#11

6.2K 572 743
                                    

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.









- ¡Chicos, ya estoy en casa! - pegué un salto enorme. El corazón se me puso en la boca en cuanto oí a mi madre entrar en casa por la puerta y prácticamente salté del sofá, disparado, tan exaltado y con tanta rapidez que tiré a Jeno al suelo, de boca. No me paré a mirarle y agarré lo primero que vi a mano, su enorme sudadera, poniéndomela encima con descuido. - Chicos, ¿Están en casa? ¿Jaemin, cielo?

Vi a Jeno, levantándose del suelo y mirándome con cara de incertidumbre al ver que le había robado su ropa. Le señalé, histérico, la puerta de la cocina y él frunció el ceño, tirando de su sudadera, la que tapaba la desnudez de mi torso plagado de chupetones y por si fuera poco, el tatuaje de estrella. Le pegué una patada baja que quería dirigir hacía su vientre, pero al ver su cara pálida y como cerraba los ojos con fuerza, maldiciéndome por lo bajo y encogiéndose adolorido, me di cuenta de que por desgracia para él, le había dado un poco más abajo.

No me paré a pensarlo. Me levanté y aprovechando su escasa guardia y su “incapacidad” para replicar, lo empujé hacía la cocina y cerré la puerta de golpe.

- ¡Jaemin, cielo!

- Hola mamá. - intenté sonreír, sudando a chorros al verla aparecer cargada de bolsas que depositó en el suelo después de dirigirme una mirada de extrañeza. - ¿Cómo es que has llegado tan temprano?

- Oh, lo tenía todo planeado para este día tesoro y me he pedido el día libre. He ido a comprar algunas cosas para la cena de hoy, será especial. - miré las bolsas sobre el suelo con una ceja alzada.

- ¿Qué celebramos?

- Que Jeno está aquí y… ¡Siwon va a venir ha cenar esta noche! ¿No es genial? - entorné los ojos, no muy contento por la noticia, la verdad, pero al ver la expresión de felicidad de mi madre, no pude hacer otra cosa que sonreír.

- Genial mamá. Será… increíble. ¿Necesitas que te ayude en algo? - mi madre se quedó parada frente a mí, con las bolsas de nuevo en las manos cuando entornó los ojos, observándome fijamente. Parecía extrañada y sorprendida y eso me hizo tragar saliva, nervioso. Mi madre siempre había sido tan astuta como despistada, un lince para ciertos asuntos, como saber cuando mentía y cuando decía la verdad y acordarme de ello, me hizo empezar a sudar cuando se me acercó lentamente, con cara de preocupación. - ¿Qué… que pasa? - de repente, frunció el ceño.

𝕄𝕌ℕ̃𝔼ℂ𝕆 || 𝐍𝐨𝐌𝐢𝐧Where stories live. Discover now