• Namjoon nunca abrió su corazón a Jin y se a mantenido como su amigo más cercano por años.
• Jin es un Omega solitario que solo se ha concentrado en el trabajo los últimos años.
( Las asignaciones son las mismas)
×Este será súper alternativo como "Anhelo prohibido"×
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Sus compañeros de trabajo le habían invitado a un bar con buena música a pasar el rato, entre ellos se encontraba Jeon Jungkook quien era un camarógrafo que había conocido hace unos años, había visto su trabajo por una página y se enamoró de inmediato, era un buen chico y le ayudo a encontrar trabajo, Jeon le acompañaba donde quiera que fuese aún cuando eran sesiones fotográficas con algún fotógrafo de alguna empresa el castaño se presentaba de todas formas para grabar o hacer fotos. Jungkook le daba lo que no podía ver en otros alfas, confianza.
- Jinhyung, iré al baño! - Le aviso el joven Alfa para levantarse de la mesa y dejarle con sus colegas a los que en verdad no les estaba poniendo nada de atención.
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Jin tomó su bebida para darle un corto sorbo y entonces las luces del escenario se encendieron, sus ojos centellaron ante la figura de un hombre sosteniendo ese encantador micrófono entre esas grandes y masculinas manos, su boca se secó y al percatarse de lo interesado que estaba en ese hombre que mantenía la mirada baja con un aspecto misterioso desvió la mirada. Sus ojos se clavaron en el líquido dorado en su vaso pero entonces su cuerpo tembló de pies a cabeza cuando la gutural voz de ese chico acaricio sus oídos, era demasiado grave y tan masculina que junto las piernas sintiéndose inquieto, cerró los ojos con fuerza al sentir con sutileza la esencia de algún alfa solo para darse cuenta de que está debía proceder del mismo que ahora cantaba provocando que su corazón latiera desbocado.
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Un nuevo sorbo a su trago.
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Sin soportar más la incertidumbre elevó su mirar al escenario, nunca pensó que se arrepentiría de aquella decisión pero para cuando se dio cuenta ya era demasiado tarde o quizás en el momento que esa voz acaricio sus tímpanos había caído rendido a él, había sido flechado. Ese hombre sobre el escenario era hermoso, su cabello era oscuro y su piel parecía brillar al ser bañada por la luz del reflector que caía sobre ese cuerpo masculino, esa chaqueta larga y café resaltaba sus hombros y su altura, pero lo que terminó por hacerle caer fue esa mirada azul que se fijó en el. Un jadeo escapó de su garganta, cruzó las piernas y entonces bebió su trago hasta la última gota, se perdió dentro de su fantasía y como un sueño podía sentir a ese Alfa susurrar sobre sus oídos esa canción lenta y seductora. Seok Jin era incapaz de retirar la mirada al igual que no era capaz de controlar el latido de su corazón.
Su cuerpo reaccionaba de esa forma incluso vergonzosa y entonces agradecía que las luces del lugar fueran realmente sutiles pero lo que no podía disimular era su esencia, su cuerpo estaba hecho un desastre y sin percatarse había entrado en celo.
- Jin hyung? - Escucho a su lado y entonces vio a Jungkook que había vuelto del baño quien sabe hace cuánto, el muchacho le miró con una mano sobre su boca y entonces su mirada se dirigió al resto de la mesa.
- Ah! Necesito ir al baño... - Dijo nervioso y avergonzado ante las reacciones de su cuerpo y se levantó de su lugar para salir en dirección a los tocadores.
Sus pasos pasaron de las puertas del baño y recorrió el corredor hasta la salida, el aire frío de la noche le golpeó y se encogió cubriendo su boca con una de sus manos,su celo parecía comenzar a florecer en su cuerpo, anhelaba escapar de esa esencia encantadora y de esa voz gutural que le hacía temblar de pies a cabeza. Quizás llevaba unos quince minutos arrodillado en esa posición intentando calmarse pero para su mala suerte alguien abrió la puerta a su espalda, una mano cálida acaricio su espalda y entonces esa voz se presentó ante él nuevamente pero esta vez le robó un suspiro.
