FORMULA HEART || Charles Lecl...

By Andromeda1655

1.4M 89.6K 27K

Alice Agnelli es obligada a trabajar para Ferrari luego de que su padre se hartara de su estilo de vida fiest... More

Duditas👀
Notas🏎
Prólogo (0)🏎
Welcome back🏎 (1)
Ferrari princess🏎 (2)
Are you really? (3)🏎
1/22 (4)🏎
The debut (5)🏎
Getting closer (6) 🏎
Boat day (7)🏎
Confesiones (8)🏎
Picture day (9)🏎
Come home with me (10) 🏎
What did you say? (11)🏎
Its over (12) 🏎
After party (13)🏎
Charles's POV (13.5)🏎
Sainz's House (14)🏎
Alice's birthday (15) 🏎
Mónaco (16)🏎🔥
How could you? (17)🏎
Visitas inesperadas (18)🏎
Look what you made me do (19)🏎
Max's POV (19.5)🏎
Cardigan (20) 🏎
Trapped (21)🏎️
Hola...
Mad Max (22)🏎
True colors (23)🏎
The next morning (24.5)🏎
Snap out of it (25)🏎
México (26) 🏎
Private jet (27)🏎
In love? (28)🏎
Verdad o reto (29)🏎
Heaven (29.5)🏎
The great war (30)🏎
Calm night (30.5)🏎
Home (31) 🏎
Matilda (31.5)🏎
Panic attack (32)🏎
Lover (33)🏎
Until I Found You (33.5)🏎
New territory (34)🏎
Winter Break (35)🏎
Christmas (36)🏎
Monaco's redemption🏎 (37)
Under the stars🏎🔥(37.5)
xoxo, gossip girl🏎 (38)
Dress (39)🏎
It is what it is (40)🏎
Elevators and hotel rooms (41)🏎
Flashback (42)🏎
Old lovers (43)🏎
Let it happen (44)🏎
Change (45)🏎
You're losing me (46)🏎
Watercolor eyes (47)🏎
Chili (47.5)🏎
Daddy's home (48)🏎
Memories (48.5)🏎
The bet (49)🏎
The story (49.5)🏎
Kiss, kiss (50)🏎
Daylight (51)🏎
POV (52)🏎
Inevitable (52.5)🏎
The dinner (53)🏎
Snow on the beach (54)🏎
Love, fun, etc.🏎 (55)
Details (55.5)🏎
Champagne Problems (56)🏎
Her turn (56.5)🏎
New York (57)🏎
Sorpresa (58)🏎️
Mirrorball (58.5)🏎
The man (59)🏎
3 steps back (60)🏎
Anti-hero (61)🏎
Monza (62)🏎
right where you left me (63)🏎
Shame (64)🏎️
the phone call (65)🏎
Afterglow (66)🏎
Jealousy (22.5)🏎
Leclerc, Sainz, Agnelli (67)🏎
Unsafe (68)🏎
Daño colateral (69)🏎
Ferrari Gala (69.5)🏎
Disfraces (70)🏎
Unlucky (70.5)🏎
Las Vegas (71)🏎
Nuevas perspectivas (72)🏎
Pasta (73)🏎
Problemas (74)🏎
Chats (74.5)🏎
Verdades (75)🏎
Invisible string (76)🏎
Love at first speed (77)🏎
Last christmas (77.5)🏎
The one - pt.1 (78)🏎
The one - pt. 2 (79)🏎
Una buena vida (80)🏎
Daddy (80.5) 🏎
Endings, begginings - (Epílogo)🏎
AGRADECIMIENTOS 💌 ( ∞)
Canon - Formula Heart 🎀
Long live [Extra]🏎

Getaway car (24)🏎

16.9K 1K 1.1K
By Andromeda1655

Tengan a la mano Getaway Car - Taylor Swift.

No, nothing good starts in a getaway car...


Miércoles. Melbourne.

No le compré un regalo a Max. Nos hemos acercado un poco más estas últimas semanas, pero aun estando en el centro comercial lleno de tiendas, no tengo idea de qué darle. ¿Qué le regalas a alguien que ya lo tiene todo, o que puede comprarse perfectamente lo que le falta?

Christian le había comprado dos pasteles de su cafetería favorita, y había montado las mesas en el garage de Red Bull con globos y decoración de autos de carreras.

-Alice, ¿traes tu cámara?

-Siempre.

-Bien, ¿puedes encargarte de las fotos cuando Max llegue?

-Claro que sí.

Me gusta que lo vea como a un hijo, creo que Max se lo merece tomando en cuenta el tipo de crianza que tuvo por parte de Jos.

-Ya casi llega! Lo están felicitando Charles y Carlos, escóndanse!

Me quedé parada junto a uno de los enfriadores para poder captar su reacción genuina cuando llegara.

-¿Por qué está todo tan oscuro?- preguntó sacando un Red Bull del refrigerador.

-¡Sorpresa!

El neerlandés se mostró sorprendido cuando vio a todos salir de sus escondites con globos y regalos para él. Sonrió de oreja a oreja cuando me acerqué a él todavía con la cámara en mis manos.

-Feliz cumpleaños, Mad Max.- lo abracé.

-Gracias, Alice. Significa mucho.- se separó luego de un rato.- ¿Qué me vas a dar de regalo?

Okay, qué directo.

-Soy tu ingeniera todos los días, ese es tu regalo.- bromeé.

-Por favor, ambos sabemos que hago tu trabajo mil veces más fácil de lo que debería.

-¿Sí? ¿Por qué dices eso?

-Porque soy Max Verstappen.

Reí.

-¿Qué quieres?

-Una cena.- dijo de inmediato, sin pensarlo.

-Una cena.- repetí.- Comemos juntos todo el tiempo.

-No solos.

Oh, ya veo.

Oculté mi sonrisa mirando al suelo.

