POV CAROL
Suspiro agotada, es el tercer trabajo que voy y me dicen que no necesitan a nadie. ¿Os preguntaréis porque estoy buscando trabajo? Pues bueno, mis padres lo único que hacían eran pagarme el piso, creo que lo hacían para sentirse bien pero parece que ya nos le parece tan bien.
Mi madre me ha llamado esta mañana y me ha dicho que no puede seguir pagándome el piso y no pienso ir a vivirme con ella. Con lo que me daban de la beca lograba pagarme los estudios pero ni de broma me da para el piso. Esta semana he empezado la universidad y tengo que buscar un trabajo que se pueda amoldar a mis horarios.
Entro al último restaurante que tenía apuntado. No está muy lejos de mí casa y rezo porque necesiten camarera. No tengo experiencia laboral y no me contratan en ningún lado.
- Buenas, venía buscando trabajo- una mujer mayor sale de detrás del mostrador y me mira de arriba abajo. Intento alisarme la ropa un poco pero teniendo en cuenta que llevo desde esta mañana fuera no sé qué pinta debo tener.
- Nos vendría bien una camarera, mi hija antes trabajaba con nosotros pero lo ha dejado, ¿tienes experiencia?
- No, pero soy muy aplicada y aprendo rápido- me mira dubitativa antes de asentir.
- Trabajarás por la tarde de 16:00 a 22:00. Tendrás un uniforme y cobrarás 750€- aguanto las ganas que tengo de lanzarme a sus brazos y asiento rápidamente.
- Te espero mañana para firmar el contrato, se puntual.
- Muchas gracias enserio- salgo del local dando saltitos de felicidad, por fin algo bueno en este día.
Mi teléfono vibra en mi bolsillo y cuando lo saco veo que es Stephen, lo cojo antes de que pueda colgar, llevo varios días sin verlo.
- ¡¡Hola!!- creo que nota mi entusiasmo porque escucho su risa.
- ¿Niñata tanta alegria te da escucharme?
- ¡No! Bueno si, es decir que si me da alegría escucharte pero no es por eso- un coche me pita y me doy cuenta de que había cruzado sin mirar.
-¿Donde estás?
- Estoy llegando a la plaza de la farola- escucho silencio al otro lado y aparto el móvil para ver si se ha cortado la llamada, pero veo que esta bien. Cuando me acerco el teléfono escucho su voz.
- Espérame ahí, estoy en 5 minutos- y cuelga. Miro el aparato extrañada y lo guardo en mi bolso. Todavía no me creo que tenga trabajo después de todo el día buscando, de verdad que había perdido la esperanza. Tengo ganas de gritar de felicidad, voy a poder conservar mi piso y estudiar.
POV STEPHEN
Esta semana me han machacado, la liga se está acercando y Joe me tiene entrenando todo el día. Cojo el móvil y pienso si llamar a la niñata. Entre su universidad y mis entrenos llevo sin verla 5 días.
Marcó su número y espero unos momentos, cuando pienso que no me va a contestar oigo su voz demasiado alegre en la otra línea. Una sonrisa se forma en mi boca sin remedio, esta niña irradia demasiada felicidad.
Cuando me dice que está en la plaza de la farola me quedo extrañado, eso está muy cerca de mi casa. ¿Qué hace ella aquí?
Me pongo los zapatos y salgo en su dirección, la noche está fría por lo que meto las manos en mi bolsillo encaminándome a la plaza.
Cuando estoy acercándome la diviso al lado de un árbol mirando a una niño chico con una sonrisa. La miro de arriba a abajo y me acerco sin que se de cuenta. Me pongo detrás suya y acerco mi boca a su oreja.
- Niñata no sabía que te iba eso de la pederastia- se gira asustada ante mi voz pero le dura poco antes de tirarse a mis brazos. Me pilla de sorpresa pero la cojo al vuelo aferrando mis manos en su cintura. Su particular olor me embraga y escondo mi cabeza en su cuello. Algo dentro de mí se alivia y no es hasta ese momento en el que me doy cuenta de que la había echado tanto de menos.
Se separa de mi con una sonrisa en la boca.
- Lo siento, se que no te gusta las demostraciones en público pero ¡¡He conseguido trabajo!! Llevaba días buscando y no encontraba nada y esta mañana me he levantado decidida a encontrar uno pero todos me decían que no y...- La interrumpo antes de que siga ¿un trabajo?
- Espera espera angelito, no me estoy enterando de nada. ¿Vamos a cenar y me cuentas mejor?- asiente con la cabeza sin quitar la sonrisa de su cara. Por un momento me quedo embobado y antes de que pueda moverse la beso. Hacía días que no tocaba estos labios y no iba a aguantar mucho más. Es un dulce beso que me transmite tranquilidad. Me separo de ella por falta de aire juntando nuestras frentes.
- Pensé que no te gustaban las demostraciones en público- una sonrisa se forma en mi boca.
- Y a ti que no te gustaba que te quitaran tu espacio personal- abro los ojos para ver cómo una risa sale de ella.
- Touché.
Llegamos en un momento a un local de comida rápida que hay aquí cerca. Nos sentamos en una mesa un poco alejada y pedimos tacos para comer.
- Ahora si cuéntame que es todo eso del trabajo, no deberías trabajar y estudiar a la vez, te va a agotar.
- Mis padres han decidido dejar de pagarme el piso y necesito dinero. La beca solo me da para mis estudios y poco más, si no buscaba trabajo me iban a echar- sonrie nerviosa, se que no le gusta hablar sobre ese tema.