- Estás bien? - Dijo preocupado el Alfa al verle arrodillado y sin darse cuenta de sus acciones se arrodilló junto a ese chico para acariciar su espalda.- No te sientes bien? - Preguntó sintiendo el ligero temblor del cuerpo contrario.
- Estoy bien... - Contestó para levantar la mirada jadeando.
- Ugh... - Un gruñido escapó de los labios del Alfa cuando esos ojos brillantes y suplicantes se encontraron con los propios, el aroma a celo no tardó en ser identificado por el menor y como pudo retrocedió. - Lo siento, llamaré a alguien para que te ayude... - Dijo tapando su boca dispuesto a irse a buscar un Beta que pudiese ayudar a ese Omega.
- Espera! - Jin se puso de pie como pudo y cogió el brazo de ese desconocido. - Necesito tu ayuda... - Agrego jadeando para llevar una de sus manos a su camisa para jalar la dejando a la vista sus clavículas en una acción obviamente seductora.
Esa mirada azulina le delineó por un momento y entonces ese brazo fuerte se abrazo a su pelvis ya sin ser capaz de resistir a la tentación sus labios fueron tomados en un beso lujurioso y a la vez tan suave casi tímido.
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Jin caminaba por la acera vistiendo un conjunto deportivo, sobre sus oídos descansaban esos pequeños audífonos inalámbricos de color blanco y su respiración era regular dada en sincronización con los pasos que daba al trotar por el lugar. Necesitaba mantener la mente ocupada pero no importaba cuanto lo intentará el recuerdo de la noche anterior le hacía temblar de pies a cabeza y los colores no tardaban en subirse a su rostro.
- Maldición! - Gritó llamando la atención de los pocos transeúntes que paseaban por el parque a esa hora de la mañana.
Al llegar a su departamento entró rápidamente al baño para ducharse, sus manos delinearon las marcas rojizas a lo largo de su abdomen, había tenido sexo con un completo desconocido pero no sé arrepentía es más había sido la noche de celo más placentera que había pasado y no lo decía por su obvia falta de sexo, había sido especialmente caliente e inesperadamente violento. Nunca creyó que el sexo duro podría disfrutarse tanto o simplemente había descubierto una nueva parte de el mismo esa noche sin inhibiciones.
Su celo aún estaba latente pero había comenzado a tomar una decisión más fuerte de supresores, eran realmente efectivos al punto de disminuir su aroma casi en un 100% y el deseo en un 80%, de vez en cuando comenzaba a lubricar pero era más controlado de lo que solía mojarse.
Se apresuró a ducharse y secando si cuerpo comenzó a vestirse cuando el timbre de su departamento sonó, sabía que debía ser Namjoon ya que habían quedado de ir a comer juntos pero aún no estaba listo así que se apresuró para hacerle pasar.
- Buenos días! Aún no estoy listo así que debes esperarme un poco... - Insistió SeokJin caminado delante del menor en dirección a la habitación.
Jin se adentro nuevamente en el baño y Namjoon se sentó a la orilla de la cama, ese lugar estaba impregnado del seductor aroma de ese Omega de cabellos oscuros, le deseaba pero no se atrevía a confesarse en el fondo sabía que era mejor mantenerse a su lado como un amigo a ser rechazado y tener que alejarse para siempre. Jin hablaba de quién sabe que cosa mientras el alfa mantenía la mirada fija en esa ancha espalda , esa camiseta era realmente traslúcida y sintió su sangre hervir en cólera cuando vio obvias marcas de besos y mordidas sobre la amplia espalda del mayor, Jin no solía salir con nadie y ahora que sabía estaba rondando a alguien no pudo soportar los celos.
- Hyung... - Namjoon le llamó y le agarró de la mano sin la más mínima intención de dejarle ir. - Puedo ver a través de tu camisa... - Dijo mirándole severo.
