Esperando

Capítulo 36

POV Eva

—¿Samantha? —Pregunto extrañada a mi amiga —. ¿Qué haces aquí a estas horas?

—Se me olvidó el otro día mi bolsa de maquillaje y venía a buscarla y de paso preguntarte qué tal la cita con le médico. Llego, no hay nadie en casa y os he llamado a las dos, pero no lo habéis cogido así que he estado esperando aquí un rato para ver si aparecíais y me encuentro con este panorama —toma el aire—. Así que bien en el médico, ¿eh Eva? Yo sé detectar una mentira cuando me la dicen ya que soy la experta. ¿Quién es el tío al que has dado un beso en mi cara, el cual no es Rafa?

Mis ojos se humedecen y empiezo a tartamudear cosas sin coherencia alguna. Me siento pequeña ante la mirada inquisitiva de mi amiga.

Al ver que no la contesto, termina de bajar las escaleras del portal, pasa por mi lado velozmente y se dirige al coche.

Yo la sigo rápidamente y veo como se detiene en seco. Miro a través de la ventana del coche y veo a Hugo también con los ojos como platos.

—Hugo... ¿Hugo? —Empieza a decir Samantha sin parar —. ¡Hugo! —Se gira hacia mí y me apunta con él dedo —. Tú. Tú y Hugo.

Ahoga un grito.

—Madre mía —Y se lleva la mano a la boca.

—Te lo puedo explicar —Digo rápidamente. Noto como Hugo sale del coche y viene hacia nuestro lado.

—Te lo podemos explicar —Repone Hugo situándose a mi lado.

Samantha nos mira perpleja.

—Es que lo sabía. Nunca me equivoco en estas cosas y esto lo prueba. Dios.

—No queríamos que pasase —Intento explicarle, antes de que me empiece a echar la bronca —. Pero no lo hemos podido evitar. Hugo me lleva gustando desde hace más tiempo del que quiero admitir y también le ha ocurrido a él. No queremos hacer daño a nadie. Y sí, sé perfectamente que es el mejor amigo de mi novio pero ha pasado.

Sam tarda un momento en contestar.

—Lo sé. Lo he notado desde hace mucho tiempo. Ya estaba preguntándome si estaba loca.

—¿Se nos nota tanto? —Pregunta Hugo.

—A ver, sinceramente a una persona observadora como yo, pues sí. El día de la actuación, sabía perfectamente que no estabais actuando. Esa química, ese beso, por mucho que seas un buen actor, no se consigue eso. Encima, ¿recuerdas el día de la bolera, cuando te pregunté que si vosotros dos teníais algo, Hugo? Aunque me dijeras que no yo sabía que los sentimientos ahí estaban, lo que pasa que ninguno de vosotros estaba dispuesto a admitirlo.

—Espera, espera, espera —Intervengo —. Acabo de enterarme de esto. Entonces Sam, ¿no estás enfadada?

—A ver, estoy molesta de que no me lo hayas contado antes Eva. Ya sabes que yo no te juzgo porque sé que tú nunca querrías hacer daño ni a Rafa ni a nadie, y si has arriesgado ya no tu relación sino tú amistad con Rafa por él, sé que es porque sientes de verdad por él.

Miro abajo y sonrío levemente.

—Sí.

—La verdad os shippeo.

Hugo y yo soltamos una carcajada.

—Pero ahora enserio, tienes que cortar con Rafa cuanto antes.

—Sí, cuando llegue hablaré con él.

—Y lo mismo te digo Hugo, con tu novia.

—Eso ya está resuelto.

Sam asiente con la cabeza.