항상 너 º 𝗞𝗼𝗼𝗸𝗠𝗶𝗻

18.

Habían pasado tres días y debido a la sorpresa que le tenía a Jimin solo me comunique con él por chat.

Hace dos horas que llegué a la casa de Jin.— Deja de observar por la ventana, lo más probable es que este viendo una película o en casa de Tae. — Habló hyung mientras yo un poco cansado cedía y bajaba de nuevo las persianas verdosas de su casa. Y así pasaron más y más horas, pensando en ese pequeño rubio que me tenía verdaderamente enamorado, pensando como volverlo solo mío y de nadie más.

Pov JM.

Tae me invitó a una fiesta junto con Hoseok, no sabía el por qué Kook no podía venir, así que accedí a ir con aquellos dos.
Íbamos llegando, traía puesto unos pantalones rojos ajustados con tirantes y una camisa levemente arrugada color blanca.

Todos bailaban y las luces reflejaban poco a las personas, había alcohol por todos lados, y yo difícilmente me senté junto al mini bar donde un señor no tan mayor atendía a chicos con su pareja o solo chicos bebiendo.

— ¿Por qué tan solo? Si te vez espectacular Park Jimin.— Aquella voz me hizo salir de mis pensamientos, al girar la mirada una persona, de piel tan bellamente bronceada estaba sentado justo delante de mi.— ¿No me quieres contestar?

— Aléjate Baekhyun.— Dije demandante y tratando de pararme de mi silla.

— Tranquilo bonito, vine a hacer las paces contigo, fui muy grosero anteriormente — acercó uno de los vasos que tenía es su mano.— Brindemos y seamos amigos, ¿si?

Una.

Dos.

Tres.

Cuatro. 

Solo cuatro brindis por mi nueva amistad con Baek y yo no paraba de bailar, aún seguíamos juntos, era divertido hasta cierto punto pues de vez en cuando quería acercarse más de la cuenta, pero yo lo alejaba. 

Había perdido de vista a Tae y de Hobi hyung ni se diga.

— Bailemos la que siga — todo giraba alrededor de mi y Baekhyun quería seguir y seguir bailando.

— La última porque me tengo que ir... Hip!! — me reí y el ya nombrado me llevó al centro de la pista.

De repente comenzó una canción demasiado lenta y las parejas no esperaron para mostrarse frente... Yo miré repetidamente mi asiento insinuando a Baek que fuéramos a sentarnos, pero no fue así porque él ya me había tomado por mi cintura.

— Bailemos... — su aliento a alcohol me dio un poco de náuseas, negué levemente.

— No, supongo que ya bailamos mucho — tomé las manos que me abrazaban pero las endureció aún más pegándome a su pecho. —Esto es incómodo Byun —.

Y como por arte de magia la música cambió a una con muchísimo más ritmo, pero creo que ahí empeoro todo, todos se empujaban y cada vez saltaban con mucha energía, sentí las manos frías de mi acompañante tomar mi cara, un poco de rubor en mis mejillas apareció y en menos de dos segundos sentí sus labios pegados a los míos, al contrario de los de Kook estos eran igual de fríos que sus manos, no tenía ningún tipo de reacción a su caricia y comencé a alejarlo de mi, pero él ponía resistencia, mordí su labio con rabia y el sabor metálico de la sangre comenzó a esparcirse por mi boca.

— ¿Qué diablos crees que haces? — grité.

— Lo que pedías casi rogando durante toda la noche bebé —.

— Estás loco — quise salir de ahí pero de verdad no sabía ni por donde caminar. Así que me armé de valentía para enfrentarlo pero todo se volvió raro.

Todo estaba nublado, todo giraba.

Un Baekhyun derrumbado en el suelo... yo solo gritaba que se detuviera.

— ¡Basta Jungkook! — lloraba, Tae de repente llego a mi lado... y no recuerdo nada más.

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❅.