- Namjoon? - Jin le llamó confundido para luego ser arrojado con fuerza sobre la cama, el cuerpo contrario se subió sobre el propio y jadeo al sentir el fuerte agarre sobre ambas manos. - Qué...? -
- Ahora te acuestas con cualquiera? - Preguntó mirándole desde arriba con su voz sonando más gutural de lo usual.
- No se de que hablas... - Contestó el mayor con una expresión nerviosa y entonces sus manos fueron soltadas para dar paso al fuerte crujido de su camisa al ser rasgada como una débil pieza de papel. - Ya basta Namjoon!! - Grito al ver su ropa hecha harapos pero lo que le descolocó fue sentir como esos dedos recorrieron su abdomen y se sonrojo en sobremanera al ver nuevamente esas marcas repartidas por su piel.
- Eres un mentiroso! - Le gritó para rápidamente comenzar a saborear la piel desnuda de ese cuello y clavículas. - Ese bastardo te tomó con violencia, verdad? - Pronunció al despegarse de esa piel y delinear una marca de mordida alrededor de uno de los pezones del pelinegro, ese alfa debió morderle con fuerza y no era más que una pista de lo salvaje que debió ser con el cuerpo de su Hyung. - Yo también puedo ser salvaje si eso quieres... - Namjoon deshizo su cinturón y le dio un fuerte golpe en el abdomen, Jin gritó de dolor y aún aturdido por el repentino golpe no pudo evitar que sus manos fuesen atadas inmovilizándole.
- Desatame! - Dijo apretando los dientes obviamente molesto por aquella situación, su abdomen era decorado por esa marca roja que dejó el cinturón sobre su piel y ardía bastante. - Qué rayos crees qué haces!? No estoy para esta clase de juegos tontos! - Vocifero sin comprender porqué su mejor amigo le estaba haciendo algo como eso.
- No es un juego... Me gustas y no permitiré que me abandones!- Gritó en respuesta el menor para desatar el pantalón contrario. - Me he aguantado todo este tiempo... - Dijo para tomar el cuerpo del mayor y voltear le para luego bajar esos ajustados pantalones y entonces gruñó al ver la piel desnuda de esas posaderas redondas y suaves, lo único que arruinaba su deleite eran esas marcas de besos.
- Maldición! Ese bastardo te saboreo por todas partes! - Gruño apretando esa suave piel entre sus dedos y sin previo aviso le dio una fuerte nalgada.
Jin se estremeció al recibir ese golpe y dejó escapar un par de quejidos de dolor, Namjoon estaba siendo despiadado, el aroma de sus feromonas era realmente fuerte y como un mal chiste sintió el calor en su parte trasera, estaba en celo pero era tan solo una respuesta fisiológica, solo era cuestión de tiempo para que ese Alfa se percatarse y le tomara en un arrebato igual de descontrolado como aquellas acciones hasta ahora.
- Por favor Namjoon! Reacciona! - Le rogó asustado al escuchar la bragueta de ese pantalón abrirse. - Nam... Agh! - Un grito ahogado escapó de su garganta cuando el miembro ajeno invadió su cavidad sin preparación alguna, sin tacto ni compasión. En verdad estaba siendo violado por su querido amigo y su estómago se revolvió provocándole náuseas.
Era un Omega pero en verdad iba a bajar la cabeza y aceptar aquello, en verdad dejaría que ese chico le tomase hasta el final?
Jin apretó los labios evitando que cualquier sonido escapase de su boca, no le daría esa satisfacción y con cuidado se encogió dejando sus manos atadas frente a su boca y aún recibiendo cada embestida intentaba desatar la correa alrededor de sus muñecas con sus dientes. Nam agarró su trasero con firmeza, entonces le embistió fuerte y profundo provocando que sus piernas temblaran ante el placer contradictorio de su celo.
