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Jonathan

Al llegar al edificio donde se encuentra nuestra empresa, el personal de seguridad nos camino libre hasta el estacionamiento subterráneo, al estacionarme y apagar el motor, procuro no lanzar la puerta del auto cuando salgo, no deseo despertar a Emy con el brusco movimiento que el auto hace ante tal acción.

Axel se encarga de desabrochar sus cinturones especies. Apretando mi celular más de lo debido camino delante de ellos, llamando al ascensor esperamos un poco hasta que esté indica que a llegado, reteniendo las puertas hago que pase primero Axel con Emy.

Nuestro trayecto en el ascensor es corto, pasando piso tras piso llegamos al piso donde se encuentran nuestras oficinas.

Al abrirse las puertas observó a mi secretaria esperándonos.

"Usaremos la sala de conferencia privada" le hago saber pasando a su lado. Su vista se mantiene en Emy hasta que la dirige a mi.

"¿La de usted o la del señor Jones?" Se atreve a preguntar antes que desaparezcamos de su vista.

"La mía" abriendo la puerta de mi oficina dejó que Axel ingrese antes de dirigir mi vista a ella "Estaremos en unos minutos, prepara todo" al observar su asentimiento, entro en mi oficina, cerrando la puerta detrás de mi, me dirijo al sofá donde Axel esta dejando a nuestra muy dormida Bebita.

Acercándome a la biblioteca cercana a mi escritorio, abro una delgada y horizontal puerta donde se encuentra un traje completo listo para ser usado. Ignorando las demás prendas tomó únicamente el saco de este. No estoy de humor para usar traje y creo que Axel tampoco. Caminando hacia Emy dejó lentamente el saco sobre su cuerpo. Detrás de mi Axel procura revisar la temperatura del aire acondicionado. No habíamos subido ninguna manta ni su suéter, por suerte mi saco logra cubrir bien sus brazos.

"Dame tu celular" le pido a Axel después de tapar a Emy con mi saco, este sin rechistar me lo entrega, con una mirada de  confusión ve lo que estoy haciendo.

De fondo logró escuchar como las personas van ingresando a la sala de juntas privadas. Suspirando tomó mi celular, llamo a Axel mediante FaceTime, aceptando mi llamada desde su celular, procuro que el lugar donde lo he dejado tenga un amplio panorama de Emy durmiendo. A pesar estar en la sala de reuniones al lado de mi oficina, conozco lo suficiente a mi bebe como para saber que cuando se despierta no hace ningún ruido. Mantener un ojo en ella vía celular sería la mejor opción en este caso.

"Bien" Axel exclama. "Mientras más rápido resolvamos lo que sea que este sucediendo, más rápido nos iremos de aquí"

[...]

La reunión transcurre mucho más lento que lo que deseo. Alexander, nuestro subdirector se encuentra hablando cuando el rabillo de mi ojo capta movimiento desde mi teléfono celular. Emy se a despertado.

Levantándome del asiento camino a las puertas que conectan con mi oficina, sin darles ninguna explicación a las personas que conforman la reunión desaparezco. Asegurándome de cerrar bien las puertas corredizas volteo a ver a mi bebita.

Sus ojos están rojos, acompañados de unas ojeras, definitivamente me indicaba que todo lo que a dormido no le a ayudado mucho puesto no a logrado relajarse y descansar. Comprendiendo completamente cómo se debe de sentir por el cansancio observó como lágrimas empiezan a brotar lentamente de sus ojos.

EMILIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora