- Y aquí estan tus estupidas entradas para ver ese tal Christian grey. - Dijo al darme las entradas.
- Gracias. - Dije en un tono burlón.
Frunció el Ceño.
Al comprar las palomitas, nos dirigimos a la sala 3.
Si, es hora de ver a Christian grey, no me digan que no quisieran un Christian grey en sus vidas, porque si no, están locas.
Al comenzar la película, Mike hizo un gesto de aburrimiento.
Era obvio que esta película lo iba a aburrir, los chicos no les gusta el romance.
Ah pero cuando comenzaban las escenas sexuales, si que se divertía.
Justamente podíamos ver como el señor Grey azotaba a Anastasia. Mike se acercó a mi, Podía sentir su respiración en mi cuello, y olía su colonia. Se acercó mas a mi oído.
- Que tal si me dejas azotarte Robinson.
Al escuchar esas cochinas palabras, mi corazón latía con gran velocidad. No podía creer que me dijera eso. Bueno, no me sorprende es Mike cooper.
Fruncí el ceño.
Y me acerqué a él.
- Ni en tus sueños mas húmedos. - Le dije, y volví a mi posición actual.
Pude sentir que me observaba fijamente, Y sus ojos regresaron a la gran pantalla. Suspiré.
En toda la película no dijo ni una palabra, Eso me extrañaba, normalmente el no es así.
Pero no puede ser ¿Se enojó porque no lo dejé que me azotara? que cerdo.
Al terminar la película, entramos en su auto. Lo miré fijamente.
Me armé de valor, y le hablé.
- A ver, estas enojado ¿Porque no puedes azotarme? - Le pregunté encarnando una ceja.
Se dibujó una sonrisa maliciosa en su cara.
- Ja.. ja, en primer lugar estaba bromeando, quería ver tu reacción. y dos, eres muy inocente para que te azoten.
Aclaré la garganta, y levanté las cejas.
- ¿Eso es lo que crees? - Le pregunté.
- Sip. - Dijo en un tono pervertido.
- Pues, sigue pensando eso. no me interesa lo que pienses de mi. - Voltee a ver la ventana.
El me miró de reojo, y arrancó.
en todo el camino no dijo ni una sola palabra. pero todavía tenía esa sonrisa en la cara.
Idiota, no lo odiaba, pero a primera impresión, sinceramente no me agradaba.
Tenía una vibra de "fuckboy" eso es lo que tiene escrito en la frente.
- Ya llegamos. - Dijo Mike emocionado.
- Al fin. - Dije al bajar del auto.
Antes de cerrar la puerta, voltee a ver a Mike, y me guiño un ojo.
Puse los ojos en blanco.
- Adiós princesa. - Gritó mientras me dirigía a la puerta principal.
Yo lo ignoré, y al entrar a la casa, escuché que el auto se marchaba.
Al fin, el sufrimiento terminó, suspiré.
- ¿Y como te fue? - Antes de subir las escaleras noté que Dylan estaba sentado en el sofá.
- De lo peor. - Me acerqué al sofá.
- Bueno al menos no pagaste las entradas. - Dijo Dylan.
- Al menos. - Repliqué.
- Yo estuve aquí aburrido. - Hizo una mueca.
- Creí que ibas a salir con tus amigos.
- Pues adivina... se fueron con sus novias, y yo como siempre soltero en el sofá viendo el maratón de Harry potter.
- Me siento mal por ti. - Dije en un tono burlón.
- ¿Crees que es gracioso? yo hablo enserio. - Levantó las cejas.
- Yo nunca te he visto salir con chicas. - Dije dirigiéndome a la cocina.
Me siguió.
- Es que... - Hizo una pauza. - Las chicas que conozco o conocí, no son mi tipo.
- ¿Así? - Encarné una ceja. - ¿Y cual es tu tipo?
- Rubias. - Dijo en un tono pervertido y se mordió el labio inferior.
Entrecerré los ojos.
- Ni lo pienses. - fruncí el Ceño.
Puso los ojos en blanco.
- Esta bien, me voy a morir en el sofá viendo Harry potter. - Agarró una manzana.
- No tienes que morir justamente viendo Harry potter... porque no vez crepúsculo. - Dije en un tono burlón.
- Que graciosa eres. - Entrecerró los ojos.
Yo terminé de preparar mi sándwich y subí las escaleras.
Al iniciar sesión en Facebook, noté que recibí un mensaje de Kevin desde hace dos horas.
Kevin: Hola.
Yo: Hola.
Kevin: Parece que estabas ocupada.
Yo: No en realidad estaba con Mike.
Kevin: ¿Están saliendo o algo?
Yo: No, no, solo me invitó al cine, le dije bien claro que no era una cita.
Kevin: -.-
Yo: Es enserio •_•
Kevin: Esta bien te creo.
Yo: Que bien...
Kevin: ¿Que haces?
Yo: Comiendo un sandwich.
Kevin: ¿Y estas lista para mañana?
Fruncí el Ceño al leer el mensaje.
Yo: ¿Mañana?
Kevin: No me digas que lo olvidaste.
Yo: ¿Olvidarme de que?
Kevin: Mañana es el viaje a Mexico.
Formé una *o* con la boca.
