Dos Saiyajin en un mundo mágico.

Capítulo 19: El entrenamiento.

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Capítulo 19: El entrenamiento.

Luego de que Minerva se uniera al grupo de entrenamiento, todos volvieron a la aldea para cobrar la recompensa.

-Muchas gracias.- Decían todos los aldeanos al unísono mostrando sus respetos por ellos.

-Aquí tienen, ésto es por los bandidos y ésto por el oso.- Decía la anciana entregándoles la recompensa.

-Sólo tomaremos lo del oso.- Dijo Gohan confundiendo a los aldeanos y a sus amigas, pues Gine ya tenía una idea de qué era lo que planeaba.

-¿Qué?- Respondió la anciana confundida ante las palabras de Gohan.

-Sí, desgraciadamente, alguien acabó con la vida de los bandidos, así que nosotros no hicimos ese trabajo, además, necesitarán ese dinero para su aldea.- Aclaraba Gohan sus intenciones haciendo que sus amigas estuvieran de acuerdo con él y los aldeanos se sorprendieran de lo amable que era.

-Bien, hora de irnos.- Dijo Gine procediendo todos a retirarse y despedirse de los aldeanos.

En un lugar muy lejano, para ser más precisos, en un laboratorio dentro de un castillo.

Una chica con orejas de conejo se encontraba caminando alegre cuando algo le llamó la atención, cuatro de los cilindros del laboratorio comenzaron a burbujear y ahí aparecieron Ezel, Jackal, Seilah y Kyouka, en ese orden, sorprendiendo a la chica.

-¡¿Pero cómo?! ¡¿Ustedes fueron asesinados?!- Preguntó la chica totalmente atónita al verlos.

-Lamy, ¿Cuánto tiempo tardará nuestra regeneración en el Núcleo del Infierno?- Preguntó Seilah a la conocida como Lamy.

-La Resurrección de Demonios lleva su tiempo, al tratarse ustedes cuatro al mismo tiempo tardará más.- Dijo Lamy saliendo de su shock.

-¡Te preguntaron cuánto! ¡Ese mocoso! ¡Ese mocoso me las pagará!- Gritó Ezel molesto.

-No me grites o no te revivo.- respondió Lamy con una cara totalmente seria.

-¡Sólo contesta la pregunta!- Esta vez Gritó Jackal por la actitud de Lamy.

-Tú sí, gritame cuanto quieras, mi querido Jackal.- Respondió Lamy de manera enamorada a las palabras de Jackal.

-Lamy, ¿Cuánto tiempo?- Preguntó Kyouka seria.

-Al ser cuatro y el hecho de que fueron desintegrados por completo... Es un aproximado de tres o tres semanas y media, incluso podrían ser cuatro.- Respondía seria Lamy a la pregunta de Kyouka, con ésta y los otros tres aceptando ya que no les quedaba de otra.

-¿Cómo es que ustedes cuatro terminaron así? Sólo iban a evaluar el gremio oscuro, ¿no me digan que fueron ellos?- Preguntó un hombre de cabello oscuro y largo que sostenía un libro como si fuese su más grande tesoro.

-Mard Geer-sama.- Respondió Kyouka revelando el nombre de éste. -No, el gremio no fue digno, los que nos derrotaron... fueron dos niños, por sus marcas, eran de Fairy Tail.- Terminó de responder Kyouka de manera seria pero sintiendo vergüenza, sorprendiendo a los presentes y avergonzando a los demás que fueron derrotados.

-¿Cómo que dos niños?- Preguntó incrédula Lamy.

-No interrumpas. Guarda silencio, Lamy.- Dijo Mard Geer de forma tranquila, mientras hacia que la boca de Lamy fuera rodeada por una espiga de espinas haciéndole dar un grito interno. -Explícate, Kyouka.