Tiempo despues.
-Mia cariño regresa y deja a tus hermanos por favor.
-No, son míos.
-¡Mami! - llora Adam en los brazos de su hermana, la cual tiene a mis hijos de casi dos años junto a ella.
-Mi vida, tus hermanitos no son tus bebes ni muñecos. Ahora dámelos para que Adam deje de llorar.
-Por fis Mami.
-Dámelos vida mía - exclamo y veo como los suelta.
-No ashi Mia - le reprende Aiden y corre donde su hermano el cual me pide que lo cargue.
-No pasa nada mi pequeño - lo consuelo.
-Quele Tette
-Cariño tu colada se está haciendo. Vamos a que juegues con tus hermanos.
-¡No quele!
-Vale - exclamo mientras lo arropo a mí ya que no tiene intenciones de soltarme.
-Aiden vamos a jugar con Pooh
-Ba bau
-Sí, vamos -la agarra de su pequeña mano a la sala donde sus juguetes se encuentran esparcidos.
-Señora la cena está servida. Desea ponga la mesa.
-Esperare a mi esposo Anet. Gracias.
-Como guste.
-Gracias.
-Mi tesorito ¿Cómo te has portado hoy día? ¿Cómo te fue en la escuelita? ¿Jugaste con tus amigos?
-Shi, la pofe nos compia los fugetes.
-¿De verdad?
-Shi
-Vamos a lavarte esas manos príncipe.
Camino con él en mi pecho por la casa, hasta encontrar el pequeño baño de mis hijos para enjaguar sus sucias manitas.
-Ven príncipe. Indícame tus manos.
Aun resentido y medio sollozando me las da y juntos nos lavamos nuestras manos.
-Listo ahora tengo un hijo limpio y hermoso. - Adam me mira y me estira sus manitas para volver a cargarlo. De mis tres hijos él es el que siempre ha sido más apegado a mí, le costó dejar el seno, le costó caminar y ahora le cuesta dejar de meter su manito en mis pechos.
-Cariño, deja los pechos de Mami.
-No mami - llora de nuevo.
Dicen que siempre uno de tus hijos va a ser más apegado a ti y que creen, tenemos un ganador.
-De acuerdo hermoso, pero no se lo digas a Aiden.
Camino con el hasta llegar a mi habitación y ya ahí me saco los zapatos de taco y con mucha delicadeza la leva que cubre mi vestido.
-Mami
-Si príncipe.
-Yo tamben quele Pooh
-Cariño entonces vamos donde tus ñaño. ¿ Pero me prometes que te portaras bien y no lloraras?.
-Si mami.
-Bien, entonces vamos
Camino por la casa y me encuentro con la risas de mis pequeños cuando Pooh ataca a Mia sin piedad alguna.
-No Pooh ¡No! - grita mi pequeño cuando ataca a su hermano - Mami lo come ¡Ñaño!
-Cariño, solo están jugando.
-¡Ñaño!
-Es solo un juego bebe.
Ínsito a que nuestra mascota venga hacia mí y ya ahí, bajo a mi hijo y empiezo a acariciar a Pooh, quien mueve su colita y me lame el brazo.
-¿Quién es el más juguetón? - hablo con voz de bebe
-¿No te come mami?
-No mi amor. Solo está jugando. Ven, tócalo. - mi hijo se acerca y poco a poco se encariña con nuestra mascota. Creo que en la fiesta de cumpleaños número tres de Mia, cuando Pooh ataco el pastel y la mesa de bocaditos mi hijo genero un poco de miedo, pero yo me encargaré de que así no sea.
Dejo a mis hijos jugando con Pooh y me levanto del suelo para ir a cambiarme, pero entonces un cuerpo enorme me sorprendo y casi pego un grito cuando lo veo.
-Esposo mío
-Esposa mía ¿le he dicho cuan hermosa está usted hoy? - dice mientras me envuelve en sus brazos. Lo beso muy despacio y el envuelve sus manos en mi cintura.
-¡Papi! - grita Mia y se avlanza hacia nosotros.
-Mi princesita ¿Cómo estas hoy?
-Bien....jugue con mis ñaños. Y ya se contar hasta en cinco..uno, dos, tres, cinco ...no no no, cuatro y cinco - dice mientras nos indica sus dedos.
