𝘝𝘪𝘤𝘪𝘰 𝘐𝘯𝘦𝘹𝘪𝘴𝘵𝘦𝘯𝘵𝘦 | 𝘚𝘔+𝘒𝘉 𝘚𝘵𝘺𝘭𝘦 [𝘍𝘪𝘯𝘢𝘭𝘪𝘻𝘢𝘥𝘰]

𝙲 𝙰 𝙿 𝙸 𝚃 𝚄 𝙻 𝙾 25

⚠️⚠️Importante: Contenido fuerte, leer bajo discreción. ⚠️⚠️

Butters:

Yo... Nunca había tenido un pasado bonito, no había tenido amigos que recordar o unos padres ejemplares que mencionar. No hasta que él apareció en mi vida.

Ese día... recuerdo su asqueroso tacto, sus malditas palabras, recuerdo como llorando trataba de alejarlo, le suplicaba que parase, pero él, sólo... Continuaba sin dejar de tocarme.

Ese día, cuando regresé a casa, llorando le conté a mi padre lo horrible que él profesor me había hecho... A lo que él me respondió:

–Seguro tú lo sedujiste igual que tu maldita madre.–

Aquellas palabras me habían destruido en uno y mil pedazos.

Corriendo fui a encerrarme a mi cuarto y lloré, lloré tanto hasta el punto de desear morir.

Entonces aquel deseo se hizo mucho más intenso...

Escapé de casa, corriendo fui aquel puente por el que pasaba todos los días, una vez ahí comencé a observar el agua que reflejaba lo oscuro de la noche, y comencé a llorar.

Lloré recortando todo lo que me estaba pasando..

Lloré recordando cada que mis compañeros de clase se reunían para golpearme.

Lloré recordando las veces en las que mi profesor me pedía que me quedase.

Lloré recordando las veces en las que mi mamá traía hombres diferentes a casa.

Lloré recordando todos los insultos y maltratos que había recibido de mi padre.

Entonces... ¿Valía la pena seguir viviendo?

Temblando me subí a la barra del puente, cerré los ojos y cuando iba a soltarme sentí una mano agarrarme y con fuerza logró bajarme de la barra.

Mire asombrado a la persona que me había salvado, y sin decir nada me abrazó fuertemente...

¿Así es como se sentía abrazar a alguien...?

Y entonces volví a llorar...

¿Por qué salvar una vida tan miserable como la mia?

Sentí como acariciaba mi cabello y como susurraba que me tranquilizace.

Aquello me reconfortó tanto que solo pude aferrarme a esa persona y llorar a cántaros como un niño.

Cuando me tranquilice, recuerdo que me llevó a comer algo, luego me había comprado algunos dulces para calmar un poco la ansiedad que tenía.

Ya tarde en la noche me llevó al lugar donde vivía y me dijo me podía quedarme a dormir aquí.

Al día siguiente, desperté y vi como había cocinado un desayuno con tantas cosas que yo había dejado de probar, aquel gesto me conmovió y volví a llorar. Él se sentó a mí lado y de nuevo me abrazó.

–Tranquilo...– susurró mientras me daba suaves palmadas en la espalda.

Aquellos actos eran tan extraños para mí que eran reconfortantes. Cuando me separé lo miré y con miedo le pregunté su nombre.

–Oh, perdona por no haberme presentado antes, yo me llamo Eric Cartman–

–Yo soy Butters Stotch...– me sentía realmente nervioso –Porque... ¿Me ayudaste? –