- No allí! Ah! - Gimió al sentir ese miembro frotar el conducto hasta la entrada de su útero, odio su cuerpo en ese momento, odio sentir placer al ser tomado sin su consentimiento y sobretodo odio caer tan bajo sin ser capaz de poner más resistencia.
Cuando volvió en sí estaba sobre su cama con las manos desatadas, su mirada estaba borrosa y entonces se percató de que ese hombre seguía arremetiendo en su interior esa sería la cuarta vez consecutiva que eyaculaba en sus entrañas y su voz estaba quebrada y era muy débil gracias a los gritos que dañaron su garganta.
- Vete...- Pronunció apenas y entonces se sentó en la cama con la mirada fría. - Largo! Vete! - Gritó sin importarle el dolor de su garganta y miró con odio a ese Alfa. - No vuelvas aquí nunca! -
Siempre que lo intentaba terminaba lastimado quizás era gracias a su naturaleza, era un Omega y le tocaba soportar la realidad que no era más que injusticia, donde cualquiera que quisiera podía ir hasta él y tomarle con la excusa de que era para ayudarle con su celo. Al único alfa que le dio permiso fue a ese chico de ojos azules, le deseo con desenfreno y se dejó arrastrar gustoso por ese acto pasional que aún permanecía impregnado aún después de ser tomado por Namjoon.
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Jugaba con sus manos bajo la mesa y mantenía la mirada baja pensativo, había ido nuevamente a ese club esperando encontrarse una vez más con ese Alfa pero su mente estaba demasiado ocupada para poner real atención a lo que ocurría a su alrededor, las luces bajaron su intención y esa voz grave invadió el lugar pero lo que debía deleitarle ni siquiera fue notado por Jin. Había apretado con fuerza sus manos al igual que sus ojos,en verdad lo que había ocurrido con Nam le había afectado más de lo que demostraba.
Si su mejor amigo le había hecho algo como eso en quién debía confiar? Acaso todo debía ser tan cruel? Estaba solo en ese mundo cruel e injusto?
El aire de repente no fue suficiente, las lágrimas por fin brotaron de sus ojos para caer tan egoístas, tan indulgente. Él quería mostrarse como alguien fuerte pero simplemente no le fue permitido en ese momento y como si fuese a romperse llevó ambas manos a su rostro en un intento inútil y burdo de detener ese llanto, pretendiendo esconder su sufrimiento cuando era tan obvio..
Por qué se mentía así?
Por qué no podía admitir que deseaba ser salvado?
Por favor dime que estoy equivocado...
Dime que no estoy solo...
Sálvame!
Su cuerpo dio un brinco cuando un cálido tacto le envolvió por los hombros, ese aroma llegó hasta su nariz e invadió sus pulmones, sabía quién era el responsable quien le sostenía como si le conociera de toda la vida como si su relación fuese real y no solo una fantasía en su mente.
- Ven conmigo! - Dijo aquel Alfa quien había bajado del escenario a mitad de su acto sin importarle que los presentes tuviesen toda la atención en él.
Jin fue arrastrado fuera de allí y una vez más estaba en aquella habitación en el segundo piso de ese club donde había compartido la cama con ese Alfa. Aún podía percibir su propio aroma combinado con la esencia contraria, sus mejillas estaban sonrojadas y su corazón latía inquieto.
- Te esperé la noche después de nuestro encuentro y la subsiguiente... - Dijo parado frente al mayor quien había dejado de llorar. - Pensé que no volverías. - Terminó de agregar arrodillándose frente al pelinegro para tomar esas manos con cariño, la sensación de esa piel era tan agradable pero su deleite se vio opacado por aquellas marcas moradas en las muñecas de Jin, sus dedos acariciaron esa área herida para luego buscar la mirada del pelinegro.
- No es nada... - Contesto intentando alejar sus manos y ocultar sus heridas pero esos dedos se entrelazaron con los propios en un agarre firme pero que no le lastimo, más bien se sintió avergonzado al ver sus dedos entrelazados así y luego esos labios besaron el área con cariño.
- No dejaré que nadie más y lastime... Jin - Le llamó y entonces fue SeokJin quien se inclinó para pesar esos labios. No entendía como podía confiar tan ciegamente en ese chico, ni siquiera recordaba su nombre pero se dejaba besar y tocar por él, permitía que esa lengua probara su boca y que esas manos acariciaran su espalda desnuda.
Su cuerpo descansaba sobre la suave cama y su cuello era besado con lentitud, sus piernas permanecían sobre los hombros contrarios y sus manos acariciaban el cabello suave y liso de esa nuca. Su boca se deshacía en gemidos mientras su cuerpo se derretía con cada embestida, ese Alfa le tomaba con tanta pasión que no dudaba que quedaría impregnado al recibirle con tanto deseo.
- Taehyung... - Gimió sintiendo que su cuerpo no soportaría más esa satisfacción y con lágrimas en los ojos besaba con insistencia esos labios. - Tae! Dentro... Siento que me volveré loco! Ah! - Se quejó al sentir el miembro ajeno golpear su interior en un lugar tan placentero que arqueaba la espalda y temblaba por completo fuera de sí.
- Ah... Voy a venirme... - Dijo separándose de esos labios gruesos y suaves acariciando ese cabello negro observando la atractiva expresión sobre ese hermoso rostro. Enterró peligrosamente su rostro en ese cuello sintiendo la esencia floral de Jin quizás deseando marcarle pero ese comportamiento egoísta no se lo perdonaría ni a sí mismo.
Al terminar se dejó caer sobre el pecho del mayor, había mordido su labio para disipar el deseo de poseer a ese hombre.
- Estás temblando... Tu celo es demasiado? - Preguntó al observar como cada respiración contraria era dada con dificultad, como ese cuerpo que había tomado hace un momento seguía tan deseoso y con cuidado acaricio los muslos internos del mayor empapando su mano con esos fluidos mezclados con los propios.
- Hazmelo más... - Le suplicó con lágrimas en los ojos, sin ser capaz de contener el calor desbordante de su cuerpo y como aquella noche rogó por más.
Taehyung tomó su cuerpo con cuidado para ponerle boca abajo, le acarició con lentitud y beso esa amplia espalda, saboreaba esa piel e inhalaba esa esencia tan seductora.
- Entonces te lo haré hasta que deje de ser doloroso y estés satisfecho. - Susurró sobre el oído de SeokJin y entonces le penetró con lentitud, volviendo a iniciar ese acto de sexo desenfrenado pero está vez fue mucho más dulce y lento, quizá demasiado intenso para el mayor quien llegó al orgasmo con rapidez y el resto de la noche se sumieron en caricias y besos pasionales.
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Jungkook mantenía el lente de su cámara en Jin, el menor había insistido en tomar fotografías más recientes para su currículum y no tuvo mejor idea que hacer fotos un tanto más sensuales de lo que hubiese preferido. Usaba unos pantalones rasgados que dejaban tramos e su piel al descubierto y una camiseta negra con un cuello en v bastante pronunciado.
- Ya casi terminamos, no quieres salir a beber luego de esto? - Preguntó el Alfa menor actuando tan profesional como de costumbre. - Lo he notado hace unos días... Ya conseguiste un amante? -
- Por qué lo dices? - Contestó un tanto apenado y entonces recibió una sonrisa burlona del menor.
- Tu piel y todo luce mucho más "brillante" no puedes negar que has estado teniendo mucho sexo... - Se rió ya bajando su cámara. - Entonces qué harás ahora? -
SeokJin se echó sobre ese sofá de cuero y sonrió divertido, abrió las piernas para ponerse cómodo y cogió uno de los almohadones.
- Tengo una cita! - Dijo sonriendo enternecido. - Ya llegará aquí en unos minutos, creo que deberías conocerlo! Es un buen chico! - Terminó de agregar y entonces se vio interrumpido por el sonido de la puerta.
Jin se incorporó en su lugar y mantuvo la espalda recta contra el respaldo del sofá, ese chico que había ingresado parecía un tanto extraño y no tardó en identificar el aroma a celo de ese Alfa.
