Again

Capítulo 13

Minho se levantó asustado por el ruido de su alarma. Rápidamente fue a la mesita de noche en donde reposaba su celular para tomarlo y así apagar el ruido. Se frotó los ojos un poco para tratar de ubicarse. Se sentía súper perezoso. No tenía ganas de abrir los ojos y mucho menos de levantarse de la cama. Con calma miró hacia la ventana de la habitación y al ver el cielo tan azul fue que reaccionó por completo del lugar en donde se encontraba, Jeju. Tuvo tantas ganas de tirarse a la cama de vuelta a dormir, pero no sería posible. Había puesto la alarma a las ocho de la mañana con dos propósitos. El primero es disfrutar de las vacaciones, obviamente, y el segundo motivo era que saldrían a desayunar fuera para finalmente ir a hacer las compras necesarias para sobrevivir la semana.

Minho se levantó aún perezoso. Estaba dispuesto a ir a tomar una ducha, pero entonces recordó que lo había hecho en la madrugada. No se sentía sucio, estaba demasiado fresco a decir verdad, y es por esa razón que solo fue a buscar algo de ropa que había acomodado en un pequeño estante para cambiarse. Mientras se quitaba la camisa de su pijama, comenzó a buscar en su mente qué más había hecho en la madrugada, hasta que todo el recuerdo llegó de la nada. Minho dejó caer la camisa del pijama frente a él, se tomó las mejillas, las cuales estaban muy rojas y las sentía muy caliente.

No podía estar pasando. ¿De verdad se habían besado? Debió haberse apartado. Era lo correcto. Estaba casado, tenía un hijo al cual cuidar, pero no. Se le ocurrió que era buena idea dejarse besar por su ex novio. Aunque bueno, dejarse besar no tanto así. Él mismo había buscado ese beso y por eso comenzó a darse pequeños golpes en la cabeza recordando todo. La forma en que se habían besado, las miradas, las pequeñas caricias. Bien, había perdido la cabeza. ¡Incluso le había dicho Channie! Estaba mal...

-¡Papá! -Jeongin entra sin tocar y Minho salta espantando cubriendo su pecho con sus manos por mero instinto. -Uy, perdón. Es que ya todos estamos listos para salir. ¿Te sientes bien?

-Si claro. Bajo ahora. -le sonríe con cariño y Jeongin asiente para luego irse.

Minho se sienta en la cama unos segundos para recuperarse del susto y luego se levanta para continuar con el trabajo de vestirse. Una vez estuvo listo, peinó su cabello y bajó con una pequeña cartera de un solo mango que le rodeaba el pecho hasta caer al final de su cadera. Al bajar vio que, efectivamente, todos estaban listos para salir. Sonrió con cariño a los adolescentes e hizo lo mismo con Chris, pero un poco más nervioso. Todo quedaba relativamente cerca de ellos así que fueron caminando a su primer destino, una cafetería. Ahí desayunarían para entonces irse a comprar las provisiones necesarias de la semana.

Los chicos tomaron un desayuno normal de revoltillo, jamón, tostadas y jugo de naranja. Chris había ordenado un emparedado de huevo con un café y él unos panqueques junto a café. Desayunaron en una plática normal y Felix de vez en cuando daba algunas sugerencias de lo que podrían hacer en la semana. Chris le asentía y le prometió que buscaría la manera de hacer la mayoría de las cosas que estaba planeando. Minho había sonreído enternecido. Se notaba que Chris mimaba demasiado a Felix, pero el lindo adolescente no era para nada un chico problemático o malcriado. Era simplemente... tierno.

Cuando terminaron el desayuno y repasaron un poco, se levantaron para ir a la segunda parada, un supermercado. Quedaba cerca también así que fueron caminando. Cuando único tomarían un taxi sería de regreso debido a los paquetes. Cuando entraron, Chris le dijo a los chicos que fueran a tomar lo que quisieran. Eso fue suficiente para que Felix arrastrara a todos junto a dos carritos y se alejaran de los adultos. Minho de rió un poco y tomó un carrito de compras igual para ir pasando con calma por la primera góndola. Chris se paró a su lado y fue el primero en colocar algo en el carrito, tres paquetes de arroz. 

-Es lo principal si queremos sobrevivir la semana. -dice y Minho asiente para seguir caminando. -No me has hablado en toda la mañana. ¿Estás bien? -le pregunta preocupado y Minho solo asiente.