-Podrás haber ganado el campeonato, pero no tienes tanta suerte...

-¿Me vas a decir que no? ¿A mí? ¿En mi cumpleaños? Auch.

Reí.

-Bien, pero tú pagas.

-Me parece bien. Podemos ir antes de la fiesta sorpresa que los pilotos me están organizando.

Me quedé paralizada.

-¿Cómo sabes que...?

-Son demasiado obvios, Alice. Lando suelta una carcajada cada vez que me acerco para cubrir los murmullos, y George guarda su celular cada que llego con él.

-Sí, son terribles guardando secretos, pero puedes fingir sorpresa cuando te lleve al club. ¿Puedo llevar mi cámara a la cena?

-Me ofendería que no lo hicieras.- sonrió- ¿Paso por ti?

-Sip, te veo en la noche.

¿Es una... cita? No, no. ¿O sí?

Sea como fuera, no me siento nerviosa, no como cuando tuve mi cita con Charles en Mónaco, al menos. Tal vez ya me relajé más en ese aspecto, o tal vez no estoy nerviosa porque no lo veo como una cita... o tal vez porque ya le tengo mucha más confianza a Max a diferencia de hace un par de meses.

(...)

-Alice, George quiere saber cómo le vamos a hacer para que Max vaya al club en la noche. 

-Ah, no se preocupen por eso, voy a estar con él desde antes, le diré que vayamos ahí después.

Lando frunció el ceño.

-¿Después de qué?

Shit. Shit. Shit.

-Oh, vamos a ir a cenar antes de la fiesta.

Asintió, poco convencido.

-Entonces, vas a salir con él.

-Sí, Lando, para ir a cenar regularmente se tiene que salir, no es como que el restaurante sea en su casa.

-Ja, ja. Tu papá debe estar orgulloso de que además de ingeniera y fotógrafa también seas comediante. Hablo en serio.

-Solo es una cena.

-Ajá, ¿solos?

-Quiero pensar que habrá meseros y chefs, Lando.

Soltó una risita.

-Dices todavía más chistes cuando quieres evitar una conversación.- señaló.

-Yo no lo veo así.- seguí acomodando mis cosas.

-Entonces...- dijo jugando con mi labial sobre la mesa.- Es una cita.

-No es una cita, Lando. Es una cena por su cumpleaños.

-¿Y por qué te pusiste nerviosa?

-No me puse nervios! Deja de interrogarme ya.

-Solo digo que no deberías ponerte así de nerviosa si no se trata de una cita, ¿no crees?

-Eres muy sabio para ser tan joven.

-Okay, ¿sabes qué? Eres 3 meses mayor que yo, supéralo ya.

Reí.

-Como sea, no es una cita. Solía salir con Carlos, Charles y contigo todo el tiempo.

-Sí, pero Carlos y yo no contamos en aspecto romántico...- masculló por lo bajo.

-¿Qué dijiste?

-Que deberíamos preparar bebidas especiales en el club, soy bar tender especializado en alcoholizar personas.

-Estoy ansiosa, Norris.

(...)

Comiencen a escuchar la canción aquí :)

Max pasó por mí y nos llevó a un restaurante italiano. Todo está adornado con luces y guirnaldas y traté de pasar por alto que es un ambiente más bien romántico. Hay una mesa a su nombre, pero no me refiero a que llamó para reservar. No, el tipo realmente compró una mesa que estará siempre a su disposición y servicio para cuando venga a comer aquí.

-Es mi restaurante favorito.- se encogió de hombros al verme tan sorprendida por lo que acababa de contarme.

La mesa está en un segundo piso privado lo suficientemente grande para solo abarcar nuestra mesa. Sí que valora su privacidad como para haber seleccionado justamente esta.

-Entonces, Alice, ¿qué cuentas?

-No mucho, entusiasmada por Melbourne en un par de días, ¿y tú? ¿Feliz en tu cumpleaños?

-Muy feliz. Me gusta salir a clubes con los chicos y contigo. ¿No te has cansado de nosotros?

-Jamás podría cansarme de ustedes, pero mentiría si dijera que no quisiera tener una amiga.

-Tienes 20, ¿de qué me hablas?

-Sí, 20 chicos, que no saben la diferencia entre los diferentes tipos de color rosa, no pueden ayudarme a escoger mi atuendo y me rocían de champaña en cada oportunidad que tienen.

Soltó una risita.

-Pero tienes a 20 chicos que harían todo por ti, ¿alguna vez has tenido amigos así?

-Touché.

Pasamos un buen rato platicando de cómo fue que Red Bull le dio su primera oportunidad, y no la ha desaprovechado desde entonces, y de todas las veces que solíamos jugar cuando éramos niños.

-Okay, necesito saber la verdad... acerca del "nothing, is just unfair" y el "nothing, just an incident" entre tú y Charles. ¿Quién fue el responsable por eso?

Soltó una carcajada.

-La verdad es que fue mi culpa, no estaba teniendo un buen día y solo pude desquitarme con él... pero el nothing, just and inchident es de las mejores cosas que me han pasado en la F1.- rió.

-Eran tan pequeños.- me uní a su ataque de risa.

-Y estúpidos...

Para cuando dejamos de reír estábamos bastante cerca uno del otro. Y fue uno de esos momentos en los que sabes que un beso es lo que sigue.

A lo mejor no porque lo sientes así, sino más bien porque lo sabes.

Los labios se Max se encuentran con los míos y me besa con ternura cuando se da cuenta de que no me retiro.

No me desagrada, pero siento que estoy besando a alguien en algún club, un extraño del que no conozco más que su nombre. Y sé que no debería sentirse así, porque he convivido con él durante meses, porque es mi amigo, pero simplemente no siento esa conexión que sé, tendría que sentir, y me odio a mí misma porque creí que sentiría lo mismo que con Charles... pero no estuvo ni cerca, y sé también que eso no es culpa de nadie, ni de Max ni mía, ni siquiera de Charles.