-¡Oh por Dios!. Mi hija es una niña genio.
-¡No! ¡No! - dice Adam cuando Pooh lo sigue a él.
-Sigue teniéndolo miedo.
-Estoy en eso.
-Ven hermoso - dice él mientras salva a su hijo de nuestra mascota y deposita a Mia en el piso.
-¡Hola papi! - dice la voz de Aiden.
-Ven acá campeón. - entonces mi hijo estira sus mano y mi esposo los carga a los dos.
-¿Cómo se han portado los pequeños hombres de la casa?
-Ben - dicen los dos.
-¿De verdad?
-Siempre están bien - sonrío.
-¡Mia! - grito cuando mi hija empieza a querer montarse encima de nuestro perro. -Pequeña él no es un caballo - hablo mientras la levanto.
-Bien vamos a lavarnos las manos para comer.
-¡Helado!
-No pequeña, comeremos una sopa de verduras.
-¡Pero mami...
-Nada de peros señorita. Después comerás ese helado.
-Bueno - dice triste pero tras un par de besos por su parte de su padre se calma.
-Te amor....!oh! mi amor cuanto te amo - susurra mi esposo mientras se empuja más dentro de mí.
-¡Ah! Mi amor......- casi hablo cuando lo siento ir más rápido. Guio mis caderas más a fondo hasta lograr la fricción que los dos queremos y finalmente se desploma ante mí.
...
-Felices veinte cuatro - le digo mi mejor amiga abrazándola con fuerza.
-¡Tía Amy ¡ - grita Mia y la abraza también
-Oh mi pequeña sanguijuela. Ven aquí.
-¿Haz llamado sanguijuela a mi hija?
-Es un lindo apodo.
-No lo creo...
-Tía Am - gritan los gemelos y se acercan con una pequeña bolsita cada uno.
-Pequeños saltamontes - besa sus pequeñas cabezas.
-Y ahora también haz insultado a mis hijos.
-No es mi culpa. Lo hago con cariño.
-Te perdono solo porque es tu cumpleaños.
-Ten Tía -dicen mis hermosos.
-¿Para mí?
-Shi - dice Adam. Entonces mi amiga abre la pequeña caja de regalo y los mira feliz a los dos para luego comerlos a besos.
-Este es mío - dice Mia también y Amy abre la pequeña cajita abriendo los ojos por completo.
-¿Cómo lo....
-Solo lo sé. Felicidades - la abrazo.
La fiesta que mi primo ha organizado sigue así, entre risas por parte de todo y más. Quien iba a pensar que esa pequeña chica loca conquistare el corazón de mi primo de esa manera.
Cuando el reloj da las cuatro de la tarde Peter pasa al frente y pide que Amy pase igual.
-Bueno todos se preguntaran porque he apagado la música y estoy aquí en frente. Bueno, respecto a eso la respuesta es fácil..- agarra la mano de Amy - No sabemos cómo paso. O bueno creo que sí, pero los planes se fueron dando y ....bueno es decir...vamos a ser papás.
-¿Qué? - grita mi esposo.
-Y como verán esta mano - dice mientras indica el anillo de Amy, el cual creo y se lo acaba de poner - Los esperamos en unos meses a nuestra boda. Al fin he encontrado el amor.
-¡Seré abuelo ¡ - grita mi tío feliz y abraza a Amy.
-Mierda
-Merda - repita Adam
-¡Ethan!, cariño esa no es un buen vocabulario. Ahora di otra cosa más bonita.
-Mamá.
-Muy bien príncipe.
-Sere tio....Dios, es mi hermanita, la niña que cuidaba cuand...
-Basta amor, sabes muy bien que ellos se aman. Y deberías estar feliz de que mi primo dese una vida a lado de tu hermana.
-Es solo que....
-La más y te encuesta aceptar que creció cariño. Pero esa Amy nos dará otro bebe al cual consentir, a nuestros sobrino.
-Te amor nena. ¿Qué haría sin ti?
-No se rey mío, pero ahora vamos a felicitar a los futuros padres.
-Por dios, deja que me acostumbre.
Abrazamos a mis primo a mi mejor amiga y yo no dejo de repetirlos cuan feliz me hacen por darme otra pequeña personita a la cual amare para siempre.
