18. Trato.

67 12 9
                                    

Adele y Maven se encontraban sentado en uno de los sillones de Taylor Ray, pegados hombro a hombro, siendo observados bajó la penetrante mirada de dos de sus guardias.

Taylor servía en un vaso, algún tipo de licor café amarillento, con calma como si estuviera procesando la situación, o lo que diría a continuación.

A diferencia de la primera vez, no había nadie monitoreando su conversación, o algún guión previamente planificado para este momento.

- Muy bien, tortolitos.- se volteó para vernos con una sonrisa algo tétrica, como si escondiera algo.- Ahora mismo me dirán ¿Qué hacen aquí? ¿Y por qué trajeron a la corriente esa?- se sentó delante de ellos, como aquella primera vez que Adele había estado ahí.

- ¿Y si mejor nos dices tú como es que los boletos a Brasil que serían usados por Dante y por ti, desaparecieron y a los días alguien retiró dinero de una cuenta de Dante justamente en Brasil?- preguntó Maven con una sonrisa tranquila.

Mi mirada de sorpresa volteó instantáneamente a la de Taylor, incluso la mirada de los hombres que nos habían estado vigilando, fueron hacía él.

- ¿De qué estás hablando?- pregunto Taylor confundido, su semblante cambio por completo a uno asustado.

- Ay, por favor Taylor. - dijo Adele que había permitido que Maven manejara la situación por unos segundos.- Vine aquí, amablemente a conversar, y decidiste que era inteligente mentirme, ¿A caso creíste que no nos daríamos cuenta del retiro? Todas las cuentas de Dante están siendo vigiladas, es "el hombre del momento"- mintió Adele.

- ¿Están suponiendo que Dante está vivo?- preguntó

- Nosotros no, ¿Pero tú?- preguntó Maven intrigado.

Los hombros de Taylor se encontraban ligeramente alzados, su mandibula estaba tensa, algo que era fácil de notar por la manera en la que la vena del cuello se mantenía visible.

- Cualquier declaración que de aquí me llevara a una celda, y soy demasiado carismático para estar en una.- protestó.

- No tiene que ser así, puedes decirnos lo que sabes y te protegeremos. A ti no es a quien queremos preso.- comentó Adele, esperando que Taylor le creyera.

- Esta bien, Dante si esta vivo. Pero yo no lo sabía, hasta unos días antes de que vinieras a visitarme.- confesó Taylor con una mirada sombría.

Adele miró a Maven que ya sonreía con la confesión de Taylor, por instinto ella sonrió tambien, pero era algo un poco mas en burla, porque ellos lo habían descubierto primero.

- ¿Y por qué no se lo dijiste a la policía?- preguntó Maven intentando mantener la seriedad.

- Parece que nunca has guardado secretos por amor.- dijo Taylor de una manera sarcástica como si el supiera algo que los otros dos no.

- ¿Y cómo es que te enteraste?- preguntó Adele con curiosidad, para evitar que Maven respondiera a lo que Taylor acababa de decir.

- Dante me buscó.- por primera vez Taylor tomo asiento, su mirada ya no era de preocupación por haberlo descubierto, era obscura, como de un recuerdo que hubiera querido mantener así un largo tiempo- No puedo decir mas, no es algo que me enorgullezca, pero una vez que lo vi le pedí que no volvería y hasta ahora no lo ha hecho.

- ¿Y por qué no me dijiste nada?- preguntó Adele confundida.

-Fidelidad probablemente o estupidez, soy demasiado bonito para ir a una prisión- comentó Taylor con un poco de sarcasmo.

- Si sabes que Dante se fue con alguien mas, no tiene sentido que aun haya lealtad hacia el, es cuando mas deberías querer que lo atrapen.- protesto Adele.

Fire and RainWhere stories live. Discover now