Deseo Prohibido (Michaentina 💜)

FINAL DE TEMPORADA

Michael

8:15 am

Tomo una taza y espero a que la última gotita de café caiga, la tomo por la manija y lleno la taza casi hasta el borde.

Me prendo la camisa y me peino el cabello mirándome detenidamente en el espejo. Los ojos me pesan, es temprano. De solo pensar con el tráfico que me voy a topar ya me pongo de mal humor.

Me tanteo los bolsillos del pantalón con mis manos fijándome si por alguna casualidad mi celular está dentro. No. Otra vez. Otra vez no recuerdo dónde lo dejé.

Bufé. Corrí a mi habitación. Quite todas las colchas y sábanas de la cama. Esto suele pasarme todas las mañanas de todos los días del calendario. Salió desprendido hacia cualquier lugar del suelo.

Di unos pasos. Me agaché y lo tomé.

Encendí la pantalla. Por suerte estoy bien de tiempo. No hay rastros de sus mensajes.. ni llamadas.. absolutamente nada.

De solo pensar que hayan pasado la noche juntos se me revuelve el estómago.

Tomé las llaves de arriba de la mesa de luz, las guardo en mi bolso fijándome si no me falta nada más.

Pasé por la cocina para terminarme el café. Me puse la campera de Jean, me perfumé un poco, apagué las luces, salí al pasillo y tranqué la puerta.

Bajé al parking. Busqué mi auto y me adentré. Tiré el bolso para los asientos de atrás y suspiré. No tengo mucha energía positiva hoy.

Manejo hasta el estudio mientras escucho un poco de música de la playlist. Creo que tengo que actualizarla un poco.. tengo bastantes canciones que justamente para hoy no me aportan nada bueno.. no si la extraño.

En cuestión de minutos llegué. No hubo tanto tráfico como yo pensaba.

Entré al estudio dándole los buenos días a todos. Es lindo ver el movimiento de gente que hay por esto. De verdad es hermoso.

Pasé por el camerino. Me sorprendí al ver a Melissa ya maquillándose, siempre es la que llega última.

La saludé con un beso en la mejilla animadamente.

— Tu.. ¿Que haces despierta tan temprano?— le pregunto sonriendo mientras me siento a su lado en un sillón.

— Ni yo lo sé.. agradéceme.— suelta divertida mientras comienza a pintarse los labios.

— y... ¿Tu amiga?— interrogo sin querer nombrarla.

— La verdad ni idea.. ayer la perdí en el baile.. capaz que se fue o se quedó en lo de mía.— asiente mientras acomoda su cabello.

— Mía..— río con ironía.

Tenso mi mandíbula cuando la veo pasar por la puerta aceleradamente. Vestida de equipo deportivo gris y con un bolso en la mano que segundos después lo tiró sobre una silla. Su respiración agitada. Puedo deducir que venía corriendo. Un poco despeinada y con lentes de sol negros.

— Acá vino y con resaca.. uff.— se burla Meli.

— Cállate idiota..— la rubia le corta totalmente la onda.

— y de mal humor... Prepárate mentalmente para bancartela todo el dia..— vuelve a reír.

Se levanta de su asiento. El resto de los coreógrafos la llaman para repasar antes de empezar y se va.

El silencio invade toda la habitación.

No sé qué decirle.. ni que preguntar.. ni de qué hablar.. es todo bastante incómodo. En las mañanas el cerebro tarda en arrancarme a funcionar y a proyectar conversación.