Periculum • [JJK] COMPLETA

𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 31

Con esto entramos a la etapa final :D

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Despierto por la mañana con la luz intentando entrar por las cortinas que cubren las ventanas, tardo unos minutos en recordar donde me encuentro y lo que sucedió anoche. Giro en la cama encontrándome con la espalda desnuda del pelinegro, sus hombros suben y bajan lentamente debido a su respiración, las sábanas lo cubren hasta su cintura. Acerco mi mano despacio comenzando a dibujar círculos en su espalda, los recuerdos vienen a mi mente una vez más y sonrío ladinamente. Mi sonrisa va disminuyendo cuando la conversación de anoche aparece también.

"Cuando me vaya tendrás una buena vida, Grace, puedo prometerlo"

Una buena vida. Vivir en la calle no me pareció tan malo hasta los diez años cuando me alejaron de mamá, también cuando antes de eso mi padre falleció a manos de un policía, siempre me pregunté lo que se sentiría hacer cosas normales como cualquiera, cosas como estudiar, subir a un transporte público, tener las tres comidas del día, tener amigos, hacer una pijamada con mis amigas y hablar hasta altas horas de la noche, visitar algún restaurante porque no quiero cocinar, tener una pareja, enamorarme...

Aunque eso último lo veía mucho más lejano.

Por muchos años imaginé a mi madre trabajando en una florería que le perteneciera por completo, todos irían a comprar sus flores por encargo, mi padre tendría una camioneta donde haría las entregas y así ambos trabajarían juntos ganando su propio dinero. Incluso imaginarlo todavía me causa...nostalgia.

"Las personas que son como tú merecen una buena vida"

Respiro profundo y alejo mi mano cuando JungKook se voltea, sus ojos siguen cerrados, su rostro está sereno, me recuerda la vez que lo vi dormido cuando estaba enfermo, por casualidad y curiosidad toco su frente temiendo que tuviera fiebre.

— ¿Qué estás haciendo? —susurra con voz ronca. Avergonzada alejo mi mano.

— Creí que...yo sólo...quería comprobar que estabas bien.

— Estoy bien—dice sin abrir los ojos— ¿Qué hora es?

— Son las...ahh...—miro el reloj en la mesa de noche a mi lado—Ocho de la mañana—vuelvo a mirarlo.

— Pensé que cuando despertara te habrías ido—restriega sus ojos bostezando. Miro como pasa una de sus manos por su cabello despeinado y luego abre sus ojos mirándome al quedar boca arriba.

— ¿Eso hacen las otras chicas? —noto su expresión— ¿Qué? Todos saben que has tenido muchas chicas en esta cama.

— Puedo asegurarte que tú no perteneces a ese montón—se incorpora quedando sentado en la cama, ladea su cabeza en ambos lados estirando su cuello— ¿Hace mucho que despertaste?

— No realmente.

— Me hubieses despertado.

— Necesitaba pensar—ante eso me mira.

— ¿En qué pensabas? —levanta una de sus cejas.

— Un poco de todo—quedo sentada en la cama y miro la ropa en el suelo. Mi cabello está algo revuelto, al pasar mis dedos por él lo noto enredado. Cuando pienso levantarme una mano jala de mi tumbándome en la cama de nuevo, JungKook recuesta la mitad de su cuerpo sobre el mío— ¿Qué haces?

— ¿Por qué te vas tan temprano? —hace un puchero que me causa gracia. Es primera vez que lo veo actuar así— ¿Acaso te espera alguien?

— Pensé que ibas a decirme que me fuera...