- Jungkook... - Le llamó el pelinegro y antes de poder reaccionar ese alfa de cabellos rubios se abalanzó sobre si.
- Mierda! Hueles tan bien... - Suga permanecía peligrosamente cerca y Jeon observaba con atención las actitudes de su hermano.
- Yoongi! Es suficiente! - Le gritó al ver como el mayor olisqueaba el cuello del pelinegro de forma sugerente como si fuese a morderle.
- El aroma de una flor... - Suga sostuvo la mano de Jin y la llevo a su boca para oler su esencia. - Y un sabor dulce... - Agregó luego de besar y lamer esa área.
Seok Jin tembló en respuesta a esa caricia no porque le agradará simplemente era una respuesta natural de su cuerpo, sus ojos se cerraron con fuerza cuando el aroma de ese Alfa se volvió fuerte por el celo y cuando esa mano se deslizó por su brazo bajo su manga tocando su piel de manera ascendente subiendo esa prenda negra hasta su hombro.
- Yoongi! - Volvió a llamarle el alfa menor pero el aura alrededor de su hermano mayor era diferente, esa mirada parecía nublada y su voz era incluso más grave que de costumbre. - Qué se supone que haces!? - Le encaró jalando de la chaqueta del mayor.
Suga se alejó un poco del Omega para dedicarle una mirada al menor, fue una advertencia como si le dijese que cerrará la boca de una vez. Conocía a Suga en todos sus aspectos o al menos eso había creído pero ese hombre altanero y violento no era reconocible, Jungkook no conocía esa personalidad ya que nunca había visto a Suga entrar en celo antes.
- Quiero olerte por todos lados... - Dijo dedicando su atención al Omega.
- No me toques! - Se defendió Jin alejando su mano mirando a ese Alfa con recelo, no quería ser tocado por un alfa que no fuese su Taehyung, quizás solo llevaban saliendo una semana y no habían tenido una cita como corresponde pero no negaría que estaba enamorado de ese chico y no traicionaría sus sentimientos.
- No me mires así... - Dijo con voz gutural volviendo a inhalar el encantador aroma contrario, Jin se estremeció cuando esas manos sujetaron sus muñecas pegándole aún más a esa superficie. - Me dan ganas de hacerte llorar. - Terminó de agregar observando como ese cuerpo temblaba sin remedio, el olor a celo se intensificaba a cada instante y no hacía más que nublar aún más la mente del rubio.
Jeon quien permanecía en su lugar apretó los labios sin saber que hacer, sabía que si liberaba su fragancia traería devuelta a Min pero empeoraría el estado de Jin, sin importar las consecuencias al ver esos ojos oscuros y brillantes mirarle con súplica no dudo ni un solo segundo. El joven alfa liberó sus feromonas cubriendo por completo el encantador aroma del Omega y al ver al Alfa mayor contraerse aprovecho para coger la cintura de su hyung para alejarle de Yoongi y ponerle a su espalda.
- Ya vete! - Le grito Jungkook al Alfa que cubría su boca como si no fuese capaz de soportar esa esencia.
- No lo entiendes... - Contestó incorporándose mirando directo a los ojos de su hermano.
- No eres tú ahora! Nada de lo que digas me hará apartarme! -
- Es mi destino! - Gritó sobresaltando al alfa menor y a Jin, su voz de mando era realmente aterradora y Jeon lo sabía muy bien.
- No digas tonterías! - Contestó el castaño tomando la mano del pelinegro quien se había aferrado a su espalda sin poder mantenerse de pie como correspondía.
- Jungkook... - La entrecortada voz del Omega le indico que estaba en su límite y que debía desvanecer su esencia.
Las feromonas de Suga se incrementaron en una obvia señal de lucha.
- Qué rayos sucede contigo!? - Gritó enfurecido el menor al ver como Yoongi había cogido con fuerza de sus cabellos para apartarle de Jin.
