Capítulo 7

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La adolescencia era una época muy similar a una montaña rusa. Estaban los desórdenes hormonales, las dudas existenciales, pero sobre todo estaban los benditos celos.

Los omegas y alfas presentaban sus primeros y más dolorosos celos, sus cuerpos se adaptaban a la fertilidad. Sin embargo lo más horrible eran los calores, un momento durante el celo que el apetito sexual despertaba de manera casi animal.

Y pues, el grupo de amigos no se quedaría exento de aquella horrible edad.


* * *


El primero en entrar en celo fue el mayor del grupo, obviamente.

Seungcheol había viajado a Daegu y de un momento a otro su celo llegó.

Fue lo más doloroso que sintió en su vida. Ni los supresores más fuertes, ni las infusiones extrañas de su abuela habían logrado calmarlo.

Su cuerpo anhelaba otra cosa.

Intento hasta tocarse para ver si el dolor cesaba, pero nada servía.

-Quizás tu omega está cerca y tu alfa lo está llamando- habían sido las palabras de su abuela, la vieja estaba un poco loca por lo que su padre le dijo que solo debía ser por sus hormonas.

Pero al alfa le fue inevitable pensar en la vainilla luego de las palabras de su abuela.


* * *


El siguiente no fue Jeonghan, fue Wonwoo, pero su celo sin dolor ni alteración tenía una razón.

Cuando Wonwoo cumplió 10 años, su padre se dio por vencido, su hijo se había presentado como un omega. Sin embargo, su negación al tema era tal que logro convencer a todos los que le rodeaban que su hijo, que su único heredero era un beta.

Incluso el mismo Wonwoo se creyó a tal punto aquella mentira que los neutralizadores eran parte de su rutina, que el no agachar la cabeza ante un alfa era una obligación y que su aroma a coco ya no existía.

Su médico personal le dijo que su fertilidad estaba bien a pesar de no presentar los síntomas del celo.

Biológicamente estaba bien, pero psicológica mente hablando, no.

Comenzó a odiar sus instintos omegas, a odiar su propio aroma y a despreciarlos como lo hacía su padre.

Aunque su mayor siempre sería la excepción.


* * *


Cuando Soonyoung entró en celo, ni siquiera se había recuperado del reciente rechazo. Así que todo ese período se basó en llorar entre sus peluches y comer chatarra preparada por su madre.

Y bueno, que decir de Seokmin...

Ese chico ni siquiera pasaba sus materias, menos iba a entrar en celo.

Pero, llegó el momento en que Jeonghan entró en celo, lo cual fue un poco... Diferente a los demás.


* * *


Iba a visitarlo después de tres días desde que el omega se había ausentado, sin dar señales de sus razones, por lo que Cheol asumió que a su querido amigo las defensas y fuerzas le habían vuelto a fallar.

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