Cap. X: Look

123 7 18
                                    


-JongIn, ¿dónde está tu novia?

-¿Novia? Padre, ya hablamos sobre eso.

-Y yo también di mi última palabra ante eso. Si no consigues a alguien...

-Si no consigo novia, no seré digno heredero de tu fortuna. Padre, ¿no crees que eso es bastante anticuado?

-No, mientras la dinastía Kim exista. Por lo tanto, el único trabajo que tienes es buscar un noviazgo digno.

-No te preocupes, padre. Yo me iré de esta casa dentro en unos días. No es necesario crear un drama ficticio por nada.

-¿En serio te importa poco tu estabilidad?

-Sé trabajar, padre. Me importa más mi estabilidad emocional. Cuidaré de conseguir a mi pareja de acuerdo a mis sentimientos, pero jamás por conveniencia ni mucho menos por esconder lo que soy... Ya no trates de cambiar lo imposible, ya no.

Ya no daría más pasos atrás...

(...)

Dimos por terminado el noticiero con el rating más importante de la tarde-noche coreana. Mis padres seguían esperando por razones que realmente desconocía, por la herencia ya había dejado en claro mi postura y sobre volver a casa, estaba en veremos.

-SeHun, dile a mis padres que... -pensaba en la excusa perfecta para no hablar con ellos pero nada fluía de mi cerebro- que...

-Ya dime, JongIn. ¿Que hago? Me dijiste que esperara hasta culminar el programa. ¡¿QUÉ HAGO?!

-¡NO LO SÉ! -tallaba mi sienes con los dedos hasta que finalmente me rendí exhalando pesadamente- Está bien, dile que esperen. Bajo enseguida.

-Bien. ¿Y KyungSoo?

¡¡¡RAYOS!!!

No me atrevería a dejar a mi pequeño solo en el set teniendo a HaNeul rondando cerca. Iría conmigo sin importar lo que dijeran. Admito, mis piernas temblaban como gelatina.

SeHun se fue e inmediatamente volteé a ver a KyungSoo, sentado en la silla viendo el pasar de los camarógrafos y personal de mantenimiento. El calor nervioso invadió mi cuerpo haciendo que aflojara la corbata ligeramente y hasta armarme de valor para ir hacia él. Mi KyungSoo estaría conmigo, él me llenaría de fuerza.

-Pequeño, tengo visitas inesperadas allá abajo. ¿Podrías acompañarme? -me arrodillé y tomé sus manos- Son... mis padres.

-¿Eh? ¿Qué? Ehm, bueno, yo... - movía nerviosamente sus ojitos negros y su tartamudeo tierno derritió mi corazón- Pero, son tus padres. ¿No crees que la charla debe ser entre ustedes?

-Claro que sí, lindo, pero quiero presentarte. Eres importante para mí -llevé mi mano derecha a la altura de su mejilla para acariciarla- Vamos. Esto será rápido, lo juro.

-E-está bien. Si así lo quieres, iré contigo -sonrió aún nervioso.

-¡Gracias, KyungSoo! En serio me alegra que estés conmigo en esto.

Lo tomé de nuevo de su brazo como apoyo y caminamos hacia el elevador a paso lento. Vi de reojo a HaNeul desde el final del pasillo, su semblante era raro. No estaba enojada pero tampoco feliz, sus emociones parecían revueltas en su cabeza al presenciar a un KyungSoo escondido entre la personalidad que derrochaba. Admito que también estaba impactado ante semejante sorpresa, no había tiempo para hablar al respecto pero más adelante lo haría. Mi curiosidad podía más.

Cartas a Kim JongIn [KaiSoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora