Ayúdame a Sentir (Finalizada)

Capitulo 16

Aina

Ha pasado una semana desde que Even me acompañó a Los Ángeles, ha pasado una semana desde que visitamos la casa de la abuela por su cumpleaños y ha pasado una semana desde la última vez que vi a Even.

Después del viaje a Los Ángeles y regresar a New Haven Even me dejó en los condominios de la universidad y se fue diciendo que tenía cosas que hacer. Después de eso no se volvió aparecer por ninguna parte. Ni un mensaje, ni una llamada de su parte. Incluso por las noches no aprecio frente a mi ventana para dormir juntos como días atrás.

A las clases que compartimos nunca apareció, mis mensajes no los contesto, incluso ignoro mis llamadas he emails. Después de tres días insistiendo en poder contactarlo me di por vencida. No soy nadie para interferir en sus actividades, ni puedo exigir explicaciones que no me debe, después de todo no somos nada más que un par de personas involucradas en un trato sin sentido con fines benéficos para ambas partes.

Cierro mi libro al terminar de leer la última página, este es el tercer libro que leo en la semana, ya que no tengo nada mejor que hacer. Talló mis ojos al sentir que mis párpados pesan. Estos últimos días no he podido dormir bien, al no sentir a Even a mi lado el sueño desaparece y a duras penas logro dormir cinco horas seguidas, si no es que menos.

Son las diecisiete horas y necesito terminar un proyecto que nos dejó la profesora de ética para la otra semana. Ya que a mí laptop se le terminó la batería y olvide su cargador en mi dormitorio necesito regresar si quiero empezar con el proyecto.

Cierro los ojos por un instante apretando el tabique de mi nariz, bostezo por última vez y me levanto saliendo de la biblioteca. Camino por los pasillos de la universidad encontrando a pocos estudiantes por los alrededores. Me detengo al escuchar risas del otro lado del pasillo, doy la vuelta y justo ahí lo veo.

Even está acorralando a una castaña contra los casilleros. Ella lo abraza por el cuello mientras suelta carcajadas por lo que le susurra al oído.

Tras más susurros Even la sujeta de la barbilla y la besa en los labios con cierta tensión carnal.
No me importa si interrumpo su momento amoroso, necesito saber por qué ha desaparecido de la noche a la mañana sin ninguna explicación ¿Acaso hice algo malo?

No, definitivamente no hice nada para que desaparezca tan repentinamente de mi vida. Y lo que más me confunde es el porque me importa tanto, después de todo Even no es importante para mí.

Camino y me detengo en cuanto la chica habla.
- Que hay de tu novia, si se entera que le estás poniendo los cuernos conmigo te votará muy lejos. - Even chasquea la lengua y lame sus labios provocando a la chica.

- Querida yo no tengo novia. No me interesan las relaciones formales, no estoy hecho para esas cosas.

- Creí que andabas con esa chica rara de la que corren rumores.

- Te aseguro que no hay nada ente ella y yo.

- De acuerdo. - la castaña lo vuelve a besar de la misma forma apasionada que hace un rato, lo sujeta de la mano y jala para que camine en mi dirección.

En cuanto ambos se dan cuenta de mi presencia detienen sus pasos. La mirada de Even conecta con la mía, me ve por un instante y después desvía su vista pasando su brazo por los hombros de la chica. Pegando su cuerpo para continuar con su camino. La chica me ve con pena y un toque de diversión en los ojos. Ambos pasan a mi lado y entran a una de las aulas.

Sin mirar atrás salgo de las instalaciones y comienzo a caminar sin rumbo fijó lejos de la universidad. Lo último que quiero es regresar a mi dormitorio y pensar en lo que acaba de pasar, en porque Even fingió no conocerme o porque dijo todo eso. Sé que es verdad, pero porque causa en mí una sensación desagradable.