Simplemente no estaba destinado a ser.

Aún después de lo que pasó, sigo sin permitirme avanzar porque tengo la sensación de que es cuestión de tiempo hasta que pase algo más con él, porque sé, a pesar de todo, que dejamos las cosas inconclusas.

No es incómodo, es de hecho todo lo contrario, pero fue como si tuviéramos que darnos ese beso para darnos cuenta de que no iba a funcionar, jamás iba a funcionar. Como probar una comida para darte cuenta que no te gusta.

Lo bueno de todo esto es que ya sabemos lo que somos y seremos siempre: amigos. Y que bueno, porque vivir con ese tipo de dudas es de lo más complicado que puede pasar una persona. Vivir con la expectativa de saber si les gustas a la otra persona, de si te gusta a ti, si algo más pudiera llegar a pasar... todo eso.

Y me hizo darme cuenta de muchas cosas respecto a Charles. Tal vez nunca fue mi mejor amigo de verdad, porque jamás me incomodó que me besara, ni una sola vez. ¿Cuál es la diferencia entonces?

Había aprendido a querer a Max, sé cómo tratarlo, y sé leerlo, pero también sé que esto, cualquier cosa más allá de la amistad que pudiera pasar entre nosotros, no tendría futuro.

Y sé que él lo sabe también.

Ambos teníamos la misma expresión en nuestros rostros cuando nos separamos, y me alivió sobremanera darme cuenta de que no había sido unilateral.

-Eso fue...

-Raro.- complementó.

-Sí...

Soltó una risita nerviosa.

-Desde que llegaste a la Fórmula 1 había querido que me notaras, Alice, ser tu amigo otra vez, y creo que confundí sentimientos románticos con una de las amistades más sinceras que tengo aquí.

-Me pasa lo mismo. Creo que ambos necesitábamos un amigo desesperadamente porque estábamos pasando por cosas similares; yo con Charles y tú con Kelly, y siento que nos dejamos llevar, mezclamos las cosas, confundimos todo.

-Justamente! Y no quiero perder esto contigo, Ali, porque siento que somos demasiado similares como para dejar que se desperdicie. Antes de volver a conocerte jamás había tenido un amigo que pudiera entender mi sentido del humor, o que viera el mundo de la misma forma que lo hago yo, porque siento que mientras la mayoría ve las cosas en blancos y negros, tú y yo podemos encontrar un balance en el medio.

-Eres mi amigo Anti- héroe.- reí.

-Igualmente, Alice. Y creo que somos mucho más amigos ahora después de esto.- asentí con una sonrisa.- ¿Qué te parece si, a medianoche, olvidamos que esto pasó, y simplemente seguimos siendo amigos?

-Me agrada la idea, Maxie.

(...)

A estas alturas creo que Charles ya debió haberse acostumbrado a verme llegar con los Red Bull, más en específico, con Max.

Los saludamos a todos al llegar al privado que Russell había apartado. Sé que dije que no quería que quería mantener las cosas privadas y profesionales con Charles, pero creo que es bastante obvio para todos que no nos estamos hablando. Lo sé por la forma en que todos se callan cuando lo saludo, como si quisieran escuchar la nula interacción que intercambiamos.

-Alicia, ¿vas a tomar hoy?

-Carlos, no tienes que preguntarme eso cada vez que salimos, puedo cuidarme sola.

-No, no puedes, porque la última vez que lo hiciste, saliste sola a un club en Inglaterra a las 2 de la mañana.

-Okay, papá, si necesitas saber, no pienso beber demasiado. No soy fan de la resaca.

-Bien, es bueno saberlo. ¿Cómo estás?

-Muy bien, Chili, divirtiéndome. ¿Y tú?

-También.- alzó su vaso.- ¿Mi papá te invitó a la cena de navidad en mi casa?

-Lo hizo.- asentí.

-¿Y bien? ¿Vas a ir?

-De hecho, sí. A mi papá le encantó la idea de revivir viejos tiempos y todo eso. Desde que me fui de Ferrari aprovecha cada mínima oportunidad de pasar tiempo conmigo.

-Lo dices como si fuera algo malo, ¿te molesta?

-No, para nada. Pero hubiera sido bueno que se le ocurriera eso en otro momento de mi vida...

-¿Qué quieres decir?

-Nada.- negué.

-¿Del 1-10 cuánto te molesta no estar usando rojo hoy?

-Justamente hoy no me importa, solo uso rojo en los clubs cuando quiero llamar la atención de alguien.- le di un trago a mi bebida.

-Entiendo, entiendo, y hoy no necesitas hacer eso porque ya tienes toda la atención de Charles...

-¡Carlos!

-Iré por otro trago, ¿quieres uno?

-¿Cuántos llevas?

-Uno no es ninguno, Alicia, ahora vuelvo.- sonrió.

Algo me dice que va a ser una larga noche.

(...)

-Alice, ¿lista?- Lando llegó a mi encuentro.

-Ah, ¿dijiste en serio lo de hace rato?

-Ya le di 100 dólares al bar tender para que nos deje pasar detrás de la barra. ¿Vienes?

-¿Qué clase de persona paga 100 dólares para hacer eso?

-Un piloto de Fórmula 1, país de las maravillas. Ahora ven.- me tomó de la mano y me guió a la barra.

Pasamos un buen rato sirviendo y mezclando bebidas para todos, Chili fue nuestro cliente frecuente, y un par de chicos aprovecharon para tomarse fotos con Lando y conmigo.

A decir verdad, en Nueva York era muy común que la gente me detuviera a pedirme fotos, y agradecí que en Italia esto no fuera tan frecuente, tal vez por el hecho de que todos se muestran más concentrados en los 20 pilotos con los que regularmente estoy.

