Capitulo 25

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[Narra Niall]     

El sábado por la mañana despierto con el cuerpo cargado de energía, me levanto antes de que el despertador suene, lo desconecto para no tener que escuchar el jodido sonido, decido que lo mejor que puedo hacer es salir a correr, hacer ejercicio no le va mal a nadie. Mucho antes de que Caroline fuera mi novia, yo frecuentaba a hacer ejercicios por las mañanas; cuando se supone que debería estar durmiendo todavía, pero para mi era preferible que no hubiera gente a los alrededores y así poder presenciar agusto la salida del sol. Me preparo con la ropa cómoda y necesaria para salir, y bajo sigilosamente las escaleras para no despertar a nadie. Una leve brisa fresca me da en la cara cuando salgo fuera, cierro mis ojos para disfrutar mejor.  

Ayer después de la escuela, pase toda la tarde en casa de Liam con Zayn, habíamos invitado a Harry y a Louis también, pero este ultimo tenia que hacer el trabajo con Oli y Harry saldría otra vez con Clau. Solo habíamos quedado nosotros tres, así que antes de llegar a casa de Liam, prácticamente arrasamos con todo el McDonald's, ya cuando estuvimos con la barriga llena y el corazón contento -casi apunto de explotar-, cada uno en su respectivo coche condujo hacia a casa de los Payne.    

Después de pasar un buen rato, conversando y riendo con dos de mis mejores amigos,el tiempo se paso volando, tanto así que no me di cuenta que se había hecho de noche cuando salí afuera. Zayn estaba solo en su casa así que Liam le había dicho que se quedara ahí, el moreno acepto gustoso, yo por mi parte quería pasar la noche en la comodidad de mi cama, me despedí de mis amigos con los típicos saludos y de Karen, la mamá de Liam y una segunda madre para mí.  

En el transcurso de casa de los Payne a mi casa, había demasiado trafico, claro, en un Sábado por la noche la gente sale a divertirse. Si hubiera sido en otro momento, yo hubiera sido el primero en tener planes de salir con algunas de mis guapas amigas. Pero simplemente hoy no tenia ánimos, lo único que quería era regresar a casa, tirarme a la cama y dormir.  

Al llegar, mi madre me recibió con una amplia sonrisa, trate de sonreír de igual manera pero me salio una mueca, antes de que me preguntara que me pasara, le pregunte por mi padre y como si me leyera los pensamientos, él apareció por la puerta de la cocina con el ceño fruncido y guardando su móbil en uno de sus bolsillos. Mi madre me ofreció cenar pero me negué, mi padre me dedico una mirada fulminante y aun con el ceño fruncido me ordeno que cenara con ellos y que no fuera mal educado. ¡Por Dios!   

Si soy mal educado es porque el nunca me enseño como comportarme.  

Estuve a punto de echárselo en cara pero la cálida mano de mi madre en mi brazo y su mirada nerviosa me detuvieron. A regañadientes acepte cenar con ellos.  Ya en la mesa la incomoda situación en la que estaba se hacia notar a kilómetros, la cara de preocupación que mi madre tenia, me hizo sentirme culpable sin saber porque, pero algo me decía que no era por mi por la cual estaba preocupada, si no por las reacciones de mi padre.   

No había probado en todo el rato desde que el plato se posiciono frente a mi, tan solo estaba jugando con el tenedor, había comido suficiente en casa de Liam, Karen nos había preparado unos ricos postres, especialidad de ella y como tales animales que somos, nos los terminamos todos antes de que pudiéramos si quiera procesar de que sabor era casa uno de ellos, así que no tenia apetito. Estaba de puro compromiso sentado en la mesa.  Mi padre me lanzo una fría  mirada de reproche y mi madre de culpabilidad. ¿Porque ella se sentía culpable?. ¿Sera por todos estos años que me dejo solo y por mi propia cuenta?. Suspire y como no tenia ánimos de discutir con ninguno de ellos, me trague todo lo que había en el plato como pude.   

Al llegar a la tranquilidad de mi habitación, fui directamente a los cajones de mi cómoda, tome un bóxer limpio y me adentre en el baño. La fría agua de la ducha me encantaba, hacía que todos los problemas y preocupaciones se esfumaran de mi cabeza temporalmente. Cuando termine y me vestí, regrese de nuevo al cuarto, tome mi móbil y comencé a ver los contactos con la clara intención de hablar con alguien. ¿Pero con quien?.  

Con Oli.  

Fue la primera persona que apareció en mi mente. Dudando un poco en mandarle un mensaje o no, mire el reloj y comprobé la hora, 11:49pm. ¿Estaría despierta aun?, sin darle mas vueltas al asunto redacte un mensaje para ella. Un simple ''Hola'', bastaría. 

Espero cinco, diez, quince minutos y nada, Oli no da señales de vida o de querer contestarme, ¿estará molesta conmigo?, pero no, ¿porque debería de estarlo?, no le he hecho nada, aparte de que anoche estuvimos casi cuatro horas mandándonos mensajes antes de dormir.    Inconscientemente una sonrisa se forma en mi rostro, Oli es una chica con un particular sentido del humor.   

Anoche logro sacarme varias carcajadas con sus mensajes y ahora me esta preocupando. A lo mejor esta en casa de Louis todavía. Por lo que me dijo ayer en uno de sus tantos mensajes, ayer no lograron terminar el trabajo y Oli iría hoy otra vez a casa de Lou para terminarlo. Solo para comprobar y no quedarme con la duda, le mando un mensaje a mi amigo preguntándole por Oli.    Quince minutos después, pasa lo mismo que con Oli, osea exactamente nada. Louis no responde los mensajes tampoco. ¡Dios mio!, no quiero sacar respuestas apresuradas pero espero que no este pasando lo que yo creo que esta pasando, ya soy todo un lió.  No creo que Louis sea capaz de tener algo con Oli, el esta interesado en esa chica ruda, Nikki. Y Oli, bueno, Oli tiene a su lindo novio Christian y si no quiso tener nada conmigo, no puede tener nada con Louis.   

Con esos pensamientos en la cabeza, el sueño logra vencerme, caigo en un sueño profundo.   

Oli, ¿donde demonios estas?.   

Single mother {Niall Horan}Where stories live. Discover now