- Eres muy tonta, ¿lo sabes no?
- Ay, que me hace ilusión yo qué se.
- Solo es una cena Alba.
- Ya lo sé, pero es la última cena que hago en la que ha sido mi casa un montón de tiempo, ¿sabes?
- Estoy muy contenta de que quieras vivir conmigo, me muero de ganas por verte todas las mañanas.
- Y yo por verte todas las noches.
Durante uno de esos maravillosos días del otoño, Natalia había hecho su pregunta número 35, pidiéndole a la rubia que ahora caminaba a su lado calle arriba que se fuera a vivir con ella. Y después de unos segundos de pánico, Alba gritó de la emoción asintiendo con una alegría desbordante.
- Tú siempre pensando en lo mismo Albi... - dijo en un tono de voz pícaro, a lo que la rubia le sacó la lengua mientras entraban en el portal.
- Ay Nat espera - dejó las bolsas en el suelo - que llevo como dos semanas sin coger el correo - sacó la llave del buzón y cogió las cartas sujetándolas con la boca para coger de nuevo las bolsas - vamos - dijo como pudo y llegaron a casa para soltar las bolsas en la cocina y dejar las cartas en la encimera.
- Uy y este sobre tan rojo qué es - dijo Natalia cogiendo una de las cartas y Alba se acercó a ella por detrás.
- ¿Qué es? - Natalia le dio la vuelta y Alba vio un texto en blanco con las palabras Sorbonne Universitè.
- Sorbonne Universitè - dijo Natalia y Alba cogió el sobre con cuidado sentándose en una silla - ¿la de París?
- Si... no se qué es - abrió el sobre con cuidado y desplegó la carta que había en su interior empezando a leer. Natalia se apoyó en la encimera mirando a la rubia que estaba inmersa en aquellas palabras.
- ¿Qué dice? - preguntó un par de minutos después.
- Nada importante, ya sabes, publicidad de esta rara - dijo levantándose y dejó la carta al lado de las demás. Natalia miró el sobre frunciendo el ceño y luego miró a Alba, que empezó a trastear por la cocina evitando cruzar la mirada con la suya - ¿me ayudas?
- Claro - se dio la vuelta echando una mirada más a la carta y luego se puso a ayudar a Alba con la cena.
Un rato después llegó Julia y también se puso a ayudar con todo lo que iban a preparar. Colocaron la comida entre la mesa baja del salón y la mesa que tenían en la cocina, que la sacaron también fuera para que hubiera más sitio. Colocaron las bebidas, pusieron música y luego se sirvieron una copa de vino mientras esperaban a los invitados a la cena. El primero en llegar fue Carlos, y pocos minutos después aparecieron Miki y Sara junto con Joan y Esther. Luego Marta con Sabela, y así poco a poco fueron llegando todos hasta que solo faltaba por aparecer María. Llamaron al timbre y Alba fue a abrir la puerta dando saltitos. Cuando abrió se quedó alucinada con quién estaba al otro lado.
- ¿Pablo?
- ¡Hola Alba!
- Pero... ¿venís juntos o...?
- Si, venimos juntos - dijo María sonriente y Alba levantó las cejas sorprendida.
- ¿Qué pasa? - dijo Natalia - hola, soy Natalia - saludó a Pablo.
- Él es Pablo, es... trabaja conmigo.
- Y sale conmigo.
- ¿Estáis saliendo? - preguntó Alba.
- Pues si, ya ves, de tatuaje en tatuaje...
- Espera, ¿trabajáis juntos? - preguntó Natalia señalándoles.
ESTÀS LLEGINT
¿Me das fuego? // ALBALIA
Fanfiction- El amor, que es una mierda. - Soy la presidenta de ese club. - Y yo socia honorífica. ¿Qué pasa cuando dos personas que reniegan del amor sienten que están a punto de enamorarse?