Reparemos juntos el equipamiento

3.1K 360 74
                                    


Después de aquel espectáculo, Yuan Zong llamó al instructor jefe y a los demás instructores de la compañía, para una seminario respecto al incidente ocurrido. El tema: como evitar que sucedan ese tipo de incidentes.

Llevamos dando clase unos cuatro-cinco años y nunca nos hemos encontrado con este tipo de personas!

-Yo creo que la mejor solución es devolverle la matrícula. ¡Este tipo de estudiante no puede traernos nada bueno!

-¿Yuan Zong tu que opinas?

En su interior Yuan Zong solo podía pensar: por fin el pequeño pájaro ha caído en mi red, ¿Por que se me ocurriría echarlo fuera? Puede incendiar este sitio y yo lo protegería del fuego.

El silencio se extendió durante un largo periodo de tiempo, aumentando el nudo que tenía en la garganta... Entonces suspiró antes de volver a hablar.

-Si este estudiante vuelve a cometer otro error,  me encargaré en persona de él.

Shi Tian arrugó los ojos antes de añadir de forma casual: -¿No va a ser aún más miserable?¿No haremos que el problema se agrave?.

Uno de los instructores cerca de él le susurró: - ¿Eres idiota y estúpido por partes iguales? ¿Quién es Xia Yao? El cuñado de Yuan, ¿No ves que lo tiene en el bolsillo? ¿No has entendido lo que quiere decir? Lo que quiere decir es que esta persona no es alguien con quien nos debamos meter.

(N/A: A veces me pregunto quién tiene más imaginación si Yuan Ru, o los compañeros de trabajo de Yuan Zong.)

-Imposible. -Shi Tian insistió firmemente y de forma directa: -Yuan Zong siempre ha sido imparcial y nada egoísta. Nunca ha dejado que nadie tuviera la más mínima preferencia, ni ha jugado a los favoritismos.

-Que te recortará 3000 dólares... es menos de lo que realmente te mereces.

Shi Tian se quedó sin palabras.

4 días, es el tiempo que Xia Yao llevaba sin ir a buscar a Yuan Zong, debido a que estaba ocupado con el trabajo. Yuan Zong tampoco tomó la iniciativa de ir a buscarlo, y nadie volvió a mencionar el incidente, lo que ponía a Xia Yao más ansioso.

Ese mismo viernes, Xia Yao terminó pronto de trabajar y pensó en llamar directamente a Yuan Zong. Pero después de pensar en ello, decidió que era mejor ir en persona así Yuan Zong no malinterpretaría la situación y es posible que hubiera algún desacuerdo en la cantidad para la compensación.

Cuando Xia Yao llegó, todos los alumnos estaban ya fuera de las clases, y en el gimnasio ya solo quedaba Yuan Zong. Se podía oír el ruido de tintineos provenían de esa habitación, como si estuvieran haciendo trabajos de mantenimiento, y Xia Yao entró.

Yuan Zong estaba trabajando en una de las máquinas para hacer dorsales del gimnasio. Estaban en pleno agosto y él llevaba un chaleco. Un chaleco que se le había subido hasta la altura del pecho dejando a la vista 8 abdominales. La piel bronceada estaba cubierta por una capa de sudor persistente que fluía hacia abajo siguiendo los músculos de su cuerpo hasta perderse en el borde del pantalón creando un arco sumamente sexy.

Xia Yao fue directo al punto: -¿Cuánto te debo por lo que está roto? Te lo pagaré.

Yuan Zong parecía ajeno a la conversación, sus ásperos dedos apretaban con fuerza cada uno de los tornillos, apretando todas las conexiones de la máquina. Lo estaba haciendo sin ningún tipo de herramientas, los tornillos eran apretados con las manos, sin dejar ningún tipo de veta.

Xia Yao se dio cuenta de que la cara de Yuan Zong volvía a tener la frialdad que había tenido la primera vez que se conocieron. Aunque no estaba mirando directamente a Xia Yao, esté aún podía sentir el frío atravesarle la columna hasta llegar al cerebro.

Intentó hablar de nuevo: -Oh ¿Te estoy preguntando.... no me oyes? ¿Cuánto sube?

Yuan Zong apretó el último clavo con sus manos y agarró uno de los soportes, antes de añadir casualmente: -Ven aquí y ayúdame.

Xia Yao se quedó parado por un largo rato sin reaccionar antes de ir a ayudarle.

Yuan Zong le lanzó una breve mirada. Su tono empezó a subir: -Te he dicho que vengas a echarme una mano. ¿No me has oído? Eres bastante lento con tu reacción.

Xia Yao dio unos pasos más y le ayudó a sujetar el otro lado de la máquina, ambos lo movieron hasta la pared. Después de colocarlo, Yuan Zong hizo que Xia Yao le siguiera y le ayudara a reparar otra de las máquinas. Yuan se agachó y la desmanteló. Xia Yao se tumbó a su lado y le ayudó a sujetándola o apretando cuando era necesario.

Después de estar trabajando durante más de dos horas, habían conseguido finalmente reparar todas las máquinas. Xia Yao sudaba profundamente, y sus ropa había quedado empapada en sudor.

Yuan Zong levantó su robusto dedo pulgar, y le limpió la sudor que se le había acumulado en las cejas.

-Qué poco acostumbrado estás a este tipo de trabajo... estás cubierto de sudor.

Xia Yao apartó la mano de Yuan Zong y añadió: - Quita tu toalla, tiene un asqueroso olor a metal.

Yuan no contestó, una pequeña sonrisa apareció en el borde de su boca, mientras miraba fijamente a Xia Yao

______________________________________________

¡¡Gracias por leer y sobretodo por el apoyo recibido... mañana nuevo capítulo... Avanzar Valientemente!!

Advance Bravely En EspañolWhere stories live. Discover now