.....
-Mami mami
-Si hermoso
-Ete para Sami - dice mi pequeño Aiden indicándome uno de sus carritos, el cual quiere llevar a la tumba del pequeño Samuel.
-¿Quieres que se lo demos a tu hermano hermoso?
-Shi
-Muy bien amor, entonces lo llevamos.
El tiempo es uno de nuestro mayores aliado, tanto Ethan como yo nos hemos encargado de que nuestros hijos recuerden a aquellas personas que se fueron para darnos vida a nosotros, y con el tiempo mis tres pequeño los supieron amar aun cuando sus cuerpos no estén presentes.
Mi pequeño Aiden guarda su carrito en mis bolos y yo lo beso enormemente. Desde que tengo uso de memoria mi pequeño es muy serio y sentimental, siempre busca como ayudar en lo que puede y ya lo veo siendo el líder de sus hermanos, en cambio mi Adam es un poco mimado y muy pegado a mí y a su padre, mi pequeño siempre busca ser el centro de atención y más, y Mia, mi gran princesa, ella es simplemente única, es como el intermedio de los dos, cada día le hablo de nuestros padre y aunque es muy pequeña para entenderlo, con el tiempo sé que lo hará, y que ese amor que me tiene también los tendrá por ellos.
-Mami vamos - dice Mia desde la puerta.
-Vamos princesa.
Colocamos a nuestros hijos en la parte trasera del coche y con mucha calma conducimos hasta nuestro lugar en familia. Agarro la mano de Ethan y él la toma feliz.
-Bien hermosos, llegamos - dice mi esposo mientras los ayuda a bajar del carro.
Los tres se bajan del carro y corren al gran lugar de hierva cubierto con lapidas grises.
-¿Dónde está mi otra mami y mi otro papi, mami?
-Ya los veremos princesa.
-Sami - grita Adam feliz. Mis niños conocen este comentario más que nosotros mismos y eso me gusta....y mucho.
-Hola pequeño Sami - hablo mirando a la tumba y colocando el gran ramo de rosas blancas que le hemos comprado.
-Hola Sami - hablan mis hijos y su padre empieza a tocar las rosas con los ojos tristes. Lo abrazo viéndolo así y limpio la pequeña lagrima que sale de sud ojos.
-Te queremos Sami - dice Mia.
-¿Aiden cariño, quieres darle lo que trajiste a tu hermano?
-Si - dice sacando el pequeño carrito de mi bolso. Lo ponemos abajo del ramo y Aiden habla: lo compie para ti, ñaño.
-¿Tu hiciste eso? - dice Ethan limpiando sus lágrimas.
-Fue idea de él, te lo juro.
-Cada día les enseñas a ser grandes personas....te amo por eso esposa mía.
Lo beso
Pasamos un rato más junto a Sami hasta que finalmente decidimos ir a ver a mis padres. Me acerco a su tumba y aunque trate de hacerme la fuerte, siempre duele.
-Hola - dice Mia mirando las lápidas.
-Abelos - dicen los gemelos.
Convivimos con ellos un rato más y siento como mi niña se pone feliz contándoles sus cosas....eso me gusta quiero que mis hijo crezca sintiendo la presencia de ellos.
Salimos de ahí un poco tristes pero nuestros hijos se encargan de hacernos reír de nuevo.
Después de todo lo malo, sólo recuerdo que los tengo a ellos.
Tiempo despues.
-Feliz cumpleaños amor de mi vida - beso a mi esposo en la toda su cara.
-Uhmmm, nena ¿acaso no tuviste mucho con lo de anoche?
-No...nunca tengo más'- beso su mandíbula.
-Papi papi - dicen mis pequeños niños de seis años entrando en la habitación. - Feliz cumpleaños papi - lo besan.
-¡Papi cumpleañero! - grita Mia y salta a la cama junto a nosotros.
Salgo un rato dejando a Ethan ahogado con nuestros hijos y regreso a la habitación con un pastel en manos.
-Cumpleaños feliz, te deseamos a ti.....- y todos empezamos a cantarle.
-Mi familia cuanto los amo.
-Pide un deseo amor.
-Lo tengo todo, nada me hace falta. - dice soplando las velas.
-Bien amores, es mejor ir a alistarnos para celebrar el cumple de papi.
