Enorme. Pero eso se quedaba muy corto. Estaba realmente alucinando. Tenía muebles sencillos, pero elegantes. Y estaba decorada de manera lujosa. 

-¿Te vas a quedar ahí parada todo el día? ¿O vienes a que te enseñe el resto de la casa? -dijo en un tono burlesco, mientras se reía ante mi asombro. Agarro mi mano y tiro de ella, conduciéndonos hasta las escaleras. 

Me condujo hasta una de las partes mas altas de la casa. Era precioso, al estar alejados de la ciudad en el cielo se podían apreciar mejor las estrellas. Divisé todo lo que había bajo mis ojos. Una gran piscina. Otra pequeña casa, que supongo que sería algún garaje o algo así. Jardines y vegetación rodeando prácticamente todos los alrededores. Era muy extensa.

-Podría estar un año entero andando por aquí y no terminará de ver la casa nunca. Es muy grande. -se echo a reír.

-Exagerada.

-Claro, tú, que estas acostumbrado. -dije alzando una ceja, con algo parecido a un tono indignado. De nuevo comenzó a reírse.

-No es para tanto, al final te acostumbras. 

-Debe de ser raro vivir en el apartamento y aquí a la vez. Por que, a ver, tu apartamento no es para nada pequeño. Pero comparado con esto... parece la casa de blanca nieves. -dije. Y otra vez se echo a reír, esta vez con una risa más contagiosa y abundante.

-Rubia, ¿Qué has bebido hoy, que estas tan graciosa? -pregunto entre risas. Chasquee mi lengua.

-Oye, -le di un suave empujón en el hombro. -Que habrás bebido tú, que te ríes de todo. -continuó riéndose, pero más calmado.

By your side. {Justin Bieber} {TERMINADA}Where stories live. Discover now