Nothing Like Us

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CAPÍTULO 7

¿Banda?

Olivia.

Miro el techo de mi cama, Cam y Susan se durmieron muy pronto después de comer, el brazo de Susan estaba sobre mi abdomen y me estaba generando mucho calor, estaba intentando buscar una manera de mover su brazo sin despertarla, ayer había sido un día muy cansado para ella y merecía descansar, el sonido de un nuevo mensaje me hizo sacar mi celular de debajo de la almohada, revisé WhatsApp. Tenía cuatro mensajes, bueno en realidad tres ya que Lina me había eliminado el mensaje, estuve tentada a preguntar si necesitaba algo, pero preferí ignorarlo y revisé los dos mensajes de un número que no tenía agendado, luego me fijaría en el de mi hermano.

+506 67822457: Hola, soy Samanta, bueno mis amigos me dicen roja, tú me puedes decir así, soy la pelirroja de la clase de italiano.

+506 67822457: Oh cielos, no me fije en la hora, espero sigas dormida.

Rápidamente la agendé como Roja y le contesté.

Olivia: Tranquila, no me despertaste, no logro dormir.

Olivia: Te recuerdo, roja.

Roja: Creí que dormías, como mañana tenemos clase temprano.

Roja: Yo tampoco puedo dormir, pero es culpa de mi hermano, decidió hacer una fiesta entre semana. ¿Puedes creerlo?

Olivia: Que locura. ¿Y tus padres no lo regañan?

Roja: Mamá trabaja doble turno en el hospital, así que no está y papá fue por cigarros hace diez años y no ha regresado.

Roja: JAJAJAJA.

Olivia: Eres muy chistosa, cualquier persona en tu lugar no sería tan bromista con ese tema, me alegra que te lo tomes así.

Roja: Es que casi no lo recuerdo y siempre fui más apegada a mi mamá.

Roja: Entonces, ¿Me ayudarás en italiano?

Olivia: Claro, cuando quieras.

Olivia: Supongo que lo básico para que no estés tan perdida este año y te vaya bien.

Roja: Sí, ¿Qué te parece si este sábado iniciamos?

Olivia: Oh lo siento, este fin tengo que ir a acampar con unos amigos.

Olivia: ¿El otro fin de semana?

Roja: Sí, perfecto.

Le envío un sticker de un gatito feliz y me meto en el chat de mi hermano.

Marcus: Olvidaste lo de la libreta, ¿Aún me puedes hacer el favor?

Olivia: Oh lo siento, lo olvide.

Olivia: ¿Qué haces despierto aún?

Marcus: Trabajos, esta carrera no es nada fácil.

Marcus: Mi amigo puede llegar temprano, en el mismo lugar hoy.

Olivia: Está bien, voy a estar ahí como a las 6:30. ¿Bien?

Marcus: Sí. Descansa Olivia, ya es muy tarde.

De pronto Susan quita su brazo de mi abdomen, me giro para verla y ella está despierta, me sonríe y dice que irá al baño, porque siente como que algo le hizo daño, le digo que quizás comió muchas palomitas, ella ríe y asiente, se levanta y camina al baño, cansada me acomodo mejor, guardo mi celular de nuevo debajo de la almohada y cierro mis ojos.

(...)

Me despierto mucho más antes que mis amigas, les dejo una nota sobre el espejo para que la vean, solo les digo que le haré un favor a mi hermano, que las veré en el instituto, apenas estoy lista, voy a la habitación de mi hermano, busco la libreta y la guardo en mi bolso, llamo un taxi con mi celular y en pocos minutos ya está frente a mi casa, me subo y le digo que me lleve al parque central, seguramente el amigo de Marcus ya está ahí.

—Gracias.—Le agradezco al taxista y me bajo del auto, camino por la acera del parque hasta que llegó a la fuente, hay un chico que me está dando la espalda, tiene unos pantalones negros algo ajustados, una camiseta ancha que le llega casi hasta la mitad de sus muslos y una chaqueta de mezclilla encima, ¿Será él el amigo de mi hermano? me pregunto dudosa, aún así me acerco y toco su hombro para llamar su atención, el chico se voltea con una sonrisa, sus cejas son bastante pobladas, tiene unos lindos ojos cafés y sus labios son finos y lindos.

—Oh, Hola hermosa.—Me saluda.—Ahora estoy esperando a la hermanita de un amigo mío, pero si quieres podríamos tomar un café, te invito.—Su voz suena bastante ronca y se ve algo cansado, lo noto por sus ojos irritados y sus ojeras que aunque no se notan tanto se ven un poco.

—¿Eres el amigo de Marcus?—pregunto, él asiente y me ve algo sorprendido, yo le sonrío y saco la libreta azul de mi hermano para entregarla.

—Marcus no me dijo que me encontraría con semejante belleza.—Me sonrojo.—Muchas gracias, nos salvaste la vida, tu hermano fue tan idiota que al irse no nos la dejo.—Él toma la libreta que le estoy ofreciendo y en el acto hace que nuestras manos se toquen.—¿Quieres tomar un café? Aún estoy dispuesto a invitarte.

—Creo que ya voy tarde a clase, pero la verdad me gustaría resolver unas dudas respecto a mi hermano. ¿Me responderías unas preguntas?—El chico se acerca a la fuente, guarda la libreta en un bolso negro que estaba ahí y luego se lo pone sobre uno de sus hombros.

—¿Crees que soy un chismoso?—Me mira seriamente, su rostro no dura mucho tiempo con esa expresión y ríe.—Pues sí soy. Ven, conozco una cafetería genial y no está nada lejos.

—¿Dónde conociste a mi hermano?—pregunto mientras camino a su lado.

—Hermosa esa es una historia muy larga de contar.—Él se detiene un momento, así que lo imito.—Soy Harold Devi, el baterista de la banda en la que tu hermano está.—Harold se acerca y me da un corto beso en la mejilla.

—¿Banda?—Lo miro extrañada.—Olivia Myers, mucho gusto.—Me presento al igual que él, solo que no le doy el beso en la mejilla.

—Un nombre hermoso para una chica hermosa, me gusta.—Volvemos a retomar nuestra caminata.—Lo conocí en un bar hace como un año.

¿Un bar? ¿Quién rayos es este Marcus? El Marcus que yo conocía jamás iría a un bar, mucho menos sería el miembro de alguna banda, no se juntaría tampoco con un chico como Harold, iría contra sus principios, contra la educación que nos dio nuestros padres, no me detengo, sigo al amigo de mi hermano hasta a esa cafetería, necesito respuestas, toda esta situación es muy extraña.