Yo: ¿Que? Pero creí que era en dos semanas.
Kevin: Pues escuchaste mal.
Yo: Espera... tú no estas en mi clase.
Es cierto, como Kevin lo sabe si no esta en mi clase de historia.
Kevin: Ay Kate, si que estas en la luna.
Yo: ??
Kevin: Tu clase y la mía van a ir juntos.
Yo: Tengo que prestar más atención en clase.
Kevin: Sip, toma tus vitaminas mujer.
Yo: No eres gracioso -.-
Kevin: Jajaja, será mejor que te apresures, y comiences a empacar.
Yo: Ahorita mismo.
Kevin: No olvides tu cepillo de dientes.
Puse los ojos en blanco al leer el mensaje.
Salté de la cama, y busqué mi maleta en el armario. Me acuerdo que dijieron algo de una maleta grande, y una maleta de mano.
Agarré una mochila, y comencé a meter cosas necesarias para el viaje. Cosas que necesitaría al instante. Y en la maleta grande puse blusas sin mangas, shorts, un jeans, un par de tenis, ropa interior claro. Casi lo olvido, dos traje de baño, bloqueador solar. A si, seamos realistas. Tampones.
Sin olvidar nada, acomodé todo, y cerré la maleta, y terminé de arreglar la mochila.
Al terminar de empacar, bajé para informarles a todos que me voy mañana.
- ¡Todo el mundo! ¡Me iré de viaje mañana! ¡Gracias! - Grité a todo pulmón.
Espero que me hayan escuchado. Subí de vuelta a la habitación.
Revisé mi teléfono, y eran las 8 de la noche. Mejor me duermo temprano, así me despierto fresca mañana.
A la mañana siguiente era la primera vez que me despertaba tan temprano. Sip, yo también me sorprendí.
Agarré la maleta y mi mochila, y esperé a Kevin afuera como una buena niña.
Llegó después de 20 minutos.
Metí mis cosas en el auto, y me subí al asiento del copiloto.
- Llegaste tarde. - Entrecerré los ojos.
- Ay no me digas, si faltan como media hora.
- Tenemos que estar allí a tiempo.
fruncí el ceño.
El solo comenzó a reírse.
Al llegar a la escuela, todo el mundo tenía maletas y mochilas, Como yo.
Kevin bajó del auto, y me ayudó a bajar nuestras cosas. Podía ver a Jane desde lejos con su maleta morada, y su mochila de siempre.
Me saludó con la mano. Ella esta en otra clase, así que van a Uruguay.
- Uruguay no es tan cool como México. - Replicó Kevin.
- Lo sé. - Tenía una sonrisa de: que suertuda soy.
- Vamos con los demás. - Dijo Kevin señalando a un grupo de personas .
- Esta bien. - Dije arrastrando la maleta.
Al sentarme sobre la maleta, no me juzguen, los bancos estaban llenos. Mike se acercó con una mochila en su espalda.
- Hola hola. - Me saluda con una gran sonrisa.
Pero que diablos hace para que sus dientes luzcan tan perfectos.
- Hola Mike.
Kevin me miró de reojo, y volteó a ver para otro lado.
- Espero pasar el mayor tiempo contigo en el viaje Kate, bueno si a Kevin no le molesta. - Volteó a ver a Kevin encarnando una ceja.
Al oír su nombre, volteó frunciendo el ceño.
- A mi no me molesta, hagan lo que ustedes quieran, no es mi problema. - Cruzó los brazos contra su pecho.
- Para mi esta bien. - Se acercó mas a mi.
Yo le dí una pequeña empujadita para que se alejara.
- Hm ¿Te haces la difícil eh? - Colocó su mano en su barbilla.
Puse los ojos en blanco.
- Okay, ya entendí, me voy. - Levantó las manos. — Nos vemos. - Me guiñó el ojo.
- Que insoportable. - Bajé la cabeza con la mano en la frente.
- ¿Porque no le dejas bien claro que no quieres nada con el? - Preguntó Kevin.
- Ya lo intenté, pero insiste e insiste. Pero descuida no pienso tener nada con él.
Aunque quién sabe de lo que me estoy perdiendo, el es muy guapo, Pero ni lo sueñes Kate.
- Okay, ya entiendo. - Respondió.
- Todo el mundo, haga una fila para entrar al autobús. Por favor cooperen y hagan una fila. - Habla la profesora en un megáfono.
- Al fin. - Repliqué al levantarme y agarrar mi maleta.
Al llegar nuestro turno para entrar al autobús, Mike estaba hasta el fondo.
Pero que sorpresa, Lexy estaba justamente sentada a lado de Mike
- Por favor, al escoger su asiento, coloquen su equipaje en el compartimento de arriba. - Habla la profesora en su estupido megáfono.
Kevin se sentó a lado mío.
Obvio me senté alado de la ventana.
- Wow, quién lo hubiera imaginado. Lexy y Mike juntos otra vez. - Dijo Kevin al limpiar sus lentes.
- Ja ja, quién sabe, tal vez fue un accidente de asientos. - Le dije viendo atrás.
- No lo creo. - Dijo encarnando una ceja.
Me encogí de hombros.
La verdad no me importaba si habían vuelto, o si era un error de asientos.