3

1.2K 89 16
                                    

CAPÍTULO 3

Proyecto de química.

Olivia.

—Oli, no puedo creer que este año no estemos juntas.—Camila me habló mientras caminábamos a la cafetería.—¿No puedes decirle a tus papás? Quizás el director te permita cambiar de sección.

—No lo creo, además no quiero estresar a mi papás con algo así, fijo el otro si nos tocará juntas.—Le sonreí, Susan asintió en acuerdo con lo que dije.—Además no es tan malo, tengo a Álvaro.—Las chicas rieron, la realidad es que Álvaro no era muy cercano a nosotras, incluso conmigo hablaba un poco más pero era porque yo soy la novia de su mejor amigo.

—¿De qué hablan?—Charlie me sorprendió al abrazarme por los hombres desde atrás.—Fuimos a la dirección, al parecer está totalmente prohibido cambiarse de sección, lo siento Oli.

—Tranquilo, no pasa nada.—En realidad yo no le había pedido que averiguara, obvio me gustaría estar con ellos, pero tampoco se me hacía tan importante, los vería a todos en los recesos.—Voy a la biblioteca, tengo que ir a dejar unos libros que no devolví el año pasado.

—Okay, te esperamos donde siempre.—Camila señaló las puertas de la cafetería y siguió caminando, les di la espalda y me dirigí a la biblioteca.

Amaba estar aquí, había siempre tanto silencio y era tan acogedor, apenas entré saludé a la señora Marta, al pasar los años me hice tan amiga de ella que me dejaba llevar más libros de la cuenta y incluso podía pasar meses con ellos que ella no se molestaba, la señora Marta siempre sería la mejor dando consejos para mi, la quería como si fuera la abuela que nunca tuve.

—¿Qué hiciste en vacaciones cariño? Leíste todos esos libros.—Señaló la bolsa en la que traía los libros que me había prestado, asentí.—Me recuerdas a mi en mi juventud, pasaba todo el tiempo leyendo, recuerdo que a mi papá, que en paz descanse, le molestaba porque decía que no le ponía atención.

—Es que no hay nada mejor que un buen libro.—Me reí, la vi colocarse sus lentes mientras me observaba con una sonrisa mientras asentía.

—Y acompañado de un café, es el mejor complemento.—Ella sacó los libros de la bolsa y los puso en su escritorio.—Luego los acomodo.

—Si quieres yo los acomodó, de todos modos no tengo nada que hacer y desayuné en mi casa así que no tengo que ir a la cafetería.—La señora Marta negó con su cabeza y me pidió que me sentara en la silla que estaba frente a su escritorio.

—Cuéntame, cuéntame que hiciste estos días, ¿Fue el pequeño Marcus en vacaciones?—Sonreí, Marcus ya no era un pequeño, pero para la Señora Marta siempre seríamos unos niños.

—Sí, de hecho leímos uno o dos libros juntos, ¿se acuerda de aquella historia de reyes y reinos? Tenía razón, estuvo increíble.—La señora Marta asintió emocionada, así que seguí hablando hasta que sonó la campana de entrada a clases y me tuve que ir.

()

Charlie: ¿Todo bien? No llegaste a la cafetería.

Olivia: Me quedé en la biblioteca, ya sabes la Señora Marta no me dejó. 😂❤

Charlie: Entiendo, que amable eres, cariño.❤

Guarde mi celular en el bolso y puse atención a la clase, está vez como llegue algo tarde me tocó sentarme en el fondo, al lado de una chica que se me hacía conocida pero no recordaba su nombre, siendo sincera creo que esta era de las clases que menos me gustaban y lastimosamente no tenía a Susan para que me pasara los apuntes después y Álvaro se notaba que ni estaba prestando atención así que obligadamente me tocaba prestar atención.

—Este año dejaré que ustedes elijan sus pareja para el proyecto final que deben presentar cada año en la Feria científica, por favor para no hacer mucho desastre como el año pasado no busquen a su pareja en otra sección y espero que sus proyectos mejoren cada vez más.—El profesor caminaba de un lado a otro mientras hablaba.—Espero que me sorprendas de nuevo Aimé.—El profesor le sonrío a su alumna favorita.—Les doy quince minutos para que se reúnan con su pareja.

Rápidamente el aula se volvió un desastre, estudiantes de allá para acá buscando a su amigo y demás, yo me mantuve en mi asiento, miré a Álvaro, una chica de abundantes rulos se le acercó y con una sonrisa supongo que le preguntó si quería ser su pareja, Álvaro miró hacía atrás nervioso, yo le sonreí mostrándole que no pasaba nada si quería estar con ella, él volvió al frente y asintió a la chica, suspiré, ahora tendría que buscar una pareja, miré hacía mi lado izquierdo, ya todos tenían pareja, la chica que estaba a mi lado antes se había ido, mordí mi labio inferior nerviosa, no quería hacer ese proyecto tan grande yo sola, esperé hasta que todos empezaron a hacer silencio y acomodarse, miré a una chica pequeña con grandes lentes en una esquina del frente, rápidamente me levanté y caminé hacía ella y justo cuando iba llegando, llegó alguien más o mejor dicho, ella, Lina.

—¿Hacemos el trabajo juntas?—La escuché preguntar, la chica de lentes miró detrás de ella, o sea a mi, Lina miró hacía atrás y no supe descifrar su expresión, le di una pequeña sonrisa.—¿Ya tienes pareja?—Lina se volteó y le preguntó a la chica de lentes.

—Eh no.—La chica parecía apunto de llorar de los nervios, supongo que Lina la intimidó, me reí y eso llamó la atención de Lina hacía mi de nuevo.

—¿Tienes pareja, Olivia?—Me preguntó Lina.

—Sí, bueno—Tomé uno de los mechones de mi cabello, cielos, que torpe.—Para el proyecto no, le iba a preguntar a ella.—Señalé a la chica detrás de ella.

—¿Algún problema chicas?—preguntó el profesor acercándose, seguro notó que ya prácticamente todos tenían pareja y nosotras no.

—Sí.—Lina miró alrededor.—Solo quedamos nosotras tres al parecer.

—Pues perfecto, ustedes serán el trío, espero que al ser tres mentes juntas logren hacer un muy buen proyecto.—El hombre palmeó mi hombro y se alejó.

Nothing Like UsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora