"Necesito tu ayuda Ally."
Lauren se dejo caer sobre su silla de cuero detrás de su escritorio, sosteniendo su cabeza con ambas manos.
Ally la observo boquiabierta.
"Stefani la va a asesinar." Le dijo Ally sentándose en el pequeño sillón que había en la oficina de la fotógrafa. "Lo sabes ¿Verdad?"
La oficina era amplia y ordenada, casi tan ordenada como el departamento de Camila. Tenía algunos cuadros de las fotografías que habían ganado premios, fotografías que obviamente había tomado Lauren. Era blanca y todos los muebles eran plateados, una combinación lujosa. Megan se había encargado de toda la decoración, y había acertado, como siempre.
"Lo sé, por eso te necesito." Dijo Lauren volteando a ver a su amiga.
Ally Brooke era una mujer atractiva, su cabello castaño solía estar siempre rizado y perfectamente peinado. Había trabajado con Lauren desde el principio del estudio, y era sin duda el mejor elemento que había. Siempre acompañaba a las modelos y la fotógrafa en los viajes cuando se les requería en otra ciudad. Lauren adoraba su compañía, era como la voz de la conciencia de Lauren, siempre daba buenos consejos y la ayudaba cuando tenía un problema, aunque le costaba caro, como tener que hospedarla en una habitación privada cuando salían de viaje, a veces un considerable bono en el sueldo, o llevarla a algunas fiestas para conocer a los amigos de la fotógrafa. Todo lo valía, Ally era inteligente y talentosa.
"Okay, entonces ¿Quieres que maquille los chupetes que dejaste en el cuerpo de la nueva?" Pregunto Ally mientras sacaba una paleta de su envoltorio y sé la llevaba a la boca "¿Y también los que la nueva te hizo a ti?"
Lauren frunció el ceño y dejo escapar un gruñido que no llego hasta los oídos de la maquillista.
"No soy tu única maquillista Lau" continuó Ally chupando su paleta con emoción "Tienes a otros 4 allá afuera trabajando también, ¿Por qué yo?"
Lauren se puso de pie y se sentó en la orilla de su escritorio. Cruzo los brazos sobre el pecho.
"Porque eres la mejor de todos." Dijo Lauren y Ally sonrió triunfal.
Se encogió de hombros y saco la paleta de su boca.
"La próxima vez que te burles de mi frente a todos te voy a recordar este momento, soy la mejor." Dijo Ally recordándole a Lauren una fiesta dos semanas atrás donde aprovecho para burlarse de un maquillaje que había hecho para una película de terror.
El maquillaje no le había quedado mal, pero la película era terrible, aunque le habían pagado muy bien. Lauren simplemente no podía dejar de reír al enterarse que Ally había trabajado en ella.
"También podría enterarse Stefani de lo que voy a hacer" Lauren volvió a fruncir el ceño al escuchar esas palabras de Ally "Con lo psicópata que es, seguro las asesina a las dos."
"Prometo no volver a reírme de la película donde participaste." Dijo Lauren dándose por vencida.
Sabía que Stefani no era una psicópata asesina, pero aún así no quería arriesgarse a ello.
Ally tomo su caja metálica y camino hasta dejarla sobre el escritorio, dentro de la caja había cientos de cosméticos diferentes de marcas altamente reconocidas. Saco uno de ellos y descubrió el cuello de Lauren para comenzar el proceso de maquillaje.
En los vestidores del estudio, Camila estaba sentada observando su reflejo en el espejo. Las demás chicas se apresuraban para vestirse, algunas otras ya estaban siendo maquilladas o peinadas para la sesión. Ese día iban a hacer la publicidad para una importante marca de bolsas femeninas. Todas tenían que lucir elegantes y ejecutivas.