-Alice, eres mi Nepo baby favorita!.- me dijo una chica del otro lado de la barra.

Reí ante su comentario. Charlotte me lo había dicho el día del bote, que soy "la Paris Hilton del mundo del automovilismo", y supongo que es cierto, comencé a hacerme conocida luego de un reportaje que Vogue hizo sobre mí, pero mis seguidores fueron en aumento al ver los lugares que frecuentaba, las comidas a las que iba y la gente con la que me relacionaba. Es decir, salí con Timothée Chalamet algunas veces, por el amor de Dios. Influencer es el término correcto. Pero todo eso no fue nada a comparación de lo que hizo comenzar a trabajar para la F1, para Ferrari y Red Bull. Dupliqué en menos de 6 meses mis seguidores en su totalidad.

Ahora al buscar mi nombre en twitter no aparecen mis fotos saliendo de algún club a las 5 am, o envuelta en algún escándalo, sino que aparece mi rueda de prensa para irme de Ferrari, fotos mías concentrada en el garage, o el reportaje que me hicieron antes de cambiarme a Red Bull, entrevistándome acerca de mi carrera y mi nuevo mundo.

A decir verdad, me gusta ser conocida por esto. Ya no soy la hija de Arnold Agnelli, o la heredera de Ferrari envuelta en un choque a las 3 am. Ahora soy Alice Agnelli, ingeniera. Y me gusta.

Si ese no es el mayor plot twist de mi vida, no sé qué puede serlo.

Después de un rato, Lando regresó al VIP y yo me quedé sentada esperando por mi trago nuevo.

-¡Hola!- una chica rubia, mas o menos de mi edad, se me acercó mientras estaba en la barra del bar.

-Hola.- sonreí.

O necesito más alcohol para socializar, o me había acostumbrado demasiado a convivir solamente con chicos, porque mis habilidades sociales están algo oxidadas en este momento.

-Uh, soy Alice.

-Katy, mucho gusto. Oye, perdón que suene atrevida pero, ¿viniste con esos chicos, verdad?.- dijo señalando al privado que Russell había conseguido.

Y creo que ahí va otra oportunidad de tener una amiga.

-Oh, sí. Son mis amigos.

Me pregunto por quién va a preguntarme esta vez: ¿Lewis, Carlos, Lando...?

-¿Todos? ¿Incluso Leclerc?

Una oleada de celos me recorrió por completo. Jamás, jamás en mi vida había estado celosa de nadie más que de dos personas: Charlotte Sine y esta chica. ¿Qué tienen en común? A Charles Leclerc.

-S-sí.

-¿Está soltero?

No, no lo está, tiene novia, lo siento.

Es lo que debí haber dicho... o al menos algo parecido. ¿Pero por qué debería decirle eso?

-Sí, no tiene novia.

-Genial! ¿Crees que haya problema si me acerco y lo invito a salir directamente?

No sé qué decir. ¿Realmente qué puedo decir? ¿No vayas porque eso me pondría todavía más celosa de un chico que ni siquiera es mi novio?

-La verdad es que solo lo sabrás si lo intentas.

¿Qué clase de puta respuesta pendeja es esa? Detesto lo débil que me vuelvo respecto a Charles.

Vi que Katy caminó entre la multitud hasta llegar al VIP, no sin antes acomodar su escote y subir su vestido para revelar todavía más sus largas piernas. Oh, así que va en serio. Bien, seguridad no va a dejarla entrar de todas formas, entonces tendrá que darse media vuelta y... No, Lando, ¿qué estás haciendo? ¿Por qué la dejas pasar? Joder.

No pierde el tiempo en acercarse a él. Charles está sentado junto a Carlos, haciendo competencia de shots, cuando Katy llega a su encuentro. Se muestra confundido al principio, luego ella se inclina y le dice algo al oído.

Hola, Charles, me gustas! ¿Quieres irte de aquí?

Bueno, eso es lo que imagino que le está diciendo.

Pero luego él niega con la cabeza, confundido. Lo siguiente que veo es que ella me busca con la mirada y me señala cuando me encuentra.

Oh no. Puta madre. Puta madre. Puta madre.

Sea lo que sea que le haya dicho, no puede ser bueno.

Fingí ignorar lo que claramente vi, y me quedé en la barra por un par de minutos, bebiendo de mi trago ridículamente lento.

-¿Por qué hiciste eso?- la voz molesta y confundida de Charles me hace voltear a verlo llegar a la barra junto conmigo.

-¿Qué cosa? ¿Pedirme un trago?

-Alice, he sido paciente contigo desde lo que pasó, y te he dado tu espacio porque dices que no confías en mí todavía. Estoy dispuesto a lo que sea para recuperarte, a ti y a tu confianza, está bien, puedo soportarlo, pero enviar a una chica conmigo como una prueba me parece demasiado, ¿qué querías probar? ¿Mi lealtad hacia ti?

-¿Qué? Charles...

-Porque la tienes, siempre la has tenido.

Agh, este hombre es mi ruina.

-Okay, Charles, gracias por haber venido conmigo primero esta vez en lugar de acusarme de algo ridículo, lo agradezco de verdad, estás mejorando.

Se cruzó de brazos. Dios mío, se ve guapísimo usando esa camisa blanca arriscada hasta los codos, con los primeros 2 botones abiertos, su cabello desarrreglado. 

-Pero no hice eso, simplemente se acercó a preguntarme si estás soltero.

-¿Por qué?

-Porque le gustaste.

-¿Por qué le dijiste que sí, cuando ambos sabemos que no lo estoy?- preguntó irritado, como si yo supiera de antemano la respuesta a esa pregunta y me lo estuviera repitiendo por millonésima vez.

