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Yukhei recordó las palabras de ese viejo profesor suyo.

"El sujeto de sus fotos nunca debería ser el objeto de sus deseos. Deben canalizar esos deseos hacia la foto que contiene el sujeto... la fotografía es otra forma de distorsión. Apenas es bastante de lo que una cámara es capaz de capturar en una foto. La esencia del sujeto es otro tema."

Para él, era pura basura.

~ • ~

-Huang Xuxi- lo llamó el hombre cuando lo vio acomodando su mochila en el hombro, saliendo del anfiteatro donde tomaba clases.

Se volvió hacia su profesor.

-¿Sí?

-¿Podemos conversar un momento?

El chico asintió.

-Claro.

-La última tarea que entregaste... es grandiosa. Tu interpretación es bastante única.

-Gracias, lo aprecio.

-Debes de sentirte bastante bien de que, en medio de todos los estudiantes de primero, tu trabajo es el único que se destaca.

Yukhei lo miró inexpresivo, como siempre.
No le interesaba lo que oía. No le importaba ser mejor que los demás ni tampoco el peor, él sólo estaba ahí por una razón. La fotografía era un cable a tierra y sólo quería aprender más de ella.

-Entonces... ¿qué era aquello de lo que quería hablar?- preguntó.

El hombre lo observó unos momentos.

-A veces me preocupo cuando veo a estudiantes como tú- confesó- Después de todo, la perfección tiende a causar arrogancia. La fotografía es un arte imitativo, creo que sabes a lo que me refiero... siempre es más apropiado ver y sentir al sujeto en persona, más que verlo a través del lente de la cámara.

El profesor ciertamente tenía una reputación, pero era bastante anticuado y de mente cerrada. Tenía la intención de advertirle contra la inculcación de sus propias percepciones en sus fotos, y lo hizo de la manera más larga y tonta posible. Yukhei estaba aburrido. En pocas palabras, en su mensaje, lo que quería transmitir era que su atención debería estar en aquello real enfrente de él, más que en la foto que tomaba de ello. Pero él era joven y engreído, no oía a otras personas. Entonces sonrió. Quería irse.

-Entiendo. Gracias por el consejo- dijo- Me aseguraré de mantenerlo en mente.

Y se fue, comenzando a caminar fuera de lugar.

~ • ~

Es un sentimiento agradable cuando te gusta alguien. Todas sus experiencias saliendo con alguien habían sido romances que eran como dulces de saborizante artificial, haciendo su lengua volverse azul. Nunca hubo un sabor en particular que prefiriese. Solo cambiaban ligeramente en la fragancia o el color, pero sabían más o menos a lo mismo.

La gente era extraña a veces.

Solían enfadarse y decirle que lo que tenían no era amor, porque él no podía estar triste o enojado a causa de ellos. Una vez vio a su ex novio llorar en aquel entonces.  Antes, no lo había visto llorar a menudo. Pudo haberle dado un abrazo, ofrecerle algunas palabras de consuelo, pero decidió no hacerlo. Se había dado cuenta de que ya no podía solo escoger el dulce y ya. Esa etapa de su vida ya había terminado. Suspiró con los dedos sobre su celular. Quería dejar de llamar, pero no podía hacerlo. Estaba nervioso. Baekhyun no estaba contestando y no sabía cuánto más podría soportar sentado allí en lugar de subir a la habitación y buscarlo. Recordó a Chanyeol pasando su brazo posesivamente por los hombros del pelinegro y llevándoselo. Chasqueó su lengua. El rostro triste de Baekhyun. Yukhei se sentía egoísta. Pensó que sabía mucho sobre Baekhyun, aunque probablemente no todo. Sabía que estaba solo, que lo necesitaría, debido a su infelicidad. 
Yukhei le había dicho todo lo que desesperadamente el pelinegro quería oír, dándole el apoyo emocional que necesitaba. No había sido tan difícil darle todo el calor por el que tanto rogaba. Suspiró, tragando saliva mientras apretaba su mano alrededor de su móvil.
Pero ahora, estaba preocupado de que no atendiera sus llamadas. Odiaba el hecho de que Baekhyun fuera tan débil ante Chanyeol. Lo había notado, se había dado cuenta. Y le dolió.

¿Nunca hubo un lugar para él por empezar? ¿Siempre estuvo completamente fuera de cuadro desde el mismo comienzo? Pensó que Baekhyun, de todas las personas, sería capaz de leerlo. Lanzó un quejido con molestia y echó su cabeza hacia atrás. Aún seguía esperándolo. No iba a irse. No le importaba lo que estuviese sucediendo allá arriba. Sólo quería verlo e irse con él de ese lugar. Entrecerró sus ojos. Se preguntaba si siquiera Baekhyun estaba pensando en él también.

[...]

Baekhyun se había quedado en la puerta de la habitación. Sus lágrimas estaban a punto de soltarse en cuanto oyó a Chanyeol dentro de la habitación.

Sentía los sollozos

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Sentía los sollozos. No podía soportarlo. No quería que llorara. No quería oírlo llorar por su culpa, así que se fue, bajando las escaleras. Yukhei continuaba sentado en la sala de estar del hotel. Unos pasos resonaron por el pasillo y él elevó la vista. Baekhyun lo visualizó, acercándose, mientras acomodaba su abrigo en sus hombros. Al castaño le ponía ansioso el que pudiera no salir de esa habitación. Pero había regresado a él, y no pudo evitar que sus esperanzas se elevaran. Rápidamente se levantó de su asiento y caminó hacia él, tomando su mano. Sin embargo, Baekhyun la quitó levemente.

-No lo hagas. Nos verán- dijo, evitando su mirada.

Su cuerpo se sentía pesado. Quería dormir, pero quería quedarse despierto hasta el amanecer. Quería estar solo, pero también quería llorar en los brazos de alguien. Quería que ambos lo dejaran en paz, pero quería que se preocuparan por él. Deseaba que ninguno le prestase atención, pero a la vez deseaba que ambos lo miraran. Baekhyun tenía todos esos sentimientos encontrados, al mismo tiempo, como si se estuvieran enredando y derritiéndose en uno solo. Yukhei lo observó.

-¿Lloraste?

-No.

-Estaba preocupado por ti- le dijo- Quiero estar contigo, pero te ves cansado...

El pelinegro no decía nada. Su mirada estaba clavada en el piso. La amabilidad de Yukhei siempre traía consigo un atisbo de algo más, como un helado que se derrama, dejando atrás no más que dulzura persistente.

-Te fuiste por un rato- volvió a hablar el castaño, notando enseguida la sangre seca en el cuello del otro- Quiero preguntar qué sucedió ahí dentro... aunque no estoy seguro si debería- soltó, limpiándola.

Baekhyun se estremeció al darse cuenta de que los labios lastimados de Chanyeol lo habían manchado, y que la sangre que Yukhei estaba limpiando, era por su culpa.

-Estoy feliz de que hayas regresado por mí- dijo el chico, mirándolo- Vamos, te llevaré a casa.

«𝐋𝐨𝐯𝐞𝐎𝐫𝐇𝐚𝐭𝐞» ➭chanbaek Where stories live. Discover now