Lazos 🎀 Seventeen

Epilogo

-Y así tu padre y yo estamos juntos- dijo Jeonghan acariciando la cabeza del pequeño Minki.

-¿Y luego que paso?- pregunto el pequeño de 6 años.

-Muchas cosas- dijo Seungcheol envolviendo al pequeño en unas sábanas –Pero nada que sea relevante para ti-

El pequeño hizo un puchero y bostezo.

-Buenas noches- le dijo Jeonghan mientras le daba un beso en la frente, Seungcheol hizo lo mismo y abandonaron la habitación.

Ambos se fueron a la habitación matrimonial y se recostaron juntos.

-Bien, cuéntame ¿Qué tal todo con el trabajo?-

-Estuvo normal, hoy fue Jihoon a su control y su bebé está creciendo sano- dijo Seungcheol mientras acariciaba el vientre de Jeonghan.

-Aun no creo que esos dos ya tengan tres hijos- Jeonghan rio levemente, últimamente casi ni podía moverse.

-Si- Seungcheol beso la mejilla de su pareja –Supe que estuvo Wonwoo aquí y atrajo a Sunji-

-Sunji es tan linda, jugó toda la tarde con Minki-

-¿Qué tal están?- pregunto el alfa.

-A Mingyu parece irle bien en su trabajo y Wonwoo está mejor de ánimo, además que con la herencia que recibió tienen para vivir de aquí a cinco vidas más- Seungcheol rio levemente y siguió acariciando el vientre de su marido.

-¿Cómo te has sentido?-

-El bebé se mueve mucho, parece que será un buen atleta. No logro hacerlo que se quede tranquilo- Jeonghan acaricio su vientre, ya tenía seis meses y el bebé no se quedaba tranquilo.

-¿Podrás dormir?-

-Sí, no te preocupes- Se acomodó para dormir.

-¿Y mi beso de buenas noches?-

-No eres Minki, ya crece, Seungcheol-

🎀

Agradecimientos:

Muchas gracias a todas las personitas que lograron llegar hasta aquí sin irse, de verdad se los agradezco por haber leído esta novela tan puberta.

Gracias a todxs, de verdad, sin ustedes no hubiera logrado llegar tan lejos.

Muchas gracias a quienes siempre comentan en los capítulos, me divierto mucho leyendo sus comentarios y me alegran mucho el día.

Espero seguir escribiendo novelas y si desean pueden seguirme para más novelas, de verdad tengo muchas más en mente.

No me queda más que decir nuevamente: Gracias.