Eso último fue una de esas frases en las que crees haber entendido perfectamente lo que la otra persona quiso decir, pero temes preguntarlo directamente por temor a haberlo entendido mal. Completamente mal.

Por un lado la ya tan característica descarga eléctrica Charles se hizo presente en mí, borrando todo tipo de pensamiento racional en mi cerebro. Pero por otro solo pude pensar ¿quién es esa chica? ¿Tiene a alguien más? No, no "tiene a alguien más", solo tiene a alguien, yo lo alejé hace mucho tiempo.

-Lo siento, no sabía que tenías novia. No volverá a pasar.

-No juegues conmigo, Alice.

-Charles, estoy confundida, no sé de qué estamos hablando.- traté de sonar relajada antes de darle un trago a mi bebida, pero joder, me estoy muriendo de nervios.

-¿No tienes idea de por qué estamos teniendo esta conversación?- se acercó más a mí.

-Te lo juro que no.

-¿Entonces por qué estás temblando?- su mano rozando mi mejilla.

Basta ya con esto por favor, no pido más. ¿Qué pasó con el Charles sumiso, tierno y tímido que hasta hace un par de días no podía ni cruzar media palabra conmigo?

-Hace frío.- mentí.

¿En serio, Alice? ¿Frío?

-Sí, okay.- carraspeó.

-Charles, basta ya, ¿Por qué me dices todo esto?

-Porque eres mía, mon amour... yo soy tuyo, siempre.- colocó una tira de cabello detrás de mi oreja.- Pensé que lo sabías.

¿Por qué tiene que decir siempre las cosas así de profundas y personales? De verdad, ¿cómo lo hace?

-Char...

-En un sentido romántico, consensuado y no creepy, por supuesto.- soltó una de sus tiernas risas en las que parece estarse ahogando. , y no pude evitar sonreír. -Entonces adelante, sigue mandando a todas las chicas que quieras y sigue fingiendo que nada pasa entre nosotros, yo estoy feliz de jugar también, siempre y cuando sepas que este periodo de pausa es temporal, princesa- me dedicó uno de sus característicos guiños antes de regresar al VIP con el resto de los pilotos.

Princesa. Hasta ahora me había llamado Ace, Mon amour y suya, ¿pero princesa?

Diossssss, ¿por qué hace tanto calor? ¿De dónde salió esa personalidad tan dominante por parte de Charles?

¿Y por qué me siento aún más atraída hacia él después de lo que acaba de pasar?

(...)

Siempre me he enorgullecido de mi carácter fuerte, pero al parecer solo se necesita un Charles Leclerc con personalidad dominante para romper eso.

Regresé al VIP un rato después e hice hasta lo imposible por encontrarme con su mirada, aunque yo sabía que él no me pierde de vista.

-Alice, qué crees.- Max se sentó a mi lado.

-¿Qué pasa?.- traté de esconder el nerviosismo de mi voz por lo recién ocurrido con Charles.

-Kelly me llamó para felicitarme, pero platicamos un rato y quiere verme para hablar!.- dijo emocionado.

-Max, eso es grandioso! Espero que hagan funcionar sus asuntos.

Sonrió.

-Gracias. Ya voy a irme, voy a verme con ella, pero puedo dejarte en el hotel si quieres.

-Oh, uhm...- miré a mi alrededor. Max, a pesar de ser el cumpleañero, sería el primero en irse. La noche aún es joven.- No, gracias, yo me regreso al rato.

-Okay, súper. Nos vemos mañana, te cuento qué pasa.

Así es como deben ser las cosas, con Max y yo siendo muy buenos amigos. Lo que pasó hace rato debía pasar para saber que no era lo que debía. Les pasó a Rachel y Joey, nos pasó a nosotros.

Se despidió de todos, sorprendidos de que el festejado de honor sea el primero en retirarse.

Los shots fueron en aumento, las horas fueron pasando y con ellas, los pilotos.

Quedábamos solo los Ferraris, Checo y yo cuando éste último se acercó conmigo.

-Max me dijo que podrías necesitar que alguien te llevara. Ya voy a regresar al hotel, ¿vienes conmigo?

-Gracias, creo que voy a regresarme con ellos.

Le dedicó una mirada a los chicos de rojo.

Charles graba un video de Carlos bebiendo un shot sin usar las manos, mientras que el español parece más divertido que de costumbre.

-Asegúrate de que sea Leclerc quien conduzca, Carlos no podría ni ponerse de pie sin trastabillar. Y avísame cuando llegues, solo para estar tranquilo.

Reí.

-Sí, no te preocupes. 

Y finalmente, después de casi 3 meses, solo quedamos nosotros tres. Me recorrí en el sillón para quedar al lado de Carlos, quien se apresuró a pedir una nueva ronda de shots.

-Alicia, Charles, yo...- dijo repartiendo las bebidas.- ¿Cuánto ha pasado desde la última vez que estuvimos solo los tres? Ya saben, antes de que ambos se comportaran como niños inmaduros y estúpidos.- bebió otro shot.

Charles y yo intercambiamos miradas de preocupación al ver que Carlos no se está conteniendo en los tragos que está tomando. Uno tras otro, pidiendo el siguiente sin haberse terminado el anterior. Sabemos que lo que sea que está pasando entre nosotros debe ponerse en pausa, una tregua, porque cuidarlo es más importante.

-Uhm, ¿Chili?

-¿Sí, Alicia? Es un nombre curioso, ¿no? Alicia, Alice. Alice. Alice!

-Tal vez debas tomar un descanso, comer algo, beber agua.- sugerí.

-A-lice... Ah! Por eso Charles te dice Ace! Pensé que me había perdido de algo.

-Carlos, voy a traerte agua y vas a tomártela toda, ¿okay?.- Charles se fue en dirección a la barra.

-¿Y qué tal te trata Max, Red Bull, Checo, Horner?