-Vamos a bañarlos pequeños - les hablo a mis hijos.
-No, nos bañamos con papi
-De acuerdo, entonces vamos a ponernos guapas princesa.
-Vamos mami.
La fiesta no es muy grande, es más bien solo con la familia y algunos amigos de la empresa. Tyler, el pequeño hijo de Amy y Peter, corre hacia me y pide que lo cargue, es un niño hermoso de casi cuatro años.
-Yo tanben Tía - dice mí también sobrina. Resulta que Amy tuvo dos hijos seguidos y ahora espera uno más.
-Claro que si mi pequeña Brigith . - la levanto.
-Vamos a jugar - les dice Mia junto a Becca y enseguida se bajan de mi regazo.
-Gracias por todo nena - dice Ethan a mis espaldas.
-¿Te gusto?
-Sabes que sí. Pero mi regalo nocturno será el que más amare.
-¿A si?
-¿Qué regalo? - nos interrumpe Amy con su barriga de cinco meses.
-Nada de nada ¿Cómo está mi sobrina?
-Inquieta dice ella - colocándose las manos en el abdomen.
-Vamos a que soples el pastel Ethan - dice mi prima poniendo sus brazos alrededor de su esposa. -¿Por qué aun soplas verdad?
-Mnnn, tuve dos hijos de una sola vez - juega Ethan.
-Punto para mi hermoso - digo mientras lo beso.
-Pero yo ...
-Nada de peros, hoy día gana mi esposito en todo lo que quiera.
-Vamos a soplar el pastel - dice Amy con una sonrisa de complicidad.
-No sé porque me insisten tanto, pero vamos - dice mi esposo caminando conmigo adelante suyo.
Todos nos formamos en un gran círculo mientras empezamos a cantar la gran anhelada canción.
-Momento para mi regalo.
-Nena, si ya has hecho...
-Shhh
-Mis amores - llamo a mis hijos los cuales traen unas pancartas en sus brazos.
-¿Qué es eso? - dice sorprendido.
-Ahora - exclamo y cada uno de ellos gira las pancartas.
Felicidades Papi, tendremos un hermanito....oh bueno, dos.
-¡¿Qué?!
-Supongo que tendremos que volver a comprar dos cunas más - exclamo con un ultrasonido doble en mis manos. Seremos papás de nuevo.
Su mirada se pone feliz y lágrimas de alegría caen de sus ojos.
-¿No me mientes? - pregunta levantándome en el aire.
-No, no lo hago.
-¿Y serán dos?
-Dos - confirmo.
-Nena me haces tan feliz - dice tocando mi vientre. - ¿De cuantos...... - De tres mi amor.
-En hora bueno hermano. Que puntería - dice Amy abrazándolo y así todos nos felicitan por la muy esperado noticia.
Presente.
-¿Todo bien nena?
-Todo bien amor - sobo mi panza de cinco meses. - Creo que Anabet y Oriana ya quieren salir.
-¿A si? , pues no señoritas, no saldrán hasta que tenga nueves meses. Y de casa no saldrán hasta que cumplan treinta.
-¡Ethan!
-¿Qué?
-No asustes a mis niñas.
-No lo hago.
-Lo haces.
-Vale nena, ven y te doy un besito.
.-No quiero tus besos, porque ya sé dónde terminan.
-No es mi culpa que estemos en la cuidad de amor. Debo hacer honor a ese nombre.
-Eres un manipulador - sonrió.
-Solo me aprovecho de lo que es mío. - dice acostándome en la cama. Pero entonces una llamada de Skype nos interrumpe.
-Joder.
-Acéptala, ya quiero ver a mis bebes.
-¡Mami! - es lo primero que escucho cuando a llamada entra. ¡Papi!.
-Mis hermosos hijos.
-Papi Mia esta enojada - es lo primero que dice Adam.
-¿Por qué?
-Hoy en la escuela un niño le robo un beso en el cachete y yo lo aleje.
-¡Espera ¿cómo que lo alejaste?
-¿Quién se atrevió a tocar a mi hija? - hablamos iguales.
-Adam tiene una sanción - dice Amy acercándose a la cámara.
-¿Adam? - hablo enojada
-Mami, no fue mi culpa - dice inocente - Solo lo golpee un poco.
