𝘝𝘪𝘤𝘪𝘰 𝘐𝘯𝘦𝘹𝘪𝘴𝘵𝘦𝘯𝘵𝘦 | 𝘚𝘔+𝘒𝘉 𝘚𝘵𝘺𝘭𝘦 [𝘍𝘪𝘯𝘢𝘭𝘪𝘻𝘢𝘥𝘰]

𝙲 𝙰 𝙿 𝙸 𝚃 𝚄 𝙻 𝙾 4

Mi mente daba vueltas al querer tratar de entender algo tan difuso, el mareo me atacaba violentamente haciendome perder el control de mis piernas, quería librarme de aquello que me atormentaba, quería dejar de pensarlo pero; mientras más me esforzaba el dolor empeoraba.

Quería borrarlo pero se hacía una mancha aún más profunda.

Salí de mi casa con la esperanza de despejar mi mente, comencé a caminar sin tener un rumbo claro. Hoy era uno de los pocos días en los que el sol se dignaba a salir, concediendonos ver algo más que solo nieve, se supone que en días como estos suelo juntarme con mis amigos, y disfrutar de las pocas veces que puedo ponerme ropa de verano.

Sin embargo, no lo tomé de esa forma, para mi el sol no era más que irritante y fatigador. Maldije dentro mío por no haberme puesto una gorra, subí mi capucha y caminé más rápido en busca de un lugar vacío.

Me encontré en un lugar vacío, el lugar era hermoso a simple vista. Había un pequeño lago, sus aguas eran iluminados con los rayos del sol lo que lo hacía ver más hermoso, a su frente una banca, un poco desgastada pero ahí estaba, era pequeña por lo que solo podrían estar dos personas.

Por alguna razón pensé que aquel sería el lugar perfecto para pasarla con tu pareja, ja, cliché y tonto.

Pero... Sí, aquel lugar se veía tan tranquilo y hermoso, en un pequeño pueblo como este, este lugar tendría que estar lleno de gente.

A mi derecha pude notar un cartel de madera, me acerqué para ver que decía, pero me era imposible ya que las letras no eran comprensibles. No le di más vueltas y me senté en aquella banca, al hacerlo sentí una calidez inmensa y sonreí.

Mi dolor se había ido, en lugar de eso me sentí tranquilo y relajado, ahora el sol me abrazaba con sus cálidos rayos, todo estaba a mi favor, me sentí como si yo siempre hubiera pertenecido a este lugar, cerré los ojos y todo lo que me atormentaba se había ido.

El sol seguía ahí pero escuchaba como las gotas de agua iban cayendo, abrí los ojos y todo a mi alrededor estaba mojado. No comprendía, ¿Cómo es que llovía si el sol seguía ahí? No había nubes, ni viento como es que...

-"Aparenta serlo."-

¿Qué?

Miré al frente y ahí estaba. Lo que tanto había estado buscando, lo que me atormentaba.

El chico frente mío tenía una gorra verde, una chamarra anaranjada, y pantalones verde oscuro con una par de botines cafés, tenía algunos mechones de su cabello pelirrojo saliendo de su gorra, sus ojos verdes brillaban como nunca, y sus labios rosados marcaban una bella sonrisa, simplemente aquel chico era hermoso.

No podía articular ni una sola palabra, ni siquiera moverme, mi cuerpo no reaccionaba.

-"Este lugar... Aparenta ser hermoso, pero oculta los más horribles secretos. Nada es lo que aparenta ser, Stan."-

Sonrió de nuevo, metiendo sus manos en su bolsillo. Por más que quisiera contestarle no podía, mi cuerpo aún no reaccionaba.

Su mirada se puso sería, comenzó a acercarse lentamente y no se detuvo hasta que estuvo cerca mío, me miro detenidamente, sacó una de sus manos de su bolsillo y lo acercó hacia mi.

Cerré los ojos esperando por su tacto, totalmente sumiso ante él, su mano se detuvo a unos centímetros de mi mejilla, el deseo de querer sentirlo era más fuerte, así que acerque mi mejilla hasta su mano.

Mis ojos se abrieron de golpe al sentirlo, su mano estaba increíblemente fría, aún así no me aparté, lo miré a los ojos y el también lo hizo, llevé una de mis manos a la suya intentando calentarlo y la otra la llevé delicadamente a su mejilla, el tampoco retrocedía ni se quejaba, solo nos quedábamos ahí mirándonos atentamente.

La lluvia se incremento de la nada, mojandome de inmediato, pero...

Lo miré a él y seguía intacto, sonriendo, su ropa seguía seca, por más fuerte que era la lluvia ni una sola gota se imprendaba en él.

Sentí un extraño escalofrío, aparte mi mano de su mejilla lentamente y miré la palma de mi mano.

Mis ojos se abrieron como platos al ver lo había en este.

Sangre, había sangre cayendo de mi mano. Mi respiración se hizo agitada, el dolor de mi cabeza había vuelto, no pude mantenerme en pie y terminé cayendo. Abrí los ojos y toda mi ropa estaba empapada de sangre, entonces me dí cuenta que aquello que estaba lloviendo no era lluvia sino sangre. Sentía como la sangre resbalaba por mi cara, estaba asustado mire a mi alrededor, el césped estaba manchado con sangre, el lago que alguna vez había sido hermoso estaba lleno de sangre. Miré al frente y él seguía ahí, su ropa estaba llena de sangre, pero aún así continuaba mirandome con una sonrisa. Atemorizado, cerré los ojos con fuerza, el dolor de mi cabeza no hacía más que empeorar, lleve mis manos a mi cabeza intentando calmarme, era imposible aún sentía como la sangre caía sobre mi, entonces escuché su voz.

-"Ayudame."-

Bastó eso para hacer a mi cabeza explotar, solté un grito por el dolor, por último vi su sonrisa y caí inconsciente.

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KynnSt47