Escape II

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Emma:

Empaco todo lo que puedo en una mochila, lo primero que meto es mi computadora. Cómo pude creer en Carlisle, lo detesto, debí suponer que haría algo así.

Le envío un mensaje a Arti pidiéndole perdón por usar de mala manera nuestro servidor y que lo quiero con todo mi corazón.

Cierro la mochila y me voy a la cárcel.

~*~

Son las ocho de la mañana cuando me instalo en mi lugar, saco mi computadora y alerto a su amigo.

«Hola, soy CAE, ve a la siguiente dirección a las cuatro en punto, no llegues tarde o podrían matar al Malo»

La respuesta no tarda en llegar.

«Tal vez él confíe en ti, pero yo no»

Aprieto los dientes, este es un tonto.

«Haz lo que te digo, Kenet matará al Malo a las siete de la noche, suele llegar dos horas antes de la gran revelación, así que ve»

Cierro la computadora con fuerza y me pongo a preparar todo, haré que todas las rejas y todas las puertas se abran veinte minutos antes de las cuatro, conociendo a los presos irán directamente a la puerta central, sé que el Malo entenderá que debe buscar otra puerta mientras todos intentan huir por ahí y los guardias se concentran en la puerta.

Veo la foto de Tara en mi escritorio, al fin podré vengar su muerte, que mejor que arruinar su tan ansiado momento de victoria.

Escucho que mi teléfono suena, me sobresalto un poco.

Es un mensaje de Arti.

«¿Qué estás planeando, Emma Ally?»

Le respondo de inmediato.

«Siempre te burlaste de mí por no enamorarme de nadie, pero estaba enamorada de tu hijo, nunca nadie lo notó, solo Carlisle y trató de usar eso para que odiara a Clara cómo él lo hace. Hoy quiero que seas el único que sepa que me enamoré de nuevo, no puedo decirte quién es, pero sé lo que siento. Te amo como si fueras mi papá, tú eres mi único papá, Arti, gracias por todo»

Tiro el teléfono al suelo y lo piso para poder perder todo contacto con el mundo.

Vuelvo a guardar mi computadora y me escabullo por los pasillos, a esta hora el Malo está en las duchas. Me meto a su celda, no sin antes poner un vídeo para no levantar sospechas y le dejo una nota diciéndole hacia donde debe correr. Tomo el teléfono que le di para que hablara con sus chicos, no debe haber una pista con la que puedan encontrarnos.

~*~

Son las tres con treinta, solo faltan diez minutos para que esto sea un caos. Alguien toca la puerta.

—Pasa.

Entra una chica y trae un teléfono inalámbrico.

—Su padre le llama.

Tomo el teléfono y contesto como si nada.

—Aquí Kenet.

—Dime que traes algo lindo, de lo contrario usarás un vestido corto, sé que adoras los vestidos.

Suelto el aire.

—Traigo mi blusa blanca y mi pantalón negro, para mí es lindo.

—Hoy hablaremos con el geek, le sacarás toda la información que tenga, tienes que enamorarlo, Emma.

—Haz lo que gustes, papá, te dejo, tengo dos nuevos presos que procesar.

Cuelgo el teléfono y veo la hora, faltan cinco minutos, es mejor empezar con todo esto.

La hija del coronelWhere stories live. Discover now