-Todo va de maravilla, Chili. Me sorprende que aun después de tantos tragos sigas recordando sus nombres. ¿Qué te pasa? ¿Peleaste con Isa o algo así?

-Todo está perfecto con Isa. Es más, voy a llamarla!

-No, Carlos, no vas a llamarle a nadie en estas condiciones.- le quité su celular.

Se quedó en silencio un rato, sin dejar de sonreír. Viendo a Carlos como un tipo serio e intimidante, uno pensaría que pasado de copas se vuelve violento y agresivo, cuando en realidad solo se vuelve platicador y gracioso, pero muchas veces sin medir lo que dice. Jamás siendo grosero, pero sí convirtiéndose en experto en incomodar a las personas.

-¿Cuándo vamos a volver a tener una pijamada como la última vez?

Sonreí con nostalgia.

-Pronto, Chili.

-Alicia, ¿puedo contarte un secreto?

Cuando Carlos está ebrio salta de un tema de conversación a otro sin motivo aparente.

-Siempre.

Se acercó a mí para susurrar en mi oído.

-No quería bombones...

Tal vez bebió más de lo que pensé.

-Okay, sé que estás ebrio, pero eso tiene cero sentido.

-Esa noche en mi casa, no quería bombones, solo quería dejarlos solos, a Charles y a ti.

Me le quedé viendo, esperando a que dijera que se trataba de otra de sus bromas, pero no lo hizo.

-¿Por qué hiciste eso?

Se encogió de hombros.

-Alguien tenía que dar el primer paso, y estaba claro que no iba a ser uno de ustedes.

-¿Dar el primer paso para qué, Chili?

-Por dios, están enamorados, todos lo saben menos ustedes.

No sabría describir cómo me hizo sentir que dijera eso. No fue algo negativo, eso es seguro, pero fue raro escucharlo de alguien más después de pasar meses contemplando esa posibilidad en mi cabeza.

-Estás ebrio.

-Pero no lo estaba esa noche.

No pude responder, porque Charles regresó con el agua.

-Te traje una a ti también.- la destapó frente a mí y me la entregó.

Siempre las abre por mí.

-Gracias, Charles.

Asintió como respuesta. No dijimos nada mientras continuábamos mirándonos fijamente. Las luces del club envolviéndonos, la música atormentándonos, recordando lo que acaba de pasar en la barra hace no mucho tiempo.

-¿Están seguros de que no quieren besarse? Yo siento que quieren hacerlo, puedo irme si quieren.- soltó Carlos en medio de nosotros.

Ahí está el Carlos CEO en incomodar gente.

Charles carraspeó antes de sentarse junto a él. Pero sé que no es una buena idea, porque Carlos va a seguir hablando y va a ponernos incómodos a ambos.

-Y Alicia... ¿Quién es tu piloto favorito? ¿Ya puedes respondernos?- preguntó luego de darle un trago a su botella.

-Quien está ebrio eres tú, no yo.

-Deberíamos ir a un karaoke!

-¿Te das cuenta de que estando ebrio hablas el doble?

-Pfff, tú hablas el doble.- se quejó.- ¿Por qué somos los únicos aquí?

-Porque fuiste el único que decidió tomar demasiado hoy, Sainz.- le recordó el monegasco.

-Ah, Lord Perceval! ¿Por qué rechazaste a esa chica que vino hace rato?.- pasó un brazo por sus hombros y lo atrajo hacia él.

-Porque no estaba interesado, Carlos.- le dio unas suaves palmadas en el pecho, separándose lentamente.

-En ella...

-¿Cómo?

-No estabas interesado en ella, pero sí estás interesado en Alice, ¿verdad?

Me arrepiento, debí haberme ido con Checo cuando me lo propuso.

Charles se sonrojó y trató de esconderse detrás de su botella de agua, inútilmente.

-Creo que tal vez ya debemos regresar al hotel.

-Quiero comer algo primero.- se cruzó de brazos.

-Carlos, son las 2 de la mañana, todo está cerrado.

-Pues mi estómago no está cerrado, yo tengo hambre.

-Podemos pedir room service.

-Me gusta como piensas, Alicia, Lord Perceval será muy afortunado de tenerte.- se puso de pie, dejándonos a Charles y a mí demasiado sorprendidos como para reaccionar.- Bueno, vámonos ya!

-Va a ser una larga noche.- soltó el monegasco antes de seguirlo por el pasillo.

(...)

-¿Seguro que puedes con él?- oprimí el botón del ascensor. Menos mal nos estamos quedando todos en el mismo hotel.

-Sí, seguro.

-Que aburridos, ¿qué pasó con ustedes? Solíamos vivir a base de risas. Digan algo!- se soltó del agarre de Charles y se dejó caer en el suelo del elevador.

-Carlos, es tarde.

-No sabía que los chistes tenían horario.- se quejó.- Mucho menos para ti, que bromeas hasta en los peores momentos.

Rodé los ojos. Dios, es como un niño pequeño.

-Vas a tener que quedarte con él para asegurarte de que no haga nada estúpido durante la noche.

Resopló.

-Lo sé.

-Tengo una mejor idea! Quédense los dos.

-Carlos, mañana...

-No hay carrera, no hay entrenamiento, no hay nada, Alicia. Quédate.

Miré a Charles en busca de ayuda, pero ambos sabemos que cuando Carlos toma, dios le ayude a quién no esté de acuerdo con él en algo.

-Yo puedo dormir en el sillón- ofreció Charles.

-Nono, tú deberías dormir en la cama con tu novia, es lo justo. Yo dormiré en el sillón.

Dios, esto no podría ser más incómodo. Puta madre, Carlos.

-Solo voy a quedarme si te callas de una vez.- dije agachándome a su altura.

Hizo la mímica de cerrar sus labios y lanzar la llave.

