Mi amor de Wattpad (Libro I & II) [En librerías] ✔️

23. Sí, me invento palabras, demándame, soy muy original.

Capitulo veintitrés

Voy a divertirme.

Decidí, desempacando mis cosas. Sabía que iba a ser difícil ignorar toda la tensión, pero lo iba a intentar. Mi cumpleaños sería la mañana siguiente y todas las personas que me importaban habían preparado este regalo para mí, por lo tanto me gustaría disfrutarlo.

Sin embargo, el hecho de que teníamos cero privacidad no ayudaba con mi decisión. Todos nos veíamos obligados a permanecer en la misma zona. Me pregunté si los padres de Shane no podrían haber esperado un poco para cambiar el estilo de su casa. Tal vez sólo era el destino divirtiéndose con mi vida una vez más.

En cuanto a mi grupo de amigos, ellos estaban a mí alrededor haciendo cosas diferentes. Jane, Jason, Helen y Nadia estaban usando sus teléfonos. Jordan estaba viendo un partido de fútbol. Lau se sentó junto a él, pero no parecía muy interesada en el juego. Nash parecía estar evaluando la casa en su manera nerd. Shane había ido al baño y mi novio estaba actualmente apoyado en la ventana, mirando al exterior distraídamente.

Suspiré. Mi resolución de cumpleaños de no dejar que la tensión arruinara esto no iba a ser fácil de lograr. Me levanté y me aclaré la garganta.

—Hey, chicos— Llame, consiguiendo la atención de todos. Tragué, ser el centro de atención no era lo mío, pero no tenía otra opción, —Deberíamos explorar un poco, estas montañas son hermosas—Todos me miraron en silencio.

—Esta demasiado frío afuera— Jane dio su opinión a pesar de que no le pregunté a ella.

Lau se levantó de su asiento, —Jules tiene razón. Debemos pasear un poco. —No podía creer que me estaba apoyando. ¿Significaba eso que ya no estaba enfadada conmigo?

Jordan sonrió de oreja a oreja, —Podríamos tener una fogata y todo, yo les contaré algunas historias espeluznantes que conozco. —Se frotó las manos con entusiasmo.

—Em— Jason hizo una mueca,—Sin historias espeluznantes. Todavía tengo pesadillas con esa noche de cine en casa de Jules—se estremeció,—¿Por qué no mejor algunos chistes?

—¿En serio, Jason?— no podía creer que no aun no superara eso.

Helen suspiró, —Eres una causa perdida— Jason parecía sorprendido de escuchar a Helen hablarle. Fruncí el ceño. ¿Sera que ella lo estaba ignorando como lo habíamos planeado?

Evan se quedó en silencio. Sus ojos no se apartaban de la ventana. Actuaba tan lejano. ¿Qué le pasaba? ¿Estaba así por Shane?

Fue entonces cuando me acordé de la capacidad de Evan a actuar como que no le importara nada. Me di cuenta de que había dos lados de él: el lado dulce, el encantador poeta que me escribió bellos poemas y me hacía cosquillas rugiendo juguetonamente y el lado frío, al que yo le tenía miedo porque me había herido mucho en el pasado.

Evan era una persona complicada. Yo sabía que tenía mucho que ver con su pasado. Era como si tuviera dos personalidades diferentes. O tal vez sólo construyó una pared fría alrededor para protegerse a sí mismo, no dejar entrar a nadie, nadie más que yo. Él me dejó entrar. Él me dejó ver lo dulce y tierno que era en el interior.

Sin embargo, cuando sus ojos oscuros se movieron desde la ventana hacia mí. Me di cuenta de que su pared fría estaba activa. Sus ojos no tenían ningún rastro del amor y el anhelo que por lo general tenían. Tenían un destello de ira en su lugar. Quería preguntarle qué le pasaba, pero una vez más no había privacidad en esta sala para hacer eso.