- Yo puedo ayudarte- me mira soprendida negando con la cabeza.
- No, no, no, no, yo puedo valerme por mí misma. Ademas el trabajo está bien.
- ¿Cuánto cobras?- le doy un mordisco a mi taco.
- 750€- eso es una mierda.
- ¿Cuánto es el alquiler del piso?
- 700€
- Angelito no te va a quedar dinero para ti. Ahora estoy en las nacionales, con una pelea mía podría pagarte cuatro meses de alquiler.
- Qué no, no tienes porque pagarme nada- es una cabezona.
- Los amigos se ayudan.
- Pero los amigos no se pagan los alquileres.
- Bueno yo soy un amigo especial. Ser mi amigo tiene sus privilegios.
- No me voy a aprovechar de ti- niego con la cabeza, esta niña me va a volver loco. Decido cambiar de tema, no me apetece pelear con ella después de tanto tiempo.
- ¿Como te va las clases?- una sonrisa vuelve a formarse en su boca.
- Las clases de este año me gustan mucho, tengo que exponer mi parte creativa y tengo ya pensada una cuentas cosas...- me quedo embobado viendo cómo habla entusiasmada.
- ¿A ti como te van los entrenos?- la miro sorprendido, no estoy acostumbrado a que se interesen por mi.
- Eh... bien supongo, Joe no deja de machacarme estoy todo el día entrenando.
- Eso lo noto- dice mirándome los brazos mordiéndose el labio. Joder.
- Niñata no hagas eso, llevo 5 días sin follar y créeme que ese simple gesto puede hacer que me desate- escupe la bebida que esta tomando y empieza a toser. Me levanto y me pongo a su lado dandole golpes en su espalda. La risa me invade cuando me mira con mirada asesina.
Me vuelvo a sentar en mi sitio y veo como su mirada se ha oscurecido.
- Yo también llevo 5 días sin hacer nada y estoy muy estresada- deja caer el tirante de su camiseta mientras muerde su taco. Mierda.
- Diablilla...
- Niñato...- me guiña un ojo y sigue comiendo tan tranquila.
POV CAROL
Me divierte ver a Stephen nervioso. Me ha sorprendido que no haya hecho nada estos 5 días, tenia asumido que iba a estar con otra chica pero me agrada que no lo haya hecho. Aunque dijimos que podíamos estar con más personas no me apetece comerme las babas de nadie.
- Cuéntame algo más, hay que sacarte las palabras con alicates. ¿Cuándo empieza la liga?- una sonrisa se forma en su boca. Observo como tiene un poco de salsa en el labio inferior por lo que aprovecho y me estiro encima de la mesa para poder quitárselo. Se quedo muy atento a mis movimientos, por lo que lentamente le quito la salsa con el dedo pulgar llevándomelo a la boca. Me siento en la silla y cojo mi comida. Cuando levanto la mirada lo veo mirándome fijamente.
- ¿Entonces la liga cuando es?- le pregunto divertida viendo cómo traga saliva.
- Eres mala.
- Que va, si soy un angelito- una sonrisa ladina se forma en su cara.
- Empieza dentro de tres semanas, ¿vas a venir a verme?
- ¿Estoy invitada?
- Eres la diablilla creo que no te hace falta invitación- una sonrisa se forma en mi cara.
- Entonces iré- le sigo preguntado cosas y poco a poco se va abriendo un poco más a mí. Cuesta sacarle las palabras pero lo estoy consiguiendo. Miro la hora en el móvil y veo que es muy tarde, voy a perder el ultimo autobús a este paso. Me levanto de la mesa ante su atenta mirada.
- Me tengo que ir se me ha hecho tarde.
- ¿Te espera alguien?- pregunta curioso.
- No.
- ¿Entonces?- pregunta con una ceja levantada.
- Si no me doy prisa voy a perder el último autobús y no me apetecer irme andando de noche.
- ¿De verdad piensas que iba a dejar que te fueras en autobús estando yo aquí?- siento mis mejillas ruborizarse.
- No lo sé...- digo sin saber qué contestar.
Se levanta y se posiciona a mi lado muy cerca de mí.
- Ademas que después de como me has dejado no te vas a librar tan fácilmente de mi- murmura mordiéndome el lóbulo de la oreja. Suspiro y lo sigo cuando va al mostrador a pagar. Intento adelantarme viendo su intención pero me para cogiéndome de las manos y pegándome a su cuerpo.
- Voy a invitarte yo asi que ni se te ocurra protestar- iba a decir algo pero me miro achinando los ojos y prefiero callarme.
- Gracias- murmuro por lo bajo.
- De nada- dice riéndose.
Cuando pasamos por delante de un grupo de chicas vuelve a poner su careta de frialdad que utilizaba conmigo al principio. Ahora me doy cuenta de que nuestra relación ha cambiado mucho.
- ¿Que miras tanto niñata?- me pregunta cuando salimos del bar.
- En que ya no eres tan borde como al principio- con las manos en los bolsillos se pone a caminar a mi lado.
- Con la gente que me importa no soy así- dice mirando hacia el frente.
- ¿Y yo te importo?- su mirada esta vez se dirige a mi por completo. Una sonrisa burlona se forma en su cara.
- Un poquito.
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No sabeis la alegria que me da que este gustando esta historia. Cuando me levanto y veo las notificaciones me dais la energía que me falta para empezar el día. ❤️❤️❤️ Os leooooooo!!! Y dentro de 2 días el siguiente capitulo 😊😊😊😊🙈🙈🙈🙈