Charles se encargó de encaminarlo mientras yo abría la puerta de su cuarto. Lo recostó en la cama, pero Carlos no tardó en quitarse la camisa y dirigirse al vestidor.

-Hace mucho calor.

Cerró la puerta, dejándonos solos a ambos en la habitación. Es raro... no incómodo, pero poco convencional la situación en la que nos encontramos, más tomando en cuenta la conversación que tuvimos en el club... y todas las cosas que Carlos ha dicho sobre nosotros a lo largo de la noche.

-Oh, te daré una de sus playeras para que duermas.

-No es necesario, iré a mi cuarto a cambiarme.

Se hizo a un lado para dejarme pasar, pero justo cuando iba a irme, Carlos regresó.

-Nonono, dijiste que ibas a quedarte.- trastabilló en su camino hacia mi dirección.

-Voy a quedarme, solo voy a ir a ponerme mi pijama, ¿sí?

-¿Por qué no usas algo mío?

-Estoy más cómoda con mi propia ropa.

-Apuesto a que si fuera ropa de Charles no tendrías problema...

-Okay, Sainz, ya a dormir.- el monegasco lo jaló del cuello de su camisa y lo llevó de regreso a la cama.

-Pero tengo hambre!

-Carlos, eres peor que un niño pequeño, y eres mayor que ambos!.-

-Hablando de, ¿cómo le van a poner a su primer hijo? Porque me ofendería si no lo llamaran Carlos.

-Shh.- lo silenció Charles.

Ignoré el comentario al levantar el teléfono y marcaba a recepción.- Hola, room service, por favor.

-Señorita, el horario de room service cerró hace un par de horas.

-Es para la habitación 155... ¿Carlos Sainz?

-Oh sí, por supuesto! ¿Qué sería?

A veces olvido el peso de sus nombres y la importancia que tienen en este tipo de lugares, sobretodo en época de carrera.

Cubrí el auricular del teléfono.

-¿Lo mismo de siempre?

Charles asintió como respuesta, batallando con Carlos por el control remoto.

-3 hamburguesas con papas y 3 malteadas; 2 de vainilla y una de chocolate.

-Se las llevaremos cuando estén listas.

-Gracias, bonita noche.- colgué.- ¿Feliz? Ahora, trata de que Charles no te pierda de vista en lo que regreso.

-Sí, Alicia.- se resignó, acostándose en la cama.- Joder, ya sé lo que sientes cada vez que me comporto como la figura paterna de ustedes dos... pero miren! Se invirtieron los papeles.

Salí de su habitación y tomé el ascensor para llegar a mi piso. La verdad no tengo problema con pasearme usando pijama, y dios sabe que ha sido un día largo, lo último que me interesa es que me señalen por lo que estoy usando. Y a decir verdad, no me preocupa tampoco compartir cuarto con ellos, ya habíamos hecho esto cientos de veces, los chicos siempre me dejan una cama para mí sola o poniendo una división de almohadas entre nosotros.

Supongo que el deseo de Chili se hizo realidad, la pijamada que quería sí va a pasar antes de lo que cualquiera de nosotros pensaba, lástima que está demasiado tomado para disfrutarla.

-Justo a tiempo, la comida acaba de llegar.- Charles abrió la puerta. Está usando una de las pijamas de Carlos.

Reprimí una sonrisa.

-Súper.- entré de nuevo a la habitación.-Que bonito te ves, Carlos.- dije al verlo comiendo su hamburguesa en silencio.- Casi no parece que tomaste de más esta noche.

-Tú también eres bonita, Alicia, por eso a Charles le gustas tanto.- se metió un puñado de papas fritas a la boca.

-¡Por dios, Carlos, cállate ya!- se quejó y no pude evitar una sonrisa. No tanto por lo que dijo, sino porque el Carlos que todos conocemos regularmente jamás diría este tipo de cosas, es una persona más bien reservada. 

Se ve más recompuesto, sentado en una de las sillas de la salita bebiendo su malteada de chocolate.

-Pareces un niño regañado.

-Charles me regañó.- lo apuntó.

-Le llamaste a Isa para hacerle saber que tienes novia luego de que te mandara un mensaje de buenas noches!.- explicó el monegasco.

Reí, y justo en ese momento, Charles recibió una llamada.

-¿Quién es a esta hora? ¿Puedes contestar?.- me pidió.

-Es Isa...

-¡Mi novia se llama Isa también!- soltó Carlos, orgulloso de su descubrimiento.

-¿Hola?

-H-hola, Alice... lo siento, creí que le había llamado a Charles.

-Lo hiciste, uhm, me pidió que contestara su teléfono.

-¿Ya se hablan? Eso es maravilloso, Alice!

-Algo así... ¿qué sucede?

-Carlos ya no me contestó en su celular, quiero saber si todo está bien.

-Sí, ya está bien, está cenando.

-¡Una hamburguesa, mi amor!- gritó desde el fondo.

-Ya lo escucho.- la sentí sonreír al otro lado de la línea.- ¿Estará bien?

-No te preocupes por eso, Charles y yo vamos a quedarnos con él toda la noche para que no haga nada estúpido.

Suspiró.

-Genial, gracias, Alice. Lo agradezco mucho. Y... también bien por ustedes, no sabes cuántas veces le dije a Carlos lo asombroso que sería tener citas dobles con ustedes.

Creo que jamás lo había pensado.

-Sí... oye, te dejo, pero no te preocupes, Carlos está en buenas manos.

-Yo sé que sí. Dile que lo amo y que le llamo mañana.

-Lo haré, buenas noches.- colgué.

Dejé su celular de regreso en la mesita.

-Isa dice que te ama y que te llamará mañana.

-Aww me ama... al igual que ustedes pero no quieren admitirlo en voz alta, ¿verdad?

-Por dios, Chili. ¿Ya vas a decirnos por qué decidiste tomar tanto?