- Ya te lo dije, este no es tu asunto! - Yoongi
- No permitiré que le hagas daño! -
- Jungkook!! - Grito Jin al verle desvanecer, ese Alfa de cabellos rubios le había dejado inconsciente solo apretando un área en su cuello, se sintió aterrado al verse vulnerable frente a ese chico de cabellos rubios. - Por favor, no me hagas daño... - Suplico reconociendo esa mirada en los ojos ajenos, la misma sensación que una vez le dedicó Namjoon justo antes de herirle y entonces sintió sus ojos arder en lágrimas.
Por qué estaba tan asustado?
Por qué siempre terminaba en esa clase de situaciones?
Las manos de Yoongi tomaron su cintura, entonces apretó los labios conteniendo la ira y quieto en su lugar se cuestionaba a sí mismo, era en verdad dejaría que ese tipo le tocase así nada más?
El crujido de su cinturón fue el detonante, sus dedos formaron un puño y con fuerza le dio un puñetazo al Alfa frente a él, sabía por el comportamiento de Jungkook que Yoongi no estaba en sus sentidos gracias al celo y cuando le vio caer al suelo inconsciente en verdad se sintió mal por ese chico, no contempló mucho más aquella escena y se apresuró para socorrer a Jeon, le sacudió un poco y entonces le vio abrir los ojos bastante confundido.
- Jin! - Gritó el castaño preocupado tomando al mayor de los hombros aún preocupado.
- Estoy bien! Lamento haber golpeado tu amigo... - Se disculpó sintiéndose eufórico, como si aquel acto de violencia le hubiera liberado.
- Es mi hermano mayor! Ya te lo había comentado! - Contestó un tanto apenado por como habían resultado las cosas. - Estás seguro que estás bien? - Insistió acariciando los amplios hombros de su hyung quién simplemente asintió.
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Permanecía de pie fuera del edificio una gruesa chaqueta y su mirada se encontraba perdida, los nudillos de su mano derecha ardían pero más que el dolor lo que sentía con mayor fuerza era su corazón latir tan valeroso, en verdad había ido contra su naturaleza, quizás debió hacer eso antes, pero le habían criado de esa forma donde debía comportarse y hacer caso a todo sin importar nada, un Omega debía abstenerse a las consecuencias y aceptar cualquier orden como si fuese un esclavo o algo por el estilo, en verdad siempre había odiado las reglas y quizás por ello Taehyung había llamado tanto su atención, su familia jamás le aceptaría ya que lo que sus padres querían era que buscara un Alfa con dinero y renombre; en cambio Tae era un chico que no tenía mucho e incluso se había desligado de su familia, en simples palabras era un don nadie pero incluso si era así le quería y esperaba que su relación fuese más estrecha.
- Jin! - Escuchó a su espalda y al voltear se encontró con ese chico sonriente y tan apuesto, todo en él le gustaba, cada cabello, cada tramo de piel y esos ojos que eran de un profundo azul. Su personalidad vivaz y lo torpe que podía ser a veces, definitivamente era su ideal en todos sus sentidos. - Perdón por el retraso! - Se disculpó el menor y antes de poder decir una palabra más los esponjosos labios de Jin impactaron los propios, Tae se sorprendió en un inicio pero respondió gustoso a esa caricia.
- Te quedarás conmigo para siempre? - Pregunto sobre esos labios húmedos con su frente pegada a la contraria dedicándole una mirada suplicante y cálida.
- Si tú me lo permites. - Respondió con las mejillas sonrojadas, con el corazón acelerado y la respiración pesada, por completo enamorado de Kim Seok Jin.
Quizás aun era muy pronto para llamar a ese sentimiento amor
Quizá aun era muy ingenuo respecto al amor
Pero no dudaba que estaba locamente enamorado de
Kim Taehyung.
Y estaría junto a él hasta esperando que ese sentimiento cálido nunca se desvanezca, quería ser marcado por él.
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Gracias por leer! 💖