Capítulo 29: no es una buena elección si no cambia nada.

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Primero que nada: Siento haber publicado tarde, estuve re enferma así de que ni siquiera quería ver mi celular. El capítulo estaba prácticamente listo solo que yo estaba al borde de la muerte jsjsjsj.

Y pues nada. Lo siento. Disfruten el capítulo.
Hoy se dicen cosas del Dominik.

La parte más tediosa era la de tener que contar tu versión de la historia

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La parte más tediosa era la de tener que contar tu versión de la historia. Yo estaba bastante bien por mí mismo solo escuchando lo que los demás tenían para decir, pero yo no tenía la más mínima intención de soltar información que me dejara en evidencia. Aunque de igual manera no es como que tuviera otra opción más que esa.

Bajé de mi habitación, era lo bastante tarde como para que cada pequeño ruido que se hiciera en la noche lo escucharan los vecinos al otro lado de la calle así que intenté no ser muy ruidoso. Me dirigí a la cocina para tomar un vaso con agua y justo cuando estaba por volver a la habitación escuché la puerta de la entrada abrirse. Por ella entró mi madre cargando varias bolsas y se echó en el sofá agotada.

—Hola, cariño —mencionó como saludo para después quitarse los tacones y las medias suspirando—. ¿Cómo te fue hoy en la escuela?

—No fui.

—Dominik... —siseó observándome con los ojos entrecerrados—. Este es el tercer día que faltas a clase. ¿Está todo bien? Nunca me has mentido y no creo que vayas a empezar ahora así que estoy segura de que no te expulsaron de la escuela ni nada por el estilo.

—Solo no quiero ir.

Ella exhaló por la nariz lo suficientemente fuerte como para que yo escuchara que lo había hecho. Sujetó las bolsas que habían quedado a su lado y las bajó al suelo para después palmear el sofá justo a su costado. Me estaba incitando a sentarme a su lado así que le obedecí. Me abrazó con un solo brazo, me hizo poner la cabeza sobre su hombro y después la subió para acariciarme la cabeza como si fuera un niño de cinco años que acababa de tener una pesadilla.

—Sabes que puedes contarme lo que sea... Si no te estás sintiendo bien solo tienes que decirme si puedo hacer algo por ti y haré lo que me sea posible porque vuelvas a sonreír.

—Estoy bien.

—No pareces "estar bien".

—Estuve mirando el periódico —inicié y ella inmediatamente detuvo su mano y la bajó a mi hombro. El ambiente había cambiado en un segundo—. Están buscando una secretaría en...

—Dominik, ya hablamos sobre eso —respondió soltándome y levantándose del asiento. Se estiró levantando los brazos y después se llevó las bolsas a la cocina como si la conversación hubiera terminado.

—No. Nunca "hemos hablado de eso" —reclamé siguiéndola a la cocina—. Siempre dices lo mismo, como si realmente hubiéramos tenido una conversación, pero todo lo que haces es llevarme la contraria. Te estoy dando alternativas.

El club de los rechazados.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora