Bailando sobre nieve// Miriam²

No eres estupida

- ¿ ella te ha dicho que vaya a irse a trabajar contigo?- porsupuesto que si la respuesta era afirmativa, miriam se iba a cabrear, se iba a cabrear muchisimo, asi que tenia todas sus esperanzas puestas en que el tipo que tenia delante le aclarara este punto, lo suficientemente importante para ella

- Si, bueno, no claramente, me ha dicho que se lo pensaria. Pero espero que eso no sea un problema para ti.

Tirando de toda su paciencia, de absolutamente toda, y claro con el alma un tanto mas tranquila al saber que tenia un tiempo para convencer a mimi de que no se fuera con el.

- Confiemos entonces en el buen criterio de la señorita doblas. Siento disculparme de nuevo, pero me esperan. Estaremos en contacto

Sin darle ningun tipo de espacio o tiempo a replica, se dio la vuelta, y al fin logro cruzar la puerta del club. Por un momento pudo sentir como le temblaba el pulso, a ella, algo se le estaba escapando de las manos. Miriam no acostumbraba a tener nada fuera de control, ¿que le pasaba con el tema de mimi ? Tenia que tirar de toda su frialdad, no podia permitirse el lujo de sentirse asi con ella, tan debil, tan vulnerable , al menos no alguien como ella. No alguien con su trabajo. Miriam rodriguez no podia tener debilidades.

Se encamino hacia el ascensor, mientras enviaba un mensaje a ricky, para avisarle de que ella y aitana lo esperaban en el despacho. En cuanto llego  , esta la esperaba algo intranquila

- ¿ que pasa miriam ? ¿ estas bien ?- al menos mientras estaban solas, podia permitirse el lujo de tratarla algo mas " amigable" que delante del resto de la gente.

Miriam entraba en el despacho, encaminandose hacia el armario que tenia detras de esa mesa, abriendo una de las puertas, sacaba una botella de whisky sirviendose uno, se lo bebia de un trago, y se volvia a servir otro

- Ricky esta viniendo hacia aqui, tengo que hablar con vosotros.

Aitana se limitaba a observar, y a esperar, eran pocos los momentos en los que veia a su hermana tan nerviosa, o alterada, asi que entendia que era mejor no forzar demasiado la situacion, al fin y al cabo miriam sabia que ella la apoyaba en todo, y que la ayudaria en lo que necesitara si ella se lo pedia. Se querian, tenian una relacion un tanto extraña, pero se querian muchisimo.

El sonido del ascensor llegando la despacho, hizo que las dos se giraran para ver a ricky entrar. Lejos de entrar cohibido, cualquiera habria apreciado que estaba hasta algo cabreado, cosa que a aitana le sorprendio, ella ya no podia sentirse mas perdida ¿ que pasaba aqui ? ¿ que pasaba entre ellos dos ? ¿ y que pintaba ella aqui ?

- Ricky....- miriam lo saludaba haciendole un gesto con la mano para que los dos se sentaran y lo hiceron, en el sofa, mientras ella se quedaba apoyada en la mesa, bebiendo su vaso de whiskey

El mallorquin la miraba algo desafiante, y ella sabia mas que de sobra porque lo hacia, ya habian mantenido unas palabras no demasiado agradables sobre este tema, y ahora que habia logrado con sus actos que mimi se fuera, con mas razon estaria enfadado.

- Aitana no se que parte es la que conoces de esta historia, pero necesito que me ayudeis en algo - aitana torcia el gesto confundida

- ¿ que te ayudemos ? ¿ en que exactamente?- era ricky el que se dirigia a ella

- Ricky, vamos a dejar esta actitud estupida ¿ vale ? Me equivoque, y lo asumo, yo tambien me equivoco- ricky abria los ojos sorprendido, si algo tenia miriam era que muy pocas veces admitia que se habia equivocado, normalmente intentaba solucionar las cosas antes de admitir que dentro de su perfeccion habia cometido un error- y si, siento haberle hecho daño

Aitana los miraba a los dos, aunque parecia que cada vez entendia mas lo que pasaba, si juntaba lo que estaba pasando alli, con las palabras de mimi, podia encontrar un sentido a las cosas. Un sentido mas que logico, aunque miriam nunca se habia sentado a explicarle de que forma trataba a las mujeres que se llevaba a la cama, claro que a ella tambien le habian llegado rumores de algunos habitos que tenia.