Snape ✔️

22-La Charla

Me dirigí a la sala común de Gryffindor.

-Hey, ¿qué tal?- le pregunté a la Dama Gorda.

-Nunca nadie había sido tan amable como tú conmigo, estoy bien gracias.- me dijo.

-Me alegro, Alea Ict East.

La puerta se abrió y yo entre subí a la habitación de los gemelos Weasley y entre.

-¿A qué se debe esa sonrisa?- me pregunto Fred.

-Digamos que sea a arreglado.

-Me alegro por ti.- dijo Lee.

George estaba tumbado en la cama que compartía con Fred, supuse que estaba dormido.

-Me voy a dormir.- dije.

Me quite la túnica que tenía encima del pijama y me fui a mi cama.

Fred estaba tumbado en ella.

-No puedo dormir con los ronquido de George.- oi la risa de los dos chicos por detrás.- Hoy duermes tú con George.

-Una mierda, levanta Fred.

-Vamos enana, ni que fuera capaz de violarte.

Todos rieron menos yo.

-Ese es el problema que no sé de lo que sois capaces.

-Yo no te haría nada, lo juro.

Me tumbe al lado de George y me recoste en su pecho como si fuera mi almohada.

Cuando me desperté los tres estaban a los pies de la cama mirandome expectantes.

-Joder, pareceis putos psicopatas. ¿Os compro un psicólogo?

-Buenos días bella durmiente.- dijeron los tres a la vez.

Rieron y yo no fui capaz de aguantarme la risa.

-¿Cuanto tiempo llevo durmiendo?

-Son las once de la mañana. Te hemos traido comida.— dijo Lee

-Que amables.

Volvimos a reír y me sente en la cama y empecé a comer.

-Me voy, tengo que hablar con ciertas personas.

Cogí una túnica y entre al baño, me la coloqué y me hice unas trenzas de raíz con unas cintas verdes entre lazadas. Cuando salí los chicos ya se habían ido.

Baje a la sala común y ahí estaba una de las personas con las que necesitaba hablar. Harry.

-Hermanito.- lo salude.

-Al fin una bella sonrisa en tu bella cara.- me dijo este.

Reí.

-Ayer, visite a Draco y lo hemos medio arreglado ahora hablaré con él. A lo qen venía, aun no me has contado lo del juicio.

-Solo use magia frente a mi primo, nada importante.

Facepalm mental.

-¿Nada importante? Pues para el ministerio si lo es, ya lo ves, casi te expulsan.- le dije.

-Ya bueno, ¿vendrás está tarde a la reunión?

-No se de qué va pero conociéndote, no me la pierdo por nada.

Me sonrió y yo salí a buscar a la segunda persona. Hermione.

-Herms. Tenemos que hablar.- le dije.

Se asustó, estaba como siempre leyendo un libro en el patio.

-¿Qué ha pasado?- me preguntó.