5
4
3
2
1
"Otra vez"
5
4
3
2
1...
"Okay, allá voy."
Habían pasado 10 días, 19 horas y 20 minutos, los casi 11 días más largos de toda su vida. Había pasado casa minuto torturándose lentamente por el error que cometió.
En algún momento Camila creyó que todo con Lauren era sólo una estupidez, una aventura, un experimento, un desliz por sentirse sola. Ahora estaba convencida, después de 10 días, 19 horas y 22 minutos, que sus sentimientos por Lauren eran muy fuertes, los más fuertes que había tenido por alguien, incluso por ella misma.
Alexander se había encargado de arreglar el automóvil de Camila y sacarlo del edificio donde estaba el estudio. Lo saco 5 días atrás, y desde entonces Camila iba al edificio de Lauren a esperarla 2 horas al día, tenía la esperanza de verla entrar en su precioso automóvil, o ver sus ojos, los ojos más preciosos del mundo; sólo quería sentirse cerca.
En 5 días Camila no había podido ver a la fotógrafa. 5 días de torturarse a su misma.
Le habían llamado hace 3 días para notificarle que ese día tendría una sesión de fotografías en el estudio de Jauregui, junto a otras dos modelos. La iba a ver, por fin iba a ver a la mujer que la tenía de cabeza, que la hacía sufrir por su ausencia.
Bajo de su automóvil intentando mantener su postura. No se iba a desmoronar frente a Lauren. Le había dicho que lo profesional primero y ahora no podía retractarse, además esa sesión de fotos para tan prestigiosa tienda de ropa esa fundamental para su carrera, sobre todo sí llevaba la firma de Jauregui, su Lauren.
Entro al estudio y no fue ninguna sorpresa para ella encontrarse a Stefani y a la pelirroja Naomi, siendo maquilladas por Lucy y Alexa, tan pronto como Camila se acomodó en el vestidor Ally llego a su lado.
"¿No hay marcas que quitar hoy?" Pregunto Ally con una gran sonrisa en su rostro. Era obvio que ella aún no sabía lo que había sucedido.
Camila negó con la cabeza e intentó sonreír, sin éxito.
Podía sentir desde el otro lado del vestidor las miradas de la modelo rubia. Sabía que Lauren se había estado acostando con ella estos días, después de verla salir de su edificio varias veces en esos 10 días. No podía odiarla, aunque quería hacerlo, no podía juzgar a la modelo, aunque deseaba hacerlo. Ella era la única responsable de lo que había sucedido con Lauren, de como habían terminado las cosas entre ellas, aunque no siquiera habían comenzado bien.
Después de algunos minutos Ally termino su maquillaje y fue el turno de la vestuarista en acercarse a ella y darle ciertas indicaciones con respecto a lo que tenía que ponerse.
Camila estaba lista para salir al ser junto con las otras dos modelos. Sus manos comenzaban a sudar, y su cabeza daba mil vueltas. Antes de llegar ahí se había dedicado a convencerse de que al ver a Lauren no iba a sentir nada por ella, ahora no estaba tan segura de haber conseguido convencerse a sí misma.
La puerta de la oficina se abrió y de ella salió Lauren, su cabellera negra se agitaba de un lado a otro mientras ella llevaba su cámara colgando en el cuello y terminaba de ajustarla. Parecía tan tranquila, se veía feliz, radiante, hermosa. Era todo lo que Camila había añorado por 10 largos días que no había sabido nada de ella.