Me miró divertido... y sé que no será nada bueno.

-Por la misma razón de los bombones, Alicia...

Hijo de perra, maldito Carlos inteligente. Sabía que no iba a dejarlo solo y estaba perfectamente consciente de que Charles iba a cuidarlo. Es brillante. Carlos Sainz, el verdadero Mastermind.

-¿Bombones? ¿Qué quiere decir?

-Nada, olvídalo.

Asintió poco convencido, entregándome mi plato. A diferencia de las otras veces en las que solíamos hacer esto, estamos sentados en silencio viendo la película. Yo sentada en la cama y Charles y Carlos en la mesita, bebiendo sus malteadas. Regularmente nos burlábamos de los actores, o de situaciones románticas ridículas.

Pero esta noche vimos Cars en silencio.

Pero tomando en cuenta las circunstancias, todo esto no me resulta incómodo, de hecho, se siente como los viejos tiempos.

Pero eventualmente la comida se terminó y la película se acabó. Y los 3 sabíamos que era hora de irnos a dormir.

-Alicia, ¿quieres que te deje la cama?

-No, está bien, no pasa nada.

-¿Segura? Puedo dormir en el sillón, o en el suelo, de verdad.

Sonreí conmovida. Aún estando ebrio, e incomodándonos a ambos como nunca en nuestras vidas, se preocupa por esto.

-No me incomoda, Chili. No te preocupes.

Asintió, metiéndose bajo las sábanas.

-¿Quieres igual que siempre?- Charles abrió el armario y sacó un par de almohadas adicionales.

-¿Qué?

-La cama... te gusta del lado de la ventana, dos almohadas, una para abrazar, otra para dormir, una pared divisoria y aire acondicionado encendido en el 20, ¿es correcto?

Recuerda que no sé abrir botellas de agua, recuerda cómo me gusta dormir con lujo de detalle, sabe que me gusta dormir del lado de la ventana para poder tomar fotos del amanecer, que necesito usar suéter siempre aunque ame el frio...

-Es correcto, gracias.

Sonrió, entregándome mi almohada para abrazar.

-Aww, ¿recordaste todo eso por ella? Joder, vas a ser el mejor novio para Alice cuando vuelvan a estar juntos.- Carlos está envuelto como un taco sobre la cama, pero viéndonos con ternura.

Sí, lo será.

Tal vez ya sea momento para hablar en serio con él.

Eché la cabeza hacia atrás para evitar mirarlo, sé que me sonrojaría demasiado de hacerlo. Me voy a vengar en grande con Carlos en la primera oportunidad que tenga.

-Carlos, ya has dicho suficiente por hoy, duérmete, ¿sí? Y si necesitas algo a mitad de la noche despiértame a mí, ¿entendiste?- dijo poniendo una botella de agua en la mesita de noche junto al español.

-¿Por qué no a Alicia?

-Porque ya has molestado mucho a "Alicia" por hoy.

Suena raro escucharlo decir mi nombre en español, pero lindo, supongo.

-Buenas noches, Ferraris.- dije antes de meterme entre las mantas que Charles había preparado previamente para mí.

-Buenas noches, Ace.- se animó a decir.

Bien, buen avance, no me había llamado así desde la plática/ pelea que habíamos tenido en mi casa.

-Buenas noches, Alicia, feliz cumpleaños.

-Puta madre, Carlos.- escuché a Charles reírse por lo bajo.

-Fue el cumpleaños de Max, Chili. ¿Recuerdas?

No respondió de inmediato.

-Joder, bebí demasiado.

------------------------------------

-Andrómeda🏎

Okay, siento que tengo que explicar muchas cosas, vamos por partes:

Desde que nació la idea para Formula Heart yo sabía que debía meter a Max entre Charles y Alice aunque sea de forma indirecta (por su rivalidad en la pista en la vida real y todo eso, porque a pesar de todo, AMAMOS Lestappen). Y a decir verdad me gustó este desenlace para Max y Ali, porque siento que son almas gemelas, y las almas gemelas pueden encontrarse en cualquier persona más allá de un romance, espero que les haya gustado cómo lo plasmé. Ninguno de los dos salió herido, al contrario, creo que ambos necesitaban eso para saber que por ahí no iba su relación, pero siempre serán amigos Anti- héroes.

Ahora ya un tema más romántico... Charles diciéndole a Alice que es suyo??? AMAMOS. Toda esa conversación en el club la escribí una madrugada que no podía dormir y me encantó, la verdad. Y aparte Mon amour recordando cómo le gusta dormir a la futura Lady Leclerc? Necesito a un Charles en mi vida.

Finalmente... dios bendiga a Carlos ebrio soltando nada mas que verdades😼  Nuestro Chili se hartó de verlos separados y dijo: alv hoy hablan porque hablan.

¿Les gustaría un mini capítulo de lo que pasa al día siguiente?

Y por cierto, el capítulo 25? Van a GRITARRRRR.

¿Qué les pareció el capítulo? ¿Creen que Alice esté cerca de perdonarlo? Quiero leerlo todo

Recuerden votar y gracias por leer❤️

Continue Reading

You'll Also Like

78.7K 4.2K 38
Jules y Charles son prácticamente polos opuestos, aunque vivan de lo mismo. Las carreras Ella compite en la fórmula 2, mientras él es uno de los pilo...
29.9K 1.9K 5
JungKook: Sus lágrimas caían ¡¿Qué quieres Min Yoongi?! ¿Hacerme sufrir? ¡Pues mira! ¡Lo lograste! Yoongi: JungKook por favor... Perdón... Perdón Ju...
59.7M 1.4M 17
Sinopsis Kaethennis ha disfrutado de los placeres de la vida, mucho, casi se puede decir que demasiado. Un alma libre, al menos así se definiría el...
400K 26.1K 28
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca. -¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen. -Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a e...