Querer

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—Yoongi ¿Me acompañas a la academia de Hoseok?

 Jungkook le preguntó esto a su hermano de manera totalmente inocente, quien lo miró de manera asesina, considerando que había discutido toda la mañana con Shooky de que no pensaba llevarlo a ese lugar a ver a Jimin, y menos  desde que la galletita le había aventado el celular mientras dormía.

Pero cuando su hermano le pedía algo, era difícil negarse, y aunque todos sus sentidos querían decirle que no, se llevó una mano a la cara por la frustración — ¿Es necesario? ¿Por qué nos vas con Suwoong? ¿O solo? Ya te manejas bastante bien por la ciudad.

Jungkook hizo una mueca con la boca y bajó un poco la cabeza. No es que haya discutido con Suwoong de nuevo pero su novio le había dicho que tenía que estudiar y no podía negar que no le había molestado mucho, en realidad consideraba que sería bueno que tengan su espacio el resto del día. Aún así, no quería ir solo. Empezar algo nuevo no se le daba bien y necesitaba algo de apoyo moral, sobretodo de su hermano. Desde que Suwoong había vuelto no habían pasado mucho tiempo solo los dos.

—Suwoong tiene que quedarse a estudiar para un examen ¿No me puedes acompañar? Luego podemos pasear un rato...

Demonios. Tanto Jungkook como Cooky a su lado estaban haciendo cara y voz de lastima mientras repetían "Por favor~" una y otra vez. Ya había perdido, evidentemente. Cuando miró hacia Shooky, quien estaba en la mesa del living escribiendo en su cuaderno "No debo arrojarle cosas a Yoongi mientras duerme" castigo común impuesto por el mayor cuando su acompañante cometía alguno de sus actos vandálicos, este lo miró con su gran sonrisa de victoria, seguramente ansioso de oírlo perder nuevamente contra su hermano pequeño. Por un momento pensó en dejarlo solo en la casa, pero capaz era mejor matar dos pájaros de un tiro y llevarlo para que se tranquilice.

— De acuerdo, vamos—  suspiró, simplemente levantándose de la comodidad del sillón para tomar sus cosas, sin querer ver mas rostros de satisfacción ante su debilidad.

Jungkook chocó los cinco con Cooky y se dirigieron a tomar sus cosas para salir. Por otro lado, Shooky saltó de la silla y fue corriendo con toda la fuerza que sus patitas le permitían hasta la habitación para sacar su celular de donde  lo había escondido Yoongi (debajo de la almohada, poco impresionante) para escribirle a Jimin que estarían allí en solo un rato mas. Volvió a esconder el celular y se dirigió hasta la entrada para pegarse a Suga y que no se le ocurriera dejarlo ahí. El pelinegro dejó salir otra exhalación profunda y lo agarró del cuerpito redondo para dejarlo sobre su hombro. 

 — Aún sigo enojado contigo—  le comentó, una vez estuvo el pequeño estuvo acomodado.

  — Y yo también— le respondió la galleta, con una enorme sonrisa en el rostro, que dejó confundo al mayor, pero prefirió ignorarlo antes de indagar demasiado que le pasaba por la cabeza a su complicada alma ese día.

+

Jimin vio el mensaje de Shooky cuando terminó su tercera clase del día. Supuso que no tardarían mucho mas en llegar y cuando le comentó a Chimmy, el pequeño cachorro no cabía de felicidad. Como tenían tiempo libre antes del próximo horario, decidió salir a supervisar otras clases. La academia de Hoseok llevaba ya seis años y habían iniciado solo ellos dos en un pequeño estudio, pero fueron agregando mas profesores y ritmos distintos con el tiempo hasta que les quedó chico y lograron mudarse a un lugar mucho mas amplio y actualmente eran diecisiete profesores los que daban clases de lunes a sábados, desde la mañana hasta la noche. Debido a eso, tanto Hoseok como Jimin pudieron concentrarse en sus clases únicamente (hip-hop y contemporáneo, respectivamente) pero siempre supervisaban y visitaban otras clases en sus tiempos libres.

Los leales ➳ BT21&BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora