Returning.

«Capítulo 26: viernes.»

Siete de la mañana. Ducha. Ropa. Desayuno. Pelo. Cara. Libros. Bus. La misma rutina de siempre...pero hoy es viernes y eso hace que hoy sea un día más positivo.

Como todos los días, soy la última en irse de casa por la mañana. Bajo las escaleras, cierro la puerta con llave y me doy la vuelta para ir a por el bus. Sí, me esperaba ver a Beth ahí, en frente mía en cuanto me girase, pero sólo estaban un padre y su hijo yendo también a sus respectivos sitios. Suspiro y me pongo los cascos.

En clase me distraigo muchísmo, todo el mundo está más activo, es un buen día, ojalá vaya todo bien. Todo son risas y las horas se me pasan volando.

Cuando nos despedimos y cojo el bus, sólo pienso en clase, en la música, y en el regalo para una amiga que hemos planeado comprarle entre todas las demás. Estoy bastante más distraída y es genial.

Me bajo del bus y miro al frente.

Ahora sí.

Ahí está, hecha una real mierda en la puerta de mi casa. Mirándome.

Pero está, y, sin poder evitarlo, empiezo a llorar mientras corro hacia ella. Me arranco los cascos y meto el móvil en el bolso mientras lo tiro al suelo al lado de la puerta y me quedo observándola.

Nunca la he visto así de mal sin saber los motivos: tiene el pelo mojado, los ojos negros porque se le ha corrido el maquillaje, y tiene la ropa mojada también. La abrazo sin parar de llorar. Sin embargo empieza a reírse y me doy cuenta de que ha bebido, y mucho. Está borracha. Abro la puerta y hago que entre a duras penas. Estoy en shock.

¿Sus padres están preocupados acaso? A algunas personas hay que darles dos tortas para que espabilen.

Pasamos al salón y dejamos todo en un sofá. Me voy a la cocina y traigo una jarra enorme de agua y unas galletas para que coma algo, porque me da a mí que hace mucho que no lo hace.

Sigue riéndose y diciendo cosas sin sentido, y me pone de los nervios, porque parece que le da igual habernos preocupado tanto a sus dos mejores amigos. Estoy furiosa.

-¿Me vas a contar qué coño has hecho estos dos días? He estado fatal por tu culpa y apareces así, no sé cómo no te da vergüenza.- subo el tono de voz ligeramente.

-A ver...ess que tía jajajaja yo necesitaba penssar sabbes, estooy muuuy rayadda por todo y paassaba de seguirr así.- apenas puede vocalizar, obviamente, y no para de balancearse. Le meto una galleta en la boca y la llevo a mi habitación para que duerma. O que al menos se relaje un poco.

-Tía es que no te das cuenta de nada jajajajaja.

-Beth, cállate.

-Nno.

-¡Shhh!

-Shhhh Maddddie jajajajajaja.

-¡Que te calles!- y me tapo la boca. He gritado más de lo que quería. Se queda callada y su expresión es más seria. Al menos ha ayudado a relajarla un poco.

-Madre mía...qué mal humorr.

-Cuéntame de una vez, anda...- odio verla así, y ya está.

-A ver, tía, es que yo necesitaba olvidarme de algunas cosas. Mira, me gusta una persoona Maddie, y no puede ser, está maaaal. Así que me fui a una fiessta de una de mi clase, ¡y me lié ccon un chico guaapo! Porque a la otra persona que me gussta no le gusto Maddie...no está biennn.

-¿Quién es esa persona? ¿Por qué ya no me cuentas cosas? Sabía que me ocultabas algo.

-Ay callaaa. Bueno...entonces me lié con ese, y dessspués me cansé. Y me fui a beber soola, mucho raato. Y he bebbido mucho Maddie jajajajaja. Tieness que hablar con Evvan, tiene que decirte una cossssita.- dice algo ininteligible y se duerme.

Esto no tiene sentido, voy a dejar que se duerma y cuando se despierte y esté 'en condiciones' o al menos consciente, hablaremos mejor de todo...

Mientras llamo a Evan.

-Dime Maddie.

-Evan...está aquí.

-Voy para allá.- cuelga.

A los cinco minutos suena el timbre. Bajo y le abro la puerta. Subimos de nuevo a mi habitación.

Beth sigue dormida, cuando se despierte la que le espera va a ser buena.

-¿Habéis hablado?

-Está muy borracha. Me ha contado que se fue a una fiesta y que no ha parado de beber, para olvidar a una persona que le gusta o algo así, yo no sé quién es, y luego me ha dicho que me tienes que decir una cosa. Y se ha dormido.

-Beth...eres tonta.- dice mirándola con pena.- Bueno, cuando se despierte lo hablamos...estoy flipando la verdad.- Evan también ha palidecido.

Le abrazo.

-¿Qué es lo que me tienes que contar, según Beth, por cierto?

-Pues no sé, la verdad...- noto que se pone nervioso...oh no, más secretitos no...