Capítulo Dos

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Un despertador chillante sonó haciendo terminar con su sueño a Beomgyu.

Se levantó rápidamente con un poco de dolor en su cuerpo debido a los golpes que habían sido plantados sobre él. Corrió al baño y tomo una ducha, salió y se colocó el uniforme lo mejor que pudo para evitar rozar con sus dolorosas heridas. Una vez estuvo listo, bajó corriendo las escaleras como nunca antes lo había hecho, o por lo menos no hace mucho tiempo.
Ahogó un grito al darse cuenta que había una figura femenina parada frente a la estufa terminado de hacer un desayuno.

Era Haneul.

—¡Buen día, dormilón! ⎯ saludó alegremente. Beomgyu rápidamente cubrió el raspón más notorio en su rostro con su mano, no podía permitir que su tía lo notará ⎯ . Ya sabes que no sé hacer muchas cosas de comer, pero te hice estos panqueques con un poco de fruta para que desayunes, también te compre este jugo de frutas que vi en el supermercado.

La mujer se dirigió a la nevera y sacó la botella con aquel jugo.

⎯ ¿No deberías estar trabajando, tía? ⎯ . Hablaba tembloroso, le daba miedo que su acompañante notará todos los golpes que tenía, probablemente haría todo más grande y el lo último que quería eran más problemas.

⎯ Hoy me dejaron entrar un poco tarde. Desde que vives aquí conmigo, casi no paso tiempo contigo y me parece injusto para ti ⎯ el pequeño solo miraba con nervios a su tía ⎯ . Tú más que nunca necesitas mi atención después de todo lo que ocurrió en tu anterior escuela, créeme que lo más quiero es ayudarte.

⎯ Lo sé y estoy agradecido por eso.

En un leve descuido, Haneul pudo ver con detenimiento lo que había en la mejilla de Beomgyu, se acercó y retiró su mano del lugar afectado, negó con la cabeza en repetidas ocasiones mientras que Beomgyu suplicaba al cielo no tener inconvenientes.

⎯ ¿Cómo te hiciste esto?

⎯ Yo, sólo ⎯ la mirada expectante de la mayor sobre él, ponía las cosas complicadas. La primera idea que se atravesó por su cabeza fue:⎯ Me golpeé en la puerta de mi habitación.

⎯ ¿Cómo no lo pude notar?⎯ Haneul se alteró demasiado, por esa razón Gyu intentaba ocultarlo lo más posible, no quería ver sufrir a su tía⎯ . Recordé que tengo un ungüento en mi habitación, ya mismo vuelvo.

La adulta trató de irse, pero Beomgyu la detuvo tomando su antebrazo.
⎯ Tranquila, yo lo buscaré. Estoy bien, sólo es un golpe.

⎯ Aún así debe curarse antes de que... ⎯ se detuvo antes de que pudiera decir algo más de lo que tenía permitido decirle.

⎯ ¿Antes de qué?⎯ la duda nació dentro de Choi al ver a Haneul de esa manera, algo guardaba y era más que evidente.

⎯ Antes de que se te haga peor la herida. Come un poco en lo que busco algún cosmético que nos ayude.

⎯ Déjalo así.

⎯ Al menos come algo⎯ acercó un poco el plato que estaba en la mesa hacia Beomgyu.

⎯ No tengo mucha hambre, pero agradezco que te hayas preocupado por mí⎯ comió un poco de lo que había en el plato⎯ . Tengo que irme, me llevaré esto para el almuerzo⎯ tomó la botella de jugo y la guardó en su mochila⎯ . ¡Nos vemos luego!

⎯ Cuídate mucho y no te vuelvas a lastimar así⎯ lo abrazó para así despedirse⎯ . Hoy llegaré un poco más temprano, espero encontrarte despierto para cenar juntos.

Asintió con una leve sonrisa, abrió la puerta para salir camino al instituto. Yeonjun ya estaba esperando por él a unos metros de su casa.

Cambiando radicalmente de ambiente, la casa Kang era todo un desastre cómo todas las mañanas. Todos salían al trabajo o a la universidad, y en el caso de Taehyun, al instituto.

Run Away | TaeGyu Where stories live. Discover now