Levi Ackerman [One-shots]

5 [✔️]

[Primavera]

Advertencia: Triste (?)

Nota: Inspirado en los últimos capítulos del anime "Shigatsu waki mi no uso"

Tiempo en el que ocurre: Actualidad.

No. Palabras: 1657

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La brisa de aquella mañana movía con delicadeza las ramas de los árboles de cerezo, el sol brillaba y el cielo estaba completamente despejado casi podría jurar que la temperatura de aquel día seria perfecta para ir a un día de campo.

Todo se veía tan hermoso que podías sentirte afortunado de estar ahí y poder salir y apreciar con tus propios ojos el bello paisaje que la naturaleza nos regalaba, lastima que yo solo podría apreciar toda esa belleza a través de una ventana de hospital.

-¿Qué tanto miras?.

Alguien hablo a mis espaldas, una voz serena y profunda la cual conocía a la perfección.

Volteo lentamente solo para encontrarme con él. Levi, mi fiel amigo, parado en el lúmbral de la puerta mirándome con aquellos ojos grises que no mostraban ninguna emoción.

-Nada-conteste.-solo miraba el bello paisaje- susurre.

Él no dijo nada, entro a la habitación cerrando la puerta detrás de él y se sentó junto a mi.

-¿Te escapaste otra vez de la escuela?- pregunte una ves que llego a mi lado.

-No, ¿por que la pregunta?-respondió con tranquilidad.

-Aun traes el uniforme- conteste mirándolo de pies a cabeza.

Él suspiro.-solo salí temprano y decidí venir- saco unos cuaderno de su mochila.-tienes mucha tarea que hacer, vas muy atrasada.

-Lo se.

-¿Por que no has tomado tus medicinas?- pregunto él mirando detrás de mi.

Ahí se encontraba mi mesa de noche en esta había un vaso con agua y una caja de pastillas.
No conteste, hubo un pequeño silencio entre los dos que me hizo sentir algo incomoda.

-Necesito que te recuperes pronto- dijo Levi caminando hacia la mesa de noche.-el baile de primavera esta cerca- tomo el vaso y las pastillas.-y tu dijiste que iríamos juntos- me acerco el vaso.-como amigos.

Me miro a los ojos y pude ver un pequeño destello en ellos el cual era de preocupación. Solté un suspiro y tome las pastillas junto con el vaso para tomarlas.

[...]

La oscuridad de la noche se hacia presente y yo estaba recostada en mi cama mientras tarareaba una pequeña melodía, esperaba a mi madre para que me dijera cuando podría abandonar aquel lugar pero estaba tardando demasiado.

Un sollozo interrumpió la calma que inundaba aquel pasillo de hospital, alarmada por el sonido decidí acercarme a ver que era lo que pasaba, con cuidado me levante de la cama sin hacer mucho ruido y me acerqué a la puerta para abrirla y poder mirar al pasillo.

Ahí en la sala de espera se encontraba mi madre sentado en una silla con las manos sobre sus ojos ocultando sus lágrimas y tratando de callar sus sollozos, el Doctor frente a ella trata de "consolarla"

-Lo siento mucho señora, pero no hay nada que podremos hacer por ella.

Con esas simples palabras supe que el tiempo que tenía era poco.