Tentemos A La Suerte |#1|

Capítulo 34

Estaba entregada a la relajación hasta que algo fuerte me rodeó y me apretó, abrí los ojos alarmada pero antes de hacer un movimiento brusco me invadieron recuerdos de lo sucedido la noche anterior, la preocupación, un beso, una bofetada, una historia triste y una mujer malvada.
Coloqué mi brazo sobre el suyo por un momento acariciándolo.

≤ Pasé la noche con él≥ -pensé con un pequeña sonrisa en mis labios.

Intenté zafarme de él de la manera más delicada posible para no despertarlo, sin embargo, solo conseguí que me apretara más a su pecho. Me giré un poco y vi su cara, tenía el ceño fruncido.

≤¿Le sucederá algo?≥

El agarre de Robert seguía firme al rededor de mi cintura y su ceño se mantenía fruncido, entonces con suma delicadeza levanté una de mis manos y pasé mis dedos con mucho cuidado entre sus cejas dónde se formaba una pequeña arruga, poco a poco fue suavizando su expresión y parpadeando un poco abrió sus ojos.

—¿Uh? ¿Mack...? -preguntó con un tono bajo al principio pero después se incorporó muy rápido y gritó. —¡Mack! -sin cuidado alguno de sus movimientos cayó de la cama.

—¿Siempre eres así de bruto a la hora de levantarte? -dije riendo.

—Muy graciosa -gruñó. — Había olvidado que dormiste aquí -se excusó levantándose.

Yo me coloqué sobre mis rodillas con los brazos cruzados.

—Para haberlo olvidado me abrazabas con mucha fuerza.

Él abrió los ojos con sorpresa y después agachó el rostro. —Lo siento, es que tenía una pesadilla.

—¿Te molestaría contarme? -tomé asiento dando unas palmadas frente a mí invitándolo a hacer lo mismo.

Él se acercó y se sentó con las piernas cruzadas en la zona que le había indicado.

—La pesadilla era sobre Natalie, ella... -frunció el ceño de nuevo y tragó con dificultad - Ella me estaba acosando, a dónde quiera que fuere estaba ahí, incluso secuestró a Denis y cuando fui por él, lo tenía amarrado a una silla, golpeado, entonces, cuando decidí acercarme a él oí un fósforo ser encendido y repentinamente comenzó a arder ante mis ojos mientras gritaba <<Papá, ayúdame>> -cubrió su cara con sus manos para esconder su vulnerabilidad pero de todas formas una lágrima escapó entre estas. -Entonces una voz que parecía surgir de mi cabeza dijo: <<Ahora voy por la persona por la que me reemplazaste>> Supe al instante de quién se trataba, voltee para correr pero ya estaba frente a mí, eras tú.

Mi corazón se aceleró ligeramente, no podía creer lo que había dicho.

—Te abracé con mucha fuerza, pues repentinamente comencé a sentir que trataban de alejarme de ti, tenía miedo, me sentía destrozado, fue cuando me tocaste la cara que pude despertar. -quitó las manos que había dejando cubriendo sus ojos, estos se habían enrojecido un poco.

Conocía muy bien ese tipo de pesadillas, desde niña me acechaban.

—Solo fue un mal sueño Rob, no le prestes atención -me acerqué  y puse una mano sobre su hombro. —Todo está bien, Denis está más que a salvo y yo estoy aquí -sonreí. —Aunque no por voluntad propia, me quedé porque a tí se te ocurrió llegar tardísimo sin siquiera avisar si estabas bien, pero en fin, ¿Quieres que prepare desayuno?

Él soltó una risa negando, aparentemente le divertía mi reproche.

Yo me había cambiado y ahora preparaba el desayuno mientras Robert leía el periódico, todavía era algo temprano y la casa se mantenía en silencio salvo por los ruidos que yo hacía mientras cocinaba. Entonces unos pasos rápidos llegaron a la cocina, ambos dirigimos la mirada a la entrada de esta y ahí estaba Denis, mirando con asombro y algo de molestia a Rob.