-¿Qué? ¿Hijo porque lo hiciste?
-Mi papi dice que debo cuidarla.
-Me cuidar sola - dice Mia con los brazos cruzados.
-Yo solo le dije que se aleje de ella mami - habla Aiden
-¡Le grito! ¡ Le dijo eso teniéndole de la camisa!
-¿Hijo es cierto?
-Es cierto - dice Amy - el solo está castigado, pero Adam tiene suspensión de cinco días.
-¿Qué hare con ustedes?
-Papi - dicen los dos viendo a Ethan con ojos de arrepentimiento que por poco y me hacen flaquear.
-¿Lo golpeaste duro?
-¡Ethan!
-¿Qué?, mis hijos me han demostrado ser excelentes cuidando a su hermana.
-Eres el peor. Entonces como tanto te gusta "reprenderlos" compartirás el castigo con ellos.
-¿Qué? Nena, no sea injusta..es decir yo...
-Chs. Nada de peros Ethan Rogers, debes educar bien a tus hijos. Y ustedes jovencitos se encargaran de pedirle disculpas a ese niño, que por cierto ira a la casa a cenar por su mal comportamiento.
-Pero mami.
-¡Amor! No quiero a ningún niño en mi casa y menos sabiendo que beso a mi hija.
-No era una pregunta Ethan, y no quiero peros Aiden y Adam Rogers Smith. ¿Quedo claro?
-Si mami - dicen cabizbajos.
-Ahora denle un beso bolado a Mami y pídanle disculpas a su hermana.
Los veos disculpase con Mia quien los perdona de inmediato y se abrazan felices, entonces mis sobrinos se une a ellos y ríen cayéndose al suelo.
-Estarán bien...están en buenas manos. Disfruten sus días halla.
-Lo hacemos - dice Ethan.
-No quiero detalles - grita Amy.
-Cuídalos mucho vale. El contrato se firmara mañana y en dos días más se hará efectivo.
-Tranquila, ahora despídanse que mañana los llevaremos al zoológica y debemos levantarnos temprano.
Nos despedimos de mis hijos y sobrinos prometiéndoles llevarles todos los dulces de Francia.
-Chao Papis.
-Adiós hermosos, nos vemos el martes.
Desconcertamos la computadora y regreso a ver a mi esposo.
-¿Qué pasa amor?
-No me agrada ese niño.
-Ethan....
-No puedo dejar de ser Celoso con mi hija.
-Amor, Mia es una niña....todavía no se interesa en los hombres.
-¿Y cuándo lo haga?
-Cuando sea el momento nos encargaremos que ella elija al adecuado.
-Pero amor...
-Nada de peros esposito mío, deja de ser un celosin con tu hija. Mira que mis bebes se empiezan a preocupar - le señalo a mi vientre, el cual se mueve como loco.
-De acuerdo, trataré de no serlo - dice mientras acaricia mi vientre. - Ahora bien señora Rogers..necesito una noche a su lado.
-¿A si? - sonrió picara.
-Si - dice colocando sus manos en mi cintura. -Tú eres todo para mi Lia, cada día que pasa solo puedo pensar en lo feliz que me haces. Crías a unos hijos con los mejores valores del mundo, los amas, las cuidas...y a mí, a mí me haces querer ser mejor cada día. Te amo esposita mía.
-Esposo - hablo como niña para besarlo.
-Me encanta como me consientes. Me gusta que me mimes día a día. Dicen que con los hijos cambian las cosas, pero me he dado cuento que no es cierto....tú me lo demuestras cada día.
-¿Cómo no voy a amarte?...si eres mi vida.
-¿Toda tu vida?
-Mi vida entera...mis sueños, mis metas, mi cuerpo. Todo.
-¿Quiero prometerte algo?
-Qué cosa mi amor - menciono abrazándolo a mí.
-Que, siempre que algo se interponga me atreveré a amarte. Sin importar las barreras, los miedos, el futuro, ni nada.
-¿Lo harías? ¿Te atreverías a amarme después de todo?
-Siempre nena, amarte me hace ser mejor.
-¿Lo harás?
-Lo haré nena...hoy y siempre - dice antes de besar mi boca y encargarse de que la noche junto a París sea otro de los testigos de nuestro amor.