Dylmas/Newtmas One-Shots.

dirty habits. || newtmas

Este capítulo es SOLO smut ( top!newt ) y es bastante intenso, así que si no te sientes cómodo/a leyendo este tipo de cosas quedas avisado/a. <3

Newt se dirigía con paso firme a la entrada del gran edificio de ladrillos rojos. Las baldosas retumbaban a su paso, y a su mayordomo, que le estaba sujetando el paraguas, le chapoteaban los pies por llevar calzado barato e inadecuado para este tiempo. La multitud les dejaba pasar sin preguntar; todo el mundo conocía al nieto de la Reina de Inglaterra, al fin y al cabo.

El guardaespaldas, un hombre robusto, de aspecto peligroso pero muy amable, le hizo un hueco a ambos hombres para que pasaran al club. Entraron a una especie de pequeño pasillo mal alumbrado, en el que otra persona les estaba esperando para coger sus abrigos y colgarlos en el perchero. Una vez hicieron esto, decidieron bajar con cuidado por las pequeñas escaleras. Cuando llegaron al final de estas, luces brillantes de colores rojizos, rosados y morados les deslumbraron, haciendo a Newt sonreír.

Adoraba la atmósfera de este club en particular; no era como si no hubiera ido a cantidad de distintos clubs homosexuales antes, pero Le Petit Plaisir era su favorito de todos, por excelencia. Los bailarines eran estupendos, a cada cual más hermoso y talentoso que otro, y en la cama solían ser tan increíbles y sumisos que al travieso de Newt no le quedaba otra que dejarse llevar por todos sus fetiches. Era uno de los clientes favoritos, tanto de los dueños como de los bailarines, no solo por ser un VIP, sino por su carisma y su manera de tratar con la gente. Siempre era cuidadoso y amable, al fin y al cabo había sido educado de buena forma.

La sala estaba medio llena, con hombres tanto de su edad como mayores, sentados en los acolchados sillones en forma de corazón, bebiendo de todo. Desde vino hasta whisky o ron con cola. Había tres plataformas circulares: una grande en medio y otras dos más reducidas a los lados. Eso sí, todas con sus respectivas barras. El dueño le había hablado recientemente de las reformas que quería hacer para que pudieran meter otra plataforma pequeña, pero por lo visto el proyecto aún no había llegado a ningún sitio.

Mientras observaba el lugar se dio cuenta de que Alfred, su mayordomo, había ocupado ya un asiento y estaba esperando a que él hiciera lo mismo, así que lo hizo. Un camarero muy amable y con muy poca ropa se acercó a él meneando las caderas para traerle el coñac usual que bebía cuando venía. Newt le dejó sentarse encima de él y jugar por un rato, pero en cuanto el bartender los vio mandó al chico de vuelta al trabajo, ganándose unos ojos en blanco por su parte. Pidió perdón al rubio por haberle interrumpido, a lo que Newt hizo un gesto con la mano restándole importancia, sabiendo que alguien le daría la acción que buscaba después.

" Han cambiado muchas cosas desde la última vez que viniste, hermano. " le dijo Jorge, el dueño, mientras se aproximaba a él con un whisky con hielo en la mano. Se sentó a su lado y dirigió la mirada a la gran plataforma, de la que estaba a punto de salir el bailarín estrella de la noche. Sus ojos estaban expectantes, y Newt se preguntó cómo de impactante debía ser el cambio si incluso Jorge estaba deseando que lo viera.

" Espero que tan solo buenos. " contestó tomando un trago de su bebida, analizando con cuidado los gestos faciales de su amigo, notando como una pequeña sonrisa traviesa se dibujaba en su rostro.

" Oh, créeme, cuando conozcas al chico te darás cuenta tú solo. "

" ¿Qué chico? " se irritó el rubio, al que no le gustaba que las cosas estuvieran jamás fuera de su control. La curiosidad estaba comenzando a carcomerle por dentro.

" Se llama Thomas. No has tenido el placer de verle bailar pero... Lleva siendo la estrella desde hace al menos un mes. " analizó el terreno con la mirada, y cuando se dio cuenta de que nadie les observaba demasiado, y que solo se encontraban en presencia de Alfred, se acercó al oído de Newt para susurrarle. " Incluso Minho se ha puesto celoso. "