Will of Fire (Completa)

Capítulo 151: Arderás en el infierno.

Llegamos al clímax de esta ardiente batalla, así que sin más preámbulos veamos en que concluye, no está demás decir, enjoy!

Sasuke había logrado reunirse con Kankuro y los demás, analizaban que hacer ya que al parecer los Tobis habían dejado de salir.

-Lo más probable es que Kakashi haya derrotado a Obito.- analizó Sasuke.

-Así que ese infeliz de la máscara resultó ser Obito Uchiha.- expresó Kankuro.- Eso sí que es una sorpresa.

-¿Qué hacemos ahora?- preguntó Lee.- Si lo que dice Sasuke es cierto, Orochimaru ahora tiene en su poder a Karito y a los demás.

-Tendremos que ir a la bóveda a buscarlos, no hay más opción.- dijo Kankuro finalmente.

-¿Sabes dónde está?- preguntó Neji.

-De que sé donde está, sí lo se, el problema es que no tengo idea cómo llegar a la bóveda una vez dentro de la montaña.

-Tendremos que separarnos y buscar.- expresó Sasuke.- Aunque tengo entendido que hay trampas, no?

-Eso es lo que me preocupa.- dijo Kankuro preocupado.

-Tenemos los comunicadores.- dijo Neji.- Si algo nos pasa durante la búsqueda contactemos al compañero más cercano, pero no podemos seguir perdiendo el tiempo.

Kankuro asintió y rápidamente los guió hacia la bóveda. Sasuke sinceramente estaba preocupado por Kakashi.

"Kakashi, espero que logres salir de esto…"

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Minato lanzó un kunai y lo multiplicó para dirigirlos directo hacia el hombre. Lo peor de todo es que eran explosivos. En el intertanto que los kunais viajaban hacia la posición de Orochimaru, Minato vio con horror como el hombre hacía aquella posición de manos tan familiar para él.

-Hiraishin no jutsu!.- exclamó el hombre mientras desaparecía en el instante en que los kunais se incrustaban en la pared y la hacían explotar. Una grieta enorme se dirigió hacia Minato, quién tuvo que esquivarla mientras gritaba un estruendoso. "NOOOOOOOOOOOOOO". El maldito había escapado teletransportándose y lo más probable es que se teletransportara hacia la posición de los muchachos.

-Maldición!- Minato comenzó a golpear el suelo en señal de frustración, pero tuvo que dejar esto de lado ya que la cueva seguía derrumbándose. El rubio trataba de huir, pero no veía por dónde rayos salir. Logró divisar una pequeña cueva al otro extremo. Ni idea hacia dónde iría, pero no tenía más opciones. Corrió como alma que lleva el diablo, pero lamentablemente una grieta lo hizo tropezar y un peñasco de roca cayó sobre su pierna.- AHHHHHH! MIERDA!

Minato intentó sacárselo, pero no podía, las fuerzas ya no le daban. Comenzó a ver borroso y finalmente lo último que vio antes de desmayarse fue un color anaranjado en el techo de la cueva.

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El Obito real fumaba un cigarro mientras se limpiaba un poco la sangre de sus heridas. Estaba junto al río aseándose un poco cuando sintió aquella presencia.

-Vaya… lograste convencerlo de que te dijera mi paradero.- expresó Obito sin emoción alguna.- Había cortado la conexión con él en el momento en que le atravesaste el pecho. Jamás creí que en el minuto de latencia te alcanzaría a decir algo. Tal parece que el clon de sangre